El bombardeo continuo de blancos de alto valor en la retaguardia enemiga fue un privilegio de británicos y estadounidenses durante la IIGM. Ni la URSS, ni Alemania, ni Italia, ni Japón fueron capaces de desarrollar flotas de bombarderos estratégicos al estilo de la RAF o la USAAF
Ello no quiere decir que todas estos países renunciaran al bombardeo estratégico. Al contrario. Incluso la más débil entre las grandes potencias -Italia-, fue capaz de realizar misiones de este tipo, algunas de las cuales superaron a las de los Aliados en distancia y complejidad
Verano de 1940. Mussolini busca un golpe de efecto que eleve el prestigio de Italia. Una opción es atacar las refinerías inglesas en Bahrein. Pero el único bombardero pesado que construirán los italianos, el Piaggo P.108, aún es un prototipo y tardará un año en entrar en servicio
Para compensar la falta de bombarderos pesados, la Regia Aeronáutica ha convertido un puñado de aviones de transporte en bombarderos estratégicos. Uno de esos modelos es el Savoia Marchetti SM82, un enorme trimotor que en su versión de ataque ha sido habilitado para llevar bombas
El teniente coronel Ettore Muti se pregunta si con los SM82 se pueden destruir las refinerías de Manama. La idea tiene la oposición del alto mando. Pero Mussolini zanja la cuestión: 'Se Muti pensa di potercela fare, lasciatelo fare'. 'Si Muti cree que puede hacerlo, que lo haga'
Muti es un personaje. Con 13 años pega a un profesor y es expulsado de la escuela. Con 14 años se escapa de casa para ser soldado. Es uno de los 23 supervivientes de la carga del 6º Regimiento contra una línea de ametralladoras austro-húngaras. En la acción mueren 777 italianos
Finalizada la IGM, participa como voluntario en la frustrada invasión de Yugoslavia. Se une al Partito Nazionale Fascista y no tarda en sobresalir por su audacia, temeridad y liderazgo. En 1922, toma su ciudad natal, Ravenna, en una operación paralela a la Marcha sobre Roma
Hace carrera con los Camisas Negras. Mujeriego y amante de la velocidad (poseía una Harley Davidson), también es un tipo con suerte. En 1927 recibe dos disparos en un atentado izquierdista. Sobrevivirá a duras penas, a cambio de lucir una cicatriz de 20 centímetros en el abdomen
En 1935 se une a la Regia Aeronáutica, con la que combate en Etiopía, España y Albania. En 1939, asciende a secretario del Partido Fascista, pero la política no le seduce. Aprovecha la guerra con Francia e Inglaterra para volver a la aviación. Ahora pretende bombardear Bahrein
Aprobado el ataque, toca planificarlo: aviones, combustible, bombas, rutas, objetivos, fases de la luna, meteorología... Todo debe calcularse al detalle. Una diferencia de diez nudos en el viento, por ejemplo, podría acabar con la operación. Es el trabajo del capitán Paolo Moci
La unidad seleccionada para llevar a cabo la incursión es el 41º Gruppo Autónomo. Varios de sus SM.82 son modificados para cargar 3.000 litros extra de combustible. Se eliminan pesos, se mejoran las comunicaciones y se 'trucan' los motores para que ofrezcan potencia adicional
Luego, en el más absoluto secreto, los SM.82 modificados vuelan desde el aeropuerto de Roma-Ciampino al aeródromo de Gadurra, situado en la isla de Rodas, en el Mediterráneo Oriental. El traslado acorta la distancia hasta el Golfo Pérsico en unos 1.400 kilómetros
Aún así, de Rodas a Manama hay 2.400 kilómetros. Y no sólo la distancia es un problema. La RAF tiene bases en Chipre, Palestina, Jordania, Irak, Kuwait y Bahrein. Los mal armados (cuatro ametralladoras) y lentos SM.82 (270 kilómetros por hora) son una presa fácil para los cazas
Para reducir riesgos, el 'raid' será nocturno. Se confía en el factor sorpresa para llegar a Bahrein. Luego, tras bombardear las refinerías, los aviones no volverán a Rodas, continuarán hacia el suroeste y aterrizarán en la colonia italiana de Eritrea. Un viaje de 4200 kilómetros
18 de octubre. Los operarios llenan los depósitos de combustible y cargan 1500 kilos de bombas de fragmentación e incendiarias en cada uno de los cuatro SM.82 elegidos para el raid. Muti dirige la misión desde el primer avión. Vuela junto al capitán Moci y al mayor Giovanni Raina
El avión líder despega con dificultad (en ese momento pesa 19.500 kilos). Le sigue un segundo bombardero (teniente coronel Fortunato Federici, capitán Aldo Buzzaca y teniente Emanuele Ruspoli). Y un tercero (capitán Giorgio Meyer, teniente Adolf Rebex y sargento Aldo Carrera)
El último en partir es el aeroplano del capitán Antonio Zanetti, que vuela con el teniente Vittorio Cecconi y el sargento mayor Mario Badii. Un quinto SM.82 pone rumbo directo a Eritrea. Su misión es servir de apoyo por si alguno de los bombarderos debe aterrizar de emergencia
Siguiendo el más estricto silencio radiofónico, los SM.82 de Muti giran hacia el este y atraviesan Chipre, Líbano y Siria sin ser detectados (los ingleses no tienen radares en Oriente Medio). Luego ponen rumbo sureste y sobrevuelan Jordania e Irak, hasta llegar al Golfo Pérsico
El avión de Muti actúa de guía en la oscuridad gracias a dos enormes rombos blancos pintados en la parte superior de sus alas, que iluminan permanentemente dos luces colocadas en el avión. Aún así, justo antes de llegar a Bahrein, el SM.82 de Federici pierde de vista a su líder
Desviado de su rumbo 25 millas, Federici observa unas luces en tierra. Cree que es Manama y suelta sus bombas. Acaba de atacar la refinería de la compañía estadounidense Aramco en Dhahran, en la neutral Arabia Saudí. Varias tuberías rotas y una queja diplomática es el resultado
Los otros SM82 llegan a Manama pasadas las dos de la madrugada, nueve horas después de despegar. La sorpresa es total. Las luces están encendidas y las bombas caen en las refinerías de la Bahrein Petroleum Company. Los italianos reportan seis incendios, pero los daños son menores
Amanece. Una vez reagrupados, los SM.82 se dirigen a Massawa (Eritrea) como esta previsto, pero desde la base italiana avisan a los bombarderos que están sufriendo un ataque de los Gloster Gladiator de la RAF. Los aviones de Muti se desvían a Zula para evitar los cazas ingleses
Los SM.82 aterrizan sin más novedad en Zula a las 8.40, tras cubrir 4.200 kilómetros en 15,5 horas. Han sobrevolado tres continentes (Europa, Asia y África) y aún tenían combustible para 30 minutos más de vuelo. En ese momento, es la misión de bombardeo más larga de la historia
Tras unos días en Eritrea, los cinco SM.82 vuelven a Roma, previa escala en Bengasi. Durante el viaje atacarán Port Sudán. Ya en Italia, las tripulaciones son recibidas como héroes. Son condecorados y se bautizan calles y plazas en su honor. Y hasta hay canciones con sus nombres
El raid es un gran golpe propagandístico para Mussolini. Inglaterra, que consideraba a Manama fuera del radio de la aviación del Eje, se ve obligada a reforzar la defensa de Bahrein con dos batallones de infantería, un escuadrón de cazas, globos de barrera y baterías antiaéreas
En 1943, Muti proyecta bombardear nuevamente Manama con doce SM-82 o hidroaviones Cant-Z-511. La caída del régimen de Mussolini acaba con sus planes y con su vida. En un confuso incidente, el condecorado lider del 'raid' de Bahrein muere durante su detención por los Carabinieri
Su compañero de vuelo, el capitán Muci, organiza el funeral. Muci peleará para los aliados el resto de la guerra. Condecorado en múltiples ocasiones, volará en 130 tipos de aviones y llegará a ser general de la nueva Aeronáutica Militare. Escritor de éxito, muere en Roma en 2002
Además de Bahrein, los SM82 bombardean Gibraltar, Francia, Malta, Palestina, Egipto y Sudán. Incluso se pensó atacar New York. Pero con tan pocos aviones disponibles (hubo seis misiones a Alejandría con un solo SM82), las incursiones no pudieron variar la marcha de la IIGM. FINE
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19 de enero de 1991. Tercer día de la Tormenta del Desierto. 14.30 horas. Siguiendo las órdenes del Cuarto Sector de Defensa Aérea, dos cazas Mirage F-1EQ del 89º escuadrón de la Al Quwwa al Jawwiya al Iraqiya despegan de la Base Aérea Saddam. Nombre en código del vuelo: 'León'.
A los mandos de 'León 2' va el teniente Ziad Al-Subhi Musa, un piloto inexperto pero deseoso de entrar en combate. En la cabina de 'León 1' viaja el capitán Hani Idris, un aviador experimentado y nada entusiasmado con la misión que le han asignado: interceptar a un grupo de F-15.
