Sumergirse en los clásicos de la sociología como disciplina supone todo un reto, en cuanto a esfuerzo, tiempo y dedicación, un trabajo de años únicamente para haber leído la bibliografía fundamentalísima. Estoy pensando en la Sociología de Spencer, (1/7)
la Física social de Comte, Las leyes de la imitación de Tarde, de Durkheim La división del trabajo social, Las reglas del método sociológico, El suicidio y Las formas elementales de la vida religiosa, de Max Weber Economía y sociedad y La ética protestante, (2/7)
y si se quiere añadir el funcionalismo norteamericano, El sistema social de Parsons y Teoría y estructura sociales de Merton. Cada uno de estos libros es sumamente denso, con extensión de medio millar de páginas o más en varios casos, y tras todo ese esfuerzo todavía (3/7)
Encuentro plenamente justificado el imponer una censura mucho más severa de las redes sociales orientada a evitar el acoso personal y a grupos completos de personas, incluyendo la obligación de identificarse, de manera que las empresas se vean forzadas a responsabilizarse. (1/6)
¿El problema? Que debiera aplicarse equitativamente, incluyendo también barbaridades que se han venido diciendo desde el feminismo y otros sectores ideológicos vinculados a la izquierda actual, y no únicamente a neonazis y reaccionarios cristianos. Cosa que no sucedería. (2/6)
¿El problema x2? Que cuando se ofrece el argumento previo se está a un paso de justificar a los segundos, cuando son cosas completamente diferentes reconocer una correlación entre ciertos tipos de inmigración y criminalidad, o posibles contrasentidos en la cuestión trans, (3/6)
Al contrario que la China clásica, que era ya una sociedad «relativamente» horizontal, gracias al sistema de oposiciones para mandarines, Japón, en pleno feudalismo, incluso tras la sinización, continuó siendo una sociedad de castas. Dialéctica entre aristócratas y comerciantes:
Al contrario que en el feudalismo europeo, donde fue el desarrollo de la clase comerciante el que terminaría por dar al traste con el sistema, en el Japón, mecanismos como el matrimonio-adopción a cambio de dinero, dieron lugar a una hibridación capaz de mantenerlo estabilizado:
En cuanto al campesinado, si bien las protestas y revueltas fueron constantes, no tenían un carácter subversivo global, sino que se referían solo a los excesos de un señor feudal, y seguían protocolos de petición estrictos, que concluían con la muerte aceptada de los cabecillas:
Sobre la cita famosa, donde Bueno dice que el descubrimiento de la plusvalía equivale al de la constancia de la velocidad de la luz en física, tiene algo de trampa. Descontextuada parece que Bueno está adhiriéndose a la teoría económica marxista. (1/4)
Sin embargo, en el mismo párrafo dice justo arriba que quien hizo ese descubrimiento es Ricardo, no Marx; y, debajo, que teorías categoriales económicas como el marginalismo pueden explicar ese «hecho», aunque no agoten su contenido filosófico. (2/4)
En el contexto del resto del artículo: serían las Ideas filosóficas de Marx, relativas al comunismo final, las que le permitirían apreciar en la plusvalía una contradicción irreductible. Lo cual enlaza también con una cuestión suscitada por Rallo, (3/4)
En este artículo de 1990, Bueno evalúa las implicaciones filosóficas de la Perestroika para la teoría marxista. La importancia histórica del marxismo estaría indisolublemente ligada a su asociación con el Estado Soviético. (1/8)
La Perestroika no sería una mera reforma administrativa, sino una liquidación necesaria de la Idea del proletariado como clase universal. Con ello, se hace realista pero compromete a la teoría marxista clásica, al perder su referencia y reducirse a una ideología del pasado. (2/8)
La teoría marxista consta de dos partes: una «parte histórica», con la doctrina sobre los motores, estructuras y fases de los procesos sociales humanos del pasado y del presente, desde el comunismo primitivo hasta el capitalismo y el socialismo real actual; (3/8)
En este artículo de 1980 en la Revista del PCE, Bueno sostiene que, en el marxismo, las etapas posteriores a la historia efectiva están implicadas en el análisis histórico mismo, de manera que la teoría marxista es internamente responsable del curso (1/5)
de los acontecimientos previstos o incluso inspirados. Da como ejemplos de contradicciones que implican una «crisis en el marxismo» la Primera Guerra Mundial, al romper la unidad el proletariado, el conflicto chino-soviético, que rompía su Patria, (2/5)
la consolidación del capitalismo, donde el trabajador industrial pierde su posición protagonista de la historia y la consolidación de funciones burocráticas del Estado que no pueden entenderse como instrumentos de dominación de la clase capitalista. (3/5)