En #BiosdelHOF toca el turno a Robert “Bob” Gibson (1935- ).
Electo al Salón de la Fama en 1981, la 43ra elección, con 337 de los 401 votos posibles, para un 84.0% de apoyo en su primera aparición en la boleta.
Nacido en Omaha, Nebraska en noviembre de 1935, el menor de siete hermanos. Quedó huérfano desde infante, por lo que fue criado por su madre y su hermano mayor, quien administraba un centro juvenil, donde se encontró por primera vez con el básquetbol y el béisbol.
Ya en la Universidad destacó de tal manera, que varios equipos, incluyendo los Dodgers, Yankees y Phillies entre otros, se interesaron en él, pero ninguno le hizo una oferta que valiera la pena. Igualmente, un solo equipo de básquetbol, Minneapolis, le habló.
Finalmente aceptó una oferta de los Cardinals de St. Louis, casi a la vez que recibiera una de los Harlem Globetrotters, para ir de gira con ellos. Logró un acuerdo bajo el cual jugaría en las menores y luego cuatro meses con Harlem.
Después de eso negoció un acuerdo para quedarse solo con St. Louis, donde pasaría un par de años en las menores, sufriendo los violentos tratos de una sociedad racista en el sur del país, mucho más agresiva que la que él conocía de Nebraska.
Par 1959 llegaría a las Mayores, pero su propio mánager, lo maltrataría, a él y a Curt Flood, por racismo. Esta situación duraría hasta mediados de la temporada de 1961, cuando el mánager fue despedido. Hasta entonces, Bob solo había lanzado 162.1 innings en dos años.
Con la llegada del nuevo mánager, a quien Gibson conocía y admiraba, las cosas cambiaron. Tras haber sido usado como relevista y abridor ocasional, pasó a ser parte de la rotación del equipo, terminando con marca de 13-12, 10 juegos completos y 166 ponches en 211.1 innings.
A partir de ahí se convertiría en el as del equipo, y uno de los mejores lanzadores de la liga. Ganaría 20 o más encuentros en cinco ocasiones, ponchando a más de 200 contrarios en nueve ocasiones, usualmente asistiendo al Juego de las Estrellas.
Y luego, está el año de 1968. Una de las mejores temporadas en la historia para pitcher alguno, que, además, estuvo enmarcada en un campeonato para su equipo y una reñida Serie Mundial que St. Louis perdió frente a los Tigers de Detroit.
Ese año terminaría con marca de 22-9 y una increíble efectividad de 1.12 en 304.2 entradas, Completaría 28 juegos, 13 de los cuales fueron blanqueos. Lideraría la liga en ponches con 268, y obtendría su primer premio Cy Young, además de llevarse el MVP de la Nacional.
En 1970 repetiría el Cy Young, liderando la liga con 23 victorias. Sumaría 274 ponches, el tope de su carrera.
Durante el lapso 1962-1972, 11 temporadas, promedió 19 victorias, 270 innings, 20 completos, 5 blanqueos, 228 ponches y 2.66 de efectividad.
Lanzaría en tres Series Mundiales, ganando el MVP en dos de ellas (1964, 1967), terminando con marca de 7-2, efectividad de 1.89 en 81.0 innings, ponchando a 92 contrarios. Lanzó 9 juegos y completó 8 de ellos. EN 1968 ponchó a 17 contrarios en un juego.
A partir de 1973, sus fuerzas comenzaron a bajar: no volvería a ganar más de 12 juegos, ni a ponchar más de 150 contrarios. En 1974 tendría una última gloria, convirtiéndose en el segundo lanzador en la historia en llegar a 3.000 abanicados, solo superado por Walter Johnson.
Se retiraría en 1975, después de su peor campaña (3-10 y 5.04 de efectividad), dejando registro de 251-174 con 2.91 de efectividad, completando 255 de 482 aperturas, lanzando 3884.1 entradas en las que ponchó a 3.117 bateadores. Tuvo 56 blanqueos.
En 1981 fue electo al Salón de la Fama en su primera oportunidad. El resto de su vida lo ha pasado alejado del béisbol, teniendo problemas para conseguir trabajos con ningún equipo – solamente Joe Torre lo ha contratado en tres ocasiones como coach.
No hay pruebas, pero una opinión popular es que la organización de St. Louis ha movido sus influencias para evitar que otros equipos le ofrecieran trabajos a Gibson, al parecer, porque en su discurso de entrada a Cooperstown olvidó agradecer a los dueños del equipo.
Bob Gibson tuvo una carrera estelar, ayudando a derrumbar barreras que aún existían para los peloteros de color. Un lanzador con una fuerza y unas ganas de triunfar pocas veces vistas. Su temporada de 1968 sigue siendo un estándar difícil de alcanzar.
