#UNSAMTransforma En 2007, un adolescente es detenido en el Centro Cerrado de Pablo Nogués. Tiempo después, en la Unidad Penal 48. En 2020 vuelve al “Nogués” como tallerista, con propuestas educativas. ¿En el medio? La Universidad en el penal, el arte y la comunidad. Abrimos hilo.
Renzo Salles es egresado de la Diplomatura de Arte y Gestión Cultural del Centro Universitario de la UNSAM en la Unidad Penal 48. Desde abril de 2020 se encuentra en libertad, estudia la Licenciatura en Cine Documental de @eayp_unsam y participa en el programa Alto Bondi Cultural
ABC es una iniciativa del CUSAM en articulación con la Dirección de Programas de Integración para el Egreso del Organismo de Niñez y Adolescencia de @BAProvincia. Apunta a trabajar con adolescentes y jóvenes en prevención del delito y formación.
Las propuestas están a cargo de estudiantes de talleres del penal y graduadxs del CUSAM que han recuperado su libertad. “El arte fue una gran herramienta para darme nuevas posibilidades, como estar acá con ustedes, sin creerme más, porque yo sé lo que es estar así”, dijo Renzo.
Cuando estuvo en el penal, