Ya he dicho varias veces cómo, en algunos aspectos concretos, el covid es deseable. Es evidente que en general es un drama monumental, pero de todo se puede sacar algo bueno, incluso de esto. Hoy les quiero explicar la oportunidad que supone este virus. Dentro hilo.
La humanidad llevaba un par de décadas aletargada: no teníamos grandes crisis, con lo cual íbamos por la historia, sin ningún progreso significativo, sino todo lo contrario. La desigualdad al alza. El cambio climático sin tratar. Y la gente haciéndose fotos memas en Instagram.
Éramos como ese señor que, por falta de incentivo, no hace deporte. Poco a poco va engordando, y se va abandonando. De repente, le dicen que tiene colesterol, y se da cuenta que tiene que volver a hacer deporte. Pues el Covid ha hecho algo parecido con la humanidad.
De repente nos ha hecho darnos cuenta de quién es útil y no lo es en nuestros gobiernos. Nos ha hecho darnos cuenta de que necesitamos médicos. Nos ha hecho darnos cuenta de cuidábamos mal a los abuelos. Nos ha hecho ver que, sin coches, no hay contaminación.
El Covid es la bofetada que la humanidad necesitaba. Es obviamente una pena el precio en muertos que hay que pagar. Pero precisamente por respeto a esos muertos sería bueno pensar en la oportunidad que nos ha dado el Covid. Y aprovecharla. Les doy ejemplos.
Cambio climático: resulta que la contaminación ha bajado. Mucho. Sería inteligente aprovechar que el covid ha cambiado nuestros hábitos, para no recuperar los viejos hábitos una vez el covid se retire. Leo con interés que Ada Colau va a ampliar aceras, y reclamar….
… algunas calles. Y yo digo: Ada, sé valiente. Imagina que coges Barcelona, y sólo mantienes como calles para coches una de cada cuatro. O sea, 1 calle coches, 3 peatonales. Y en esas calles peatonales, sólo un carril para coches, y sólo para entrar y salir de parkings.
Así, sales de tu parking, llegas a la primera calle “de tráfico”, y sigues por ahí. O sea, reduce la capacidad de coches de la ciudad a ¼. Y el resto, que se compren patinetes, bicis, vayan a pie. Es obvio que el problema son los coches? Arréglalo, el covid te da la oportunidad.
Un ejemplo histórico: Japón, como todo el mundo sabe, perdió la Segunda Guerra Mundial. Todas sus ciudades, sin excepción, quedaron arrasadas. Se le prohibió tener ejército. Pero Japón supo ver la oportunidad: redirigió toda su energía a la fabricación y la innovación.
De ahí salen la Sony (fundada en el 46), Toyota (37), Toshiba (39). En diez años, el mundo entero consumía tecnología japonesa. Japón vio en la pérdida de la guerra una oportunidad. Con el Covid, sucede lo mismo. Les pongo otro ejemplo: productos para consumo doméstico.
Es evidente que vamos a pasar más tiempo en casa. Vale, podemos llorar y lamentarnos. O pensar: qué necesita alguien que está en casa? Tiendas online, por ejemplo. Ahí hay una oportunidad. Y no me digan “es que todo lo copa Amazon”: no es cierto.
Tradeinn, de Girona, procesa 7500 encargos al día en sus stores online de productos deportivos. Castelsarás, en Teruel, es el pueblo de España con más tiendas online (elconfidencial.com/tecnologia/201…). Señores del gobierno, apoyen eso, es el futuro nos guste o no.
Ahí hay una oportunidad de a) explotar la vida confinada b) crear riqueza en un municipio que seguramente la necesita. Ven? Los mayores dramas esconden grandes oportunidades. Y sigo: es evidente que, en una vida más doméstica, los hábitos de deporte van a cambiar.
Ahí hay una oportunidad de crear “gimnasios remotos”: cada cual, en su casa, conectado por videoconferencia con un profesor real que te da instrucciones y te motiva. No sólo es viable: es posible que sea hasta MEJOR: menos costes de estructura, más privacidad..
Cuidado, no sea que el Covid de hecho nos permita inventar productos y servicios MEJORES que los que ya teníamos. No se lo creen? Vale, entonces explíquenme por qué Peloton, una empresa americana de bicicletas estáticas remotas, ha *duplicado* su valor en 2 meses.
Peloton tuvo la visión (antes del covid) de pensar que hay gente que quiere hacer spinning, pero prefiere hacerlo desde casa. Les venden la bici (conectada), y tu puedes seguir la sesión que se emite desde su gimnasio en NY por videoconferencia (onepeloton.com)
Ni que decir tiene que se están forrando. Me recuerda a esa frase clásica de “cuando alguien señala a la Luna, el tonto mira el dedo, el listo mira la Luna”. Ante el covid, ha llegado el momento de dejar de pensar en el virus: el virus ES, el virus se quedará.
Pero tenemos que vivir en ese mundo. Y progresar en ese mundo. Ayer estaba yo dando una conferencia sobre innovación, y proponía diseñar un coche con un botón “disinfect” que meta la calefacción a una potencia extrema pongamos 80 grados, y con eso matase cualquier virus.
Evidentemente habría que salir del coche antes, y asegurarse de que fuese seguro para los componentes. Pero esa es la actitud, ahí hay una oportunidad: si este es el mundo que nos toca vivir, qué podemos inventar, crear o mejorar para crear un futuro mejor?
De esa respuesta, dependerá el éxito o fracaso futuro de las naciones y las organizaciones. Por ejemplo, España tiene una oportunidad de oro en el turismo. Pocos países tienen nuestra potencia en ese sentido. Sería inteligente reunir gente con buen cerebro para reinventarlo.
Cómo es el hotel post-covid? Y el restaurante? Y la playa? Y la discoteca? Y el transporte? Y el parque temático? Y el museo? Y el estadio? Todas esas experiencias van a requerir rediseños, replanteamientos. E, innovando, es posible que se descubran nuevos productos o servicios.
Imaginen que, por dedicarle esfuerzo, España encuentra la respuesta a alguna de esas preguntas. La riqueza y bienestar futuro que se generarían sería inmensa. Como cuando en los 70 los USA empezaron a crear ordenadores: vieron una oportunidad, y la explotaron.
Por tanto, dejemos de lamernos las heridas. No penséis “vale esto es una mierda, a ver qué hago para sobrevivir”. Pasad a pensar: “vale, esto es una oportunidad, cómo la aprovecho”? Es el mejor homenaje a los que nos han dejado. Y el mayor favor a las generaciones que vienen.
Espero que les haya gustado. Ha sido una semana de mierda, no voy a contarles mis miserias. Pero ya estoy de vuelta. Si le dan al Like, o me regalan un RT, contribuyen a mi plan de dominación mundial. Porque sí, tengo un plan. Otro día se lo cuento. Feliz Sábado!
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