Hay un método de #ciberbullying que consiste en “instrumentalizar” a un colectivo o grupo ideológico, azuzándolo falsamente contra la víctima, solo para que la acosen.
Ocurre tanto, que lo he bautizado #targeting (poner en el objetivo).
Es muy fácil en las redes sociales ⬇️
El bully busca a un colectivo social o grupo ideológico (generalmente, muy sensibilizado por una causa) y sitúan a la víctima como contrario a esa causa (señalándolo con material falso).
Así, los más fanáticos de la causa, caerán en ejército sobre la víctima, sin cuestionar nada
Antes de que nadie se escandalice malinterpretando mis palabras:
No estoy diciendo que todo colectivo o grupo ideológico sea un grupo de fanáticos.
Digo que en TODOS LADOS hay fanáticos, y que el #targeting consiste en explotar a los de un colectivo, dirigiendo su fanatismo.
Por ejemplo:
El bully hace un montaje de su víctima golpeando a una persona pelirroja y se lo manda a todas la asociaciones “contra la discriminación de l@s pelirroj@s”, con el texto “le pegó porque era pelirrojo”, dando datos y cuenta del usuario del objetivo.
¿Acto seguido?
Todo el público de ese grupo es muy sensible a ese asunto. Es muy fácil que algunos se indignen y no se paren a pensar que pueda ser mentira:
¡Es tan fácil hacer un RT!
¡Tan carente de consecuencias!
¡Tan poco peligroso!
¿Verdad? ☝🏼
Entre los que no saben que están ayudando a un bully (que inocentemente comparten, difunden y le dan repercusión) y los más fanáticos (que decidirán acosar a la víctima), ha comenzado una reacción en cadena de crecimiento exponencial.
El efecto de miles de fanáticos que te toman por objetivo, acosándote por las redes por un motovo falso, es asolador.
No van a pararse a escuchar que te atacan por una mentira, por mucho que se lo grites.
Van a lincharte y punto: “¡yo vi en el vídeo que pegabas a un pelirrojo!”
⚠️Si te llega contenido que te indigna
⚠️Te dirige específicamente contra una persona o entidad
⚠️Te llega porque estás muy sensibilizado con una causa
⚠️Y no tienes la ABSOLUTA seguridad de que no sea un montaje, ni esté alterado, sacado de contexto o malinterpretado...
❗️No lo des por verdadero
❗️No sientas odio
❗️No compartas
❗️No apoyes
❗️No le des “me gusta”
❗️No sigas al remitente
❗️Repórtalo
❗️Recuerda que hay consecuencias legales
❗️Referencia este hilo entre sus comentarios, para hacer reflexionar a aquellos que no sigan estos consejos
Ten presente:
Un solo RT puede generar cientos de lectores nuevos➡️cientos de lectores nuevos puede contener a dos fanáticos➡️dos fanáticos acosarán a la víctima 🎯
¡Recuerda que pueden estar usando tus sentimientos (y sensibilidad con una causa justa) para dañar a un inocente!
Os habréis dado cuenta de que no he puesto casos, ni reales, ni realistas (¿”asociación contra la discriminación de los pelirrojos”? 🤦♂️🤦♂️🤦♂️❤️👨🦰❤️👩🦰)
Eso se debe a que no quería condicionaros antes de preguntaros y animaros a contar vuestras experiencias:
¿Crees que has sido testigo de #targeting alguna vez?
¿Crees que alguna vez has participado sin querer en un intento de #targeting?
¿Alguna vez has compartido material (por tus redes y/o clientes de mensajería) que te entristecía/removía/decepcionaba/enfadaba/indignaba contra una persona o entidad en concreto, sin estar segur@ al 100% de que fuera veraz?
Toca mojarse con un comentario.
En unos días daré la respuesta:
Entre mis casos de #ciberbullying, ¿cuál crees que fue el colectivo social o grupo ideológico que más veces vi que utilizasen para hacer #targeting a un inocente, y que mayor número de fanáticos movilizó contra él?