Hoy tocó ver A NIGHTMARE ON ELM STREET (PESADILLA EN LA CALLE DEL INFIERNO), una peli referente del cine de terror norteamericano, que generó una larga serie de secuelas, remakes, spinoffs (muchos de inferior calidad), sobre Freddy Krueger, el asesino que mata en los sueños.
Krueger mata a un grupo de chicos, amigos de high school. La verdad, es un terror que no asusta, sino que impresiona. Uno no tiene miedo, es más el impacto de las muertes, los saltos que uno pega, que el miedo que genera.
Sigue siendo entretenido verla, lo que habla muy bien del concepto, aunque no se puede negar que los valores de producción no envejecieron muy bien. Pero vale la pena: divierte.
Hoy toca el turno en las #BiosdelHof a Luis Ernesto Aparicio (1934- ).
Electo al Salón de la Fama en 1984, la 46ta elección, con 341 de los 403 votos posibles, para un 84.6% de apoyo, en su sexta aparición en la boleta, tras subir en cada una de las oportunidades anteriores.
Nació en Maracaibo, Venezuela, el 29 de abril de 1934. Hijo de Luis Aparicio Ortega, una superestrella del campocorto local de los años 30s y 40s. Su tío, Ernesto, también es reconocido como un importante gestor deportivo, coach, mánager y dueño de equipo.
Impulsado por sus familiares, comenzó a jugar béisbol desde pequeño y, aprovechando que su tío Ernesto era dueño de un equipo, Gavilanes, empezó siendo batboy. Esto le permitió, no solo estar en un campo de juego, sino conocer a grandes estrellas locales y extranjeras.
Hoy se cumplen DIEZ AÑOS del estreno en cines de USA de THE SOCIAL NETWORK (RED SOCIAL), la película que narra la supuesta historia de cómo Mark Zuckerberg creó Facebook, y todos los problemas y demandas que recibió por su forma de ser y de hacer las cosas.
En 2003, Mark Zuckerberg, estudiante de Harvard crea una página que terminará convirtiéndose en Facebook, pero en el camino hace varias cosas que le generan muchos enemigos; copiarse la idea de otros estudiantes, meter en problemas a su socio principal…
…y aliarse con Sean Parker, el fundador de Napster. Aunque Facebook crece exponencialmente, su vida personal se enreda cuando los Winklevoss y Divya Narendra, los supuestos creadores de la página que copió, y Eduardo Saverin, su socio, lo demandan.
Hoy se cumplen VEINTE AÑOS del estreno en cines del UK de BILLY ELLIOT, una película sobre la necesidad de ser como se quiere ser, la autoestima, afrontar dificultades y superarlas, narra un proceso de autoafirmación personal y de hacer frente a las resistencias sociales.
El chico Billy Elliot, de 11 años, es un desadaptado. No le gusta el boxeo, el deporte que su padre quiere que aprenda, y lo molestan los otros chicos. Un día ve una clase de ballet y se enamora de la danza, deseando aprender a bailar como las niñas en ese grupo.
Pero en su pequeño pueblo minero, nadie entiende que un niño quiera bailar ballet, y menos de todos, su propio padre, un representante sindical de las minas, actualmente en huelga. Su vida se complica más cuando lo obligan a cuidar a su abuelita con Alzheimer.
Hoy se cumplen VIENTE AÑOS del estreno en Hong Kong de IN THE MOOD FOR LOVE (花樣年華, CON ÁNIMO DE AMAR, DESEANDO AMAR), discutiblemente, la obra maestra del gran Wong Kar-Wai, una hermosa historia de amor no correspondido.
Un editor y una secretaria coinciden al mudarse al mismo edificio y comienzan a tener encuentros casi diarios. Pasan mucho tiempo solos, porque sus parejas trabajan mucho y no estan por casa. Hasta que descubren que ellos están teniendo un affair entre sí.
Con conocimiento de lo que ocurre, ambos deciden hacerse compañía, pero deciden no llegar a más nada, para no caer en el mismo mal de sus esposos. Sin embargo, la cercanía, la compañía y la mutua decepción, hacen que empiecen a aflorar sentimientos entre los dos.
En #BiosdelHOF toca el turno a Walter Emmons Alston (1911-1984).
Electo al Salón de la Fama en 1983, la 45ta elección, por la vía del Comité de Veteranos, como el décimo primer mánager en ser seleccionado.
Nació en un pequeño poblado en Ohio, viviendo en la granja familiar. Estaba tan alejado de todos lados, que nunca tuvo con quien jugar béisbol, excepto su padre, hasta que se mudaron de ciudad y pudo entrar en una escuela con un equipo.
Siguió jugando en la universidad, incluso llegando a ser el capitán el equipo. Pero dejó los estudios tras casarse, y necesitar una forma de mantener a su nueva familia. Luego pudo retomar los estudios, y, al graduarse, consiguió trabajo como profesor y coach de béisbol.