#ALERTA🚨| Tras 7 años de debate, Japón aprobó plan para verter al mar más de un millón de toneladas de agua contaminada de la central de Fukushima, accidentada tras el tsunami de 2011, previo tratamiento para reducir la cantidad de sustancias reactivas y de manera gradual. (1/5) 
Según Yoshihide Suga, primer ministro japonés, el agua sería vertida tras asegurarse de que el nivel de sustancias radiactivas sea inferior a estándares de seguridad. No obstante, con las técnicas actuales no se podría eliminar el tritio, componente radiactivo muy peligroso.(2/5)
La operación tardará 2 años en comenzar y podría tomar décadas, pero existe fuerte oposición de los países vecinos, pescadores locales y ecologistas, pues señalan que se ha dado preferencia a esta opción sobre otras como evaporación en el aire o almacenamiento sostenible. (3/5)
El riesgo no es solo de salud y ambiental, sino social. Los pescadores y los agricultores de Fukushima critican la decisión porque temen que deteriore aún más la imagen de sus productos entre los consumidores. (4/5)
Kanji Tachiya, director de una cooperativa pesquera local de Fukushima, declaró: "El gobierno nos dijo que no vertería agua sin la adhesión de los pescadores. Ahora vuelven con lo mismo y nos dicen que verterán el agua, es incomprensible". (5/5)
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