Thread by @AAlvarezAlvarez

Hilo sobre el denominado lenguaje inclusivo y el uso del morfema -e

Acabo de ver que la @unisevilla junto a @UNIAuniversidad y en colaboración con otros organismos, lanza un curso sobre "Lenguaje inclusivo y Constitución".

No sé (aún) si detrás de esto hay alguna vocación troyana pero me viene al pelo para hacer unos comentarios sobre el uso del morfema -e como pretendido instrumento de utilidad para las políticas de inclusión.

No me entrego en explicar que el uso de dicho morfema en realidad promueve que el español apueste por el neutro lingüístico y eso no es exactamente inclusivo. Tampoco explicare hoy que se pretende “incluir” y donde, porque eso es harina para otro hilo.

Lo 1º que decir es que el morfema -e no es útil al feminismo ya que lejos de combatir el sexismo, solo lo camufla y liquida todos los esfuerzos de las políticas de = por usar expresiones descriptivas de la realidad de las mujeres desde una perspectiva no sexista del lenguaje.

El uso del morfema -e solo consigue invisibilizar el sexo de las personas durante la comunicación (llegando al absurdo en muchas ocasiones).
El lenguaje supuestamente “inclusivo” borra el género gramatical en el pronombre, el nombre y el verbo.

José Mª Gil en su trabajo sobre “Las paradojas excluyentes del lenguaje inclusivo" en el que se basa este hilo, nos indica que:

“la sobrecarga de atención a la morfología nominal puede acarrear el descuido de los conceptos. Esto es muy problemático porque la postulación y la defensa de la igualdad () se despliegan en el nivel conceptual, no en la morfología ”.

Esto implica borrar lingüísticamente las diferencias y desigualdades entre los sexos, sin que realmente estas desaparezcan.

El “lenguaje inclusivo” que en no es otra cosa que la eliminación del género gramatical, borra, encubre, esconde y oculta las diferencias y las desigualdades.

Por contraposición el LENGUAJE NO SEXISTA incorpora conceptualmente a mujeres y hombres, mostrando diferencias y desigualdades existentes.

José Mª Gil también nos revela varias cosas que debemos considerar y entre las que destacare tres:

1º -"Que una lengua no distinga género gramaticales no implica que sus hablantes se liberen de concepciones patriarcales.

2º- El uso planificado del morfema -e no es obstáculo para expresar ideas discriminatorias.
3º- Se pueden expresar pensamientos igualitarios y progresistas sin necesidad del morfema -e.

El feminismo sabe de la importancia del lenguaje para la visibilización de la desigualdad, pero también para la configuración conceptual de las políticas que la combaten.

Por eso estamos atentas a las propuestas de quienes desde una supuesta pretensión de “inclusión” tratan de imponer expresiones gramaticales que finalmente configuran conceptos que borra la realidad vivida de las mujeres.

Aunque la intención de partida no fue esa, el efecto es de borrado, por tanto, cabe decir que mientras el lenguaje no sexista SI ayuda a combatir la desigualdad, haciéndola visible, el llamado lenguaje inclusiv (e) NO ayuda a combatirla porque la oculta .

Quienes pretenden utilizar un morfema para modificar comportamientos humanos no considera su impacto en relación a la igualdad entre los sexos,

su propuesta de sustitución del genérico masculino por un neutro es una forma aséptica de invisibilizar las diferentes realidades que se viven en función del sexo al que perteneces.

Dicho de otra manera: a la igualdad entre los sexos, no solo no le aporta nada el llamado "lenguaje inclusivo" (que solo es la generalización de un neutro, sino que se coloca exactamente del lado del lenguaje sexista.

Como diría @8RosarioSanchez: "elles" oprimen a "elles" oculta quien oprime y quien es oprimida.🚩