1. Las acciones son posibles por el alto nivel de concentración que existe en este tipo de servicios, concentración que ocurrió gracias al visto bueno de los estados centrales.
2. El poder de estas plataformas las convirtió en "objeto de presión" y éstas han estado procurando dar respuestas a esas presiones.
3. Esas presiones son especialmente efectivas en Washington y Bruselas, y los sucesos del 6 de enero responden al peculiar clima político de Washington (es difícil imaginar cómo se podrían replicar en otros países, especialmente periféricos)
4. El escenario plantea múltiples desafíos para la #LibertadDeExpresion en democracia, la nota menciona cuatro.
5.a. En libertad de expresión, es claro que las plataformas se han convertido de facto en "foros públicos" en dónde se espera que las decisiones de moderación sean transparentes, con criterios y razones públicas, pero el derecho aún no "alcanzó" a esa categoría
5.b. La regulación eficiente tiene primero que resolver el desacuerdo más profundo de nuestros tiempos: el rol del discurso de odio en el debate público. Hay quienes quieren borrarlo, otros creen que debe ser parte de la discusión (debe estar presente, para refutarlo)
5.c. La regulación eficiente tiene que encontrar el dispositivo legal para desplegarse, y no es obvio que esa solución esté basada en el paradigma soberanista del estado nacional (!) -> el futuro no está escrito (J.S.), pero vendrá por otro lado
5.d. Aún resta ver cómo este tipo de ostracismos de los poderosos hacia los perdedores impactará en las sociedades polarizadas 📢‼️ SPOILER: es difícil ver cómo todo esto puede ayudar a resolver, en vez de agravar, ese problema.
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