Este bombazo de artículo salió ayer. Amy Dyess, lesbiana butch y ex "gender-crit" (como se llaman a sí mismas las terfs) cuenta el funcionamiento interno del movimiento y, para sorpresa de nadie, son una secta reaccionaria y misógina. Hilo resumen rápido
pinknews.co.uk/2020/05/17/ter…
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Su primer contacto con el término terf fue a través de tumblr, cuando le preguntó a una amiga por su significado, le respondió "es algo que llaman a las lesbianas por ser lesbianas".
Poco después, comenzó a leer sobre el tema en twitter, y una terf la abordó y comenzó a convencerla. Le enviaba "noticias" y publicaciones indignantes, para asegurar su radicalización. Periódicamente contactaba con ella para asegurar que no salía de ese estado de ánimo.
Como la propia autora destaca, llegaron a ella en un momento de vulnerabilidad, en el que no tenía hogar y dormía en su coche.
Se encontró en persona con esa terf por primera vez. Poco después, la unieron a varios grupos de chat de "líderes lesbianas internacionales".
Una cosa que aprendió allí es que las terfs constantemente ocultan su propia ideología. Ofrecen al mundo una versión descafeinada de esta mezclada con problemas reales a los que se enfrentan mujeres y lesbianas, con la esperanza de atraer la atención de gente vulnerable.
Y vulnerable es la gente a la que llega ese mensaje. Como la propia Amy dice, practican manipulación emocional, intentan crear una enemistad artificial entre la LGB y la T.
Las personas que empiezan a orbitar en torno al movimiento, a menudo gente desarraigada, deprimida y con problemas de autoestima, recibe un tratamiento llamado "love-bombing": halagos constantes, muestras de afecto, sensación de pertenencia a una comunidad.
En 2018, Amy escribió una publicación viral en Medium sobre cómo "terf" es un insulto misógino. Eso le ganó aún más el favor y los halagos de la comunidad. Era útil.
Ella estaba convencida de hacer el bien; pensaba que estaba defendiendo a las lesbianas de agresiones.
Sin embargo, pronto aparecieron las grietas.
Sin embargo, pronto aparecieron las grietas.
(CW abuso en este) Por un lado, recibía un bombardeo constante de "amor" y alabanzas. Por el otro, declara, la comunidad era emocional y sexualmente abusiva hacia ella. La luz de gas era constante.
Vivía, además, en su coche, en la pobreza. Los mensajes que le mandaba la comunidad "gender-crit" seguían intentando inspirar en ella odio hacia la comunidad trans.
Esta clase de cosas seguro que las habéis visto ya: memes con la "mala mujer trans" del día, predicciones apocalípticas, etc.
Pero Amy empezó a ver la homofobia del colectivo.
Pero Amy empezó a ver la homofobia del colectivo.
Empezó a ver cómo la LGB alliance recibía el apoyo de grupos neonazis y de extrema derecha.
Empezó a ver cómo muchos argumentos antitrans sonaban idénticos a argumentos homófobos.
El artículo contiene las fuentes, pero shameless plug a mi propio hilo.
Empezó a ver cómo muchos argumentos antitrans sonaban idénticos a argumentos homófobos.
El artículo contiene las fuentes, pero shameless plug a mi propio hilo.
Empezó a ver cómo los grupos "gender-crit" se aliaban con la ultraderecha evangélica y luchaban por eliminar grupos LGTB de los colegios.
Amy empezó a perder amigues en la vida real debido a su radicalización.
En el movimiento intentó hablar de sus experiencias de abuso a manos de otras mujeres.
En el movimiento intentó hablar de sus experiencias de abuso a manos de otras mujeres.
Al final, dice, fue la crueldad del movimiento lo que la echó para atrás.
Crueldad hacia ella, personalmente, pero también la crueldad con la que las líderes "gender-crit" hablan de la gente trans mientras se victimizan.
Crueldad hacia ella, personalmente, pero también la crueldad con la que las líderes "gender-crit" hablan de la gente trans mientras se victimizan.
Amy fue invitada a dar un tour por reino unido con el movimiento terf. Sus dudas se acumularon. Al final, dijo no.
Por supuesto, intentaron convencerla. Una de las líderes llegó a prometerle "una esposa" para que pudiera quedarse.
Por supuesto, intentaron convencerla. Una de las líderes llegó a prometerle "una esposa" para que pudiera quedarse.
Sin embargo, se fue. Si podéis leer inglés, el artículo es mucho más completo que mi pseudorresumen y contiene todas las fuentes.
Amy ya no se considera gender-crit, y considera que la red de las terfs es una secta.
Ha recuperado la relación con su círculo de amigues.
Ha recuperado la relación con su círculo de amigues.
No sé más de ella ni de su vida. Es posible que siga teniendo puntos de vista con los que no estemos personalmente de acuerdo en el campo de los derechos trans, pero ya no está radicalizada. Le deseo lo mejor.
He leído más testimonios de exterfs (o ex gender-crits).
No son necesariamente gente con la que simpatice o esté de acuerdo, pero no es algo personal. Para todos elles, el movimiento llegó en un momento de vulnerabilidad. Para todos elles, fue una comunidad cerrada y abusiva.
No son necesariamente gente con la que simpatice o esté de acuerdo, pero no es algo personal. Para todos elles, el movimiento llegó en un momento de vulnerabilidad. Para todos elles, fue una comunidad cerrada y abusiva.
La cuestión es que, como en los círculos incel, o la alt-right, o cualquier otro grupo de odio de internet, son movimientos hechos de gente diversa, y algunes de elles son personas que solo han encontrado apoyo allí.
Como con cualquier relación abusiva, abandonar esos movimientos puede ser una idea aterradora, son su única comunidad, y les han hecho sentir que nadie más les aceptará.
Pero hay salida.
Pero hay salida.
Vuelvo a enlazar el artículo por si a alguien le da pereza scrollear para arriba.
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lol