Aunque el norte de Irak es un teatro secundario, la USAF ha desplegado la 7440th Composite Wing en Turquía, con más de un centenar de aviones para atacar los principales objetivos militares e industriales de la zona, la mayoría de los cuales se concentra en Mosul, Irbil y Kirkuk.
28 de mayo de 1934. La Marinha Portuguesa alista oficialmente al que en ese momento es su navío más potente, el aviso colonial de primera clase NRP Afonso de Albuquerque. Diseñado para mantener la presencia naval en los territorios de ultramar, está destinado a hacer historia
Finales de 1961. La República de la India lleva catorce años disfrutando de su condición de país independiente, aunque en Nueva Delhi no están satisfechos. Los británicos se han marchado, pero Portugal mantiene tres enclaves coloniales en el subcontinente indio: Goa, Diu y Damão.
Agotada la vía diplomática -Lisboa se niega a negociar porque considera sus posesiones en la India parte de su territorio metropolitano-, el gabinete de Pandit Nehru decide acabar con 451 años de dominio luso y hacerse con las colonias por la fuerza. Es la Operación Vijay.
No debían liderar la misión, pero allí estaban, listos para soportar una vez más la brutal aceleración de la catapulta. En un parpadeo, el alferez de navío Terence Meredith Murphy y el alferez de fragata Ronald James Fegan estaban en el aire. Es la mañana del 9 de abril de 1965.
Murphy y Fegan pilotan el 'Showtime 602', un F-4B Phantom del escuadrón VF-96, número 151403. En principio, debían ser el punto del 151425, otro F-4B tripulado por el capitán de corbeta William E. Greer y el alferez de navío Richard R. Bruning. Pero ambos han terminado en el mar.
Un fallo en el motor de estribor durante el despegue desde el USS Ranger, había obligado a Greer y Bruning a eyectarse justo cuando su avión impactaba en el agua. Y aunque habían sido rescatados, no están en condiciones de liderar ninguna misión. Murphy y Fegan toman el testigo.
Octubre de 1919. La República Socialista Federativa Soviética de Rusia se tambalea ante el avance de los ejércitos blancos, apoyados por EEUU, GBR, Francia, Checoslovaquia, Polonia, Estonia, Lituania, Letonia, Rumanía, Serbia, Italia, Grecia, Australia, Canadá, China y Japón.
En el este, las fuerzas del almirante Aleksandr Kolchak han sido contenidas por Mijaíl Frunze, pero en el sur las tropas del general Antón Denikin y sus tanques ingleses han tomado Tsaritsyn (la futura Stalingrado), y ahora apuntan hacia Moscú, distante aún unos 400 kilómetros.
Pero es Petrogrado la urbe más amenazada por los blancos. Con la ayuda de británicos y estonios, el Ejército del Noroeste del general Nikolái Yudénich (18.500 hombres, 57 cañones pesados, 4 trenes blindados y 6 tanques con carristas ingleses) marcha hacia la cuna de la Revolución
31 de agosto de 1919. El submarino soviético Pantera sale a navegar al Golfo de Finlandia. Su objetivo es la Bahía de Koporye, donde los barcos británicos y estonios martillean a las tropas 'rojas' que frenan la ofensiva 'blanca' contra Petrogrado. Es una misión para la historia.
Alexander Zelenoy, Jefe de las Fuerzas Navales del Mar Báltico, quiere demostrar a su oponente, el contraalmirante Walter Cowan, que pese al reciente y espectacular ataque inglés a la base naval de Kronstadt, la flota 'roja' mantiene su poder de combate.
Para devolver el golpe a la Royal Navy, Zelenoy ha elegido al mejor de sus hombres: el teniente de navío Alexander Nikolaevich Bakhtin. A sus 24 años, el joven comandante del Pantera es el submarinista más capacitado de la Flota del Báltico. Y una estrella en constante ascensión.
En la cabeza del Primer Ministro aún resonaban las palabras del Secretario de Guerra. "Esta operación es una insensatez. No sólo no lograremos los objetivos, sino que sufriremos grandes bajas en el empeño". ¿Y si Winston Churchill tenía razón?, volvió a preguntarse Lloyd George.
Agosto de 1919. Gran Bretaña se dispone a acabar con la Flota Roja del Báltico. La coalición antibolchevique planea tomar Petrogrado, la capital de la Revolución, lo que exige eliminar la amenaza que suponen los acorazados y cruceros soviéticos para el flanco norte de la ofensiva
La misión recae sobre los hombros del contraalmirante Walter Cowan, oficial al mando del destacamento de la Royal Navy en el Mar Báltico, quien tiene sus propios motivos, entre ellos la seguridad de sus buques, para desear el hundimiento del Andrei Pervozvanny y del Petropavlovsk