Thread by @mapibaez

Ayer tuve que llevar a la de cuatro a urgencias (plastilina en la nariz, otra vez) Como estaba sola también se vino la de seis, ese culo inquieto incapaz de permanecer sentado y sin someter al tercer grado a cualquier persona con la que establezca contacto visual.

Me gustaría pedir una ovación para el personal de urgencias pediátricas del Materno que atendió a la peque y al culo inquieto. Tuvimos que ir a las urgencias de adultos para que la atendiera un otorrino pero lo que allí aconteció fue increíble.

El otorrino contándole a la de cuatro que no encontraba a pepa pig y mientras exploraba más y más adentro fue diciendo todos y cada uno de los personajes. No se dejó ni uno. Y luego enganchó con Pocoyó.

La de cuatro la tenía en mi regazo y al principio estaba muy tensa. Pude notar cómo se fue relajando y se dejó hacer de todo. Si os habéis hecho una PCR imaginad que os dilatan la fosa nasal con unas pinzas y se van abriendo paso a través de los cornetes.

¿Y la de seis?

Otro doctor que estaba al ordenador empezó a hablar con ella porque se coscó que se sentía apartada así que la hizo sentir importante pidiéndole que le ayudara a escribir el informe. Pude ver cómo usaba el ratón y seguía las indicaciones del doctor.

Al final lo imprimió y lo firmó con su nombre. Estaba que no cabía en ella de orgullo. Les dió toda clase de explicaciones sobre que ella también quiere ser médico y de que tiene un disfraz de médico (el verde, el de camisa y pantalón)

Ir a urgencias y que a pesar de toda la carga de trabajo que tienen, saquen esa sonrisa y esa paciencia, me merece un enorme reconocimiento y más ahora cuando se sienten tan poco escuchados y valorados.

Así que al personal que estuvo anoche de guardia en el materno...

Mis dieces. Cuidaros todos mucho, por favor.