Al final, queda la sensación de que la gente que tiene razón debe callarse para no molestar a los equivocados 😞
No me quito de encima la sensación de que tuvimos mucha suerte con los agentes que atendieron la llamada.
Lamento las erratas del hilo, pero es que me ha puesto muy nervioso revivirlo: Durante todo el tiempo estuve recordando un caso que atendimos en @CiberProtecter hace 3 años de dos adolescentes que grabaron a una niña pequeña de fondo cuando bailaban en la piscina.
Si mañana se hace viral (más les vale que no) el vídeo de “un boomer increpando a tres pobres niñas que solo querían grabar un TikTok en la playa”, al menos ya sabéis la historia completa 🤷🏼♂️
Nadie del circo romano me dijo “pues tenía usted razón”. Ni disculpas.
Una señora se fue murmurando “pero tampoco tenía que haberse puesto así de gilipollas” (recuerdo que yo solo pedí que no se publicase la cara de mi hijo y, ante la agresividad, recordé que era ilegal 🤷🏼♂️).
Al final, queda la sensación de que la gente que tiene razón debe callarse para no molestar a los equivocados 😞
Recientemente he visto un debate/cara a cara que ha organizado un famoso influencer, en el que enfrentaba dialécticamente a influencers de la conspiración y el terraplanismo con divulgadores científicos.
Hay algo que me gustaría comentar:
Obviamente, los “argumentos” de los primeros no se sostenían, no ya a un análisis científico, sino a una conversación informal con mínimos de rigor científico. Hasta aquí, no hay sorpresas.
Pero ellos lo perciben: No hay sorpresas.
Entre ellos, los hay que quieren creer y los hay que quieren que los demás crean, así que, ya sea por autoprotección de su creencia (no se la vaya a desmontar la realidad) o de su chiringuito (no vaya a perder a sus consumidores), luchan, no por dirimir, sino por tener razón.
Hace tiempo pusieron un casino en mi barrio. Imagináoslo: el típico con la puerta y escaparates llenos de luces de neón.
Llamaba mucho la atención y, los críos que pasaban por allí, sentían curiosidad. ¿Qué niño no se siente atraído por lo prohibido?
El casino, que se llamaba Chanín, tenía una pésima reputación.
Además del juego, dentro se movía una gran cantidad de "negocios delicados": Strippers, alcohol, otras sustancias, prostitución...
El barrio lo sabía: Su dueño era un intocable jefecillo de los negocios turbios al que todos llamaban Big Fran y del que siempre se podía esperar que explotase este tipo de "actividades económicas".
Los vídeos de actos de acoso escolar son de muy mal gusto, en ocasiones exponen a menores, e incluso en el peor de los casos acaban exponiendo más a la víctima.
Pero son increíbles para concienciar a la gente del drama que supone ir a clase a qué te torturen.
Hoy…
No lo voy a compartir yo 😞 pero se ha filtrado un vídeo en el que un agresor de 15 años exige a un compañero de 13 que le bese sus zapatillas.
Durante el proceso, el bully le da una patada de lleno en la cara (e intenta repetirla varias veces).
Cuando cuento la historia de mi bully saltando sobre mi cabeza una y otra vez incluso tras mi pérdida de consciencia, intento transmitiros la brutalidad de aquel acto con palabras.
No funciona.
La brutalidad de los actos de un bully solo se perciben en el sufrimiento que dejan.
Ayer, la Consejería de @EducacionCan decidió suspender las clases de hoy por la ola de calor.
Desde el comunicado, he estado leyendo por el grupo de WhatsApps de padres y madres de la clase de mi hijo cómo varias mamás se manifestaban por la medida CONTRA LOS PROFES.
“Esto lo han hecho para montarse un puente tremendo”, “fuerte cara dura”, “cómo se nota que ellos no tienen el problema de tener que ir a trabajar”…
No saben que soy profe.
Pero, la situación es surrealista y me gustaría explicarme (empezando por la empatía que no recibimos).
Entiendo perfectamente que, un mundo supuestamente civilizado, en el que se suspenden las clases de los hijos pero no la jornada laboral de sus familiares, en muchos casos solo consiguen complicarles la vida.