Pues hoy que se celebra el 200 aniversario de la muerte de George Gordon, Lord Byron, vamos a hablar de una cosilla que a él le daba un poco de repeluco: la supuesta maldición familiar que se llevó por delante a un buen puñado de Byrons, incluyendo al poeta, siendo MUY jóvenes.
Según su biógrafa Fiona MacCarthy, Lord Byron estaba convencido de que una maldición lo perseguía, llevándose por delante a varios de sus amigos y hasta a su perro. Como veremos, solo en el tema familiar, la cosa da para mucho.
Por cierto, hay quien dice que el responsable de la susodicha maldición pudo ser el padre del poeta, del que hablaremos después y que era un tipo, digamos… desagradable de conocer. Suposiciones, claro, porque nosotros vamos a empezar una generación antes.
¡Hola, Verdaderos Creyentes! Vosotros pedís y yo otorgo, así que hoy vamos a hablar de las conspiraciones sobre la realeza británica más siniestras, locas y absurdas que os podáis imaginar. Preparad los sombreros de papel de aluminio porque esto es el #TopTenConspiracionesRoyal.
Antes de seguir, quiero recordar que esto son conspiranoias marcianas. Es decir: NADA de esto es real, y este hilo es solo para echarnos unas risas (y de paso ver que la conspiranoia no es algo moderno). Que luego vienen a cortarse las venas a mi puerta y esas cosas.
Nº 10: El accidente de Lady Di fue orquestado por la Familia Real
Vamos a empezar por el elefante en la habitación. La conspiranoia real más famosa de los últimos 100 años. Todos sabemos que Diana Spencer falleció en un accidente de tráfico en París el 31 de agosto de 1999.
A lo largo de estos años hemos visto princesas de todo tipo, de las que liaron rebeliones contra sus maridos a las que anegaron tribus en sangre. Pero aún no habíamos visto a ninguna que intentase matar a su propio padre.
Hoy, en #SeñorasQueLaLíanParda: Juliane de Fontevrault.
Juliane (o Juliana, en algunas fuentes) vino al mundo en 1090, y las cosas que se saben de su infancia son muy pocas. Por no saberse, no se sabe ni el nombre de su madre, aunque se sospecha que fue una señora llamada Ansfrida. Esto se discute también, ojo.
Lo que sí se sabe con seguridad es que su padre era el príncipe Enrique Beauclerc, cuarto y último hijo varón de Guillermo el Conquistador y un señor que donde ponía el ojo, ponía la bala: se calcula que tuvo nada menos que 27 hijos, de los cuales 24 fueron ilegítimos.
Sir Roger Tichborne desapareció en alta mar en 1854.
Veinte años después sería el protagonista de uno de los juicios más sensacionales de la época victoriana.
El premio: un título nobiliario y una sustanciosa herencia.
Esta es la historia del Caso Tichborne, primera parte.
Empecemos por lo básico: Roger Tichborne pertenecía a una familia aristocrática católica de Hampshire cuyos orígenes se remontaban a la conquista normanda. Habían sido prominentes desde entonces en mayor o menor medida, y unos cuantos de ellos tenían historias moviditas.
El primero que nos llega es el Tichborne con #Tudorismo: Chidiock Tichborne (fabuloso nombre, pardiez), que en 1586 fue ejecutado por su implicación en la Conspiración Babington, que pretendía asesinar a Isabel I y poner en su lugar a María Estuardo.
Un teniente confederado llamado Harry Buford yace herido en la enfermería. El médico se dispone a examinarlo, pero al quitarle la ropa no puede creer lo que ve.
El valeroso oficial es una mujer.
Esta es la historia de Loreta Janeta Velazquez según ella misma la contó.
Voy a recalcar de nuevo que lo que se sabe de Loreta viene de su autobiografía. Hay muchas cosas que no pueden ser contrastadas y bien pudiera ser que todo fuera un enorme invent. Puede que Loreta no fuera más que una estafadora, pero qué estafadora fue en ese caso, madre mía.
Se supone que Loreta vino al mundo en La Habana el 26 de junio de 1842. Y también se supone que su madre era de origen francés y estadounidense, mientras que su padre era un militar cubano de origen español y mucha pasta.
Un joven borracho intenta atacar a su instructor mientras suena el toque de diana en la academia militar de West Point. De fondo, gritos y ruido de cristales rotos. Un arma que se dispara.
Es la mañana de Navidad de 1826.
Bienvenidos a los Disturbios del Ponche de Huevo.
Empecemos por explicar qué es el ponche de huevo: se trata de una bebida muy típica de Navidad, especialmente en Norteamérica, aunque también hay variantes en países como Venezuela. Se suele hacer con leche, nata, azúcar, huevo y alcohol. MUCHO ALCOHOL.
En West Point, que es probablemente la academia militar más famosa de los Estados Unidos, el alcohol estaba prohibido bajo pena de expulsión. Lo que no impedía que los cadetes se pusieran finísimos a base de alcohol de contrabando, claro está.