Entre el 28 de agosto y el 2 de septiembre de 1859 se produjo la tormenta solar mas potente registrada en la historia conocida como evento Carrington en honor al astrónomo inglés Richard Carrington. 
Solo unos meses antes del máximo solar de 1860, numerosas manchas solares empezaron a aparecer en la superficie del Sol el 28 de agosto de 1859. Richard Carrington las observó y dibujo de forma detallada. (via Científico estadounidense, vol95)
Una gran eyección de masa coronal fue la responsable de tal evento. A partir del 28 de agosto se observaron auroras boreales en latitudes bajas, como en Colombia, Cuba o España. La máxima intensidad de la tormenta se produjo entre el 1 y 2 de septiembre.
Una eyección de masa coronal es un suceso que ocurre en la superficie del Sol. Son grandes explosiones de plasma y campo magnético de la corona solar que envian partículas a gran velocidad pudiendo causar tormentas geomagnéticas.
Este gran evento de una eyección de masa coronal atravesó 150 millones de kilómetros entre el Sol y la Tierra en solo 17.6 h, mucho más rápido de lo habitual. Se cree que pudo viajar en tan poco tiempo porque una llamarada pudo producirse antes y “despejar” el camino.
En aquel entonces las telecomunicaciones comenzaban a desarrollarse con la instalación del telégrafo en 1843. Esta tormenta provocó cortes y cortocircuitos en los cables del telégrafo, produciendo numerosos incendios tanto en Europa como Norteamérica.
Otras eyecciones de masa coronal de menor energía surgieron del Sol hacia la Tierra en 1921,1960 y 1989,la última de las cuales causó cortes de energía generalizados en toda la provincia de Quebec en Canadá. Estos tres eventos no se consideran de la fuerza de la clase Carrington
Sin embargo, una supertormenta de clase Carrington hizo erupción desde el Sol el 23 de julio de 2012 pero apenas alcanzó a la Tierra nueve días después. Eso sí, proporcionó una advertencia sobre el riesgo que supondría enfrentarnos en la actualidad a este tipo de eventos.
Investigadores estimaron que un evento de este tipo hoy en día causaría millones de pérdidas económicas, interrupciones eléctricas generalizadas y daños a las redes eléctricas. Habría problemas con los alimentos al no contar con electricidad para los sistemas de refrigeración.
Las señales de televisión de los satélites se verían interrumpidas en gran medida, y los satélites también experimentarían interrupciones en la comunicación por radiofrecuencia, lo que paralizaría la navegación GPS
Los aviones que vuelan sobre los océanos probablemente experimentarán errores de navegación y cortes de comunicaciones como resultado de la red de satélites interrumpida.
Pero a diferencia de 1859,hoy tenemos una flota internacional de sondas, que incluye Solar Dynamics Orbiter,SOHO,Parker Solar Probe y Solar Orbiter de ESA, que observan constantemente el Sol y buscan comprender todo lo que en él sucede para estar más preparados (via NASA)
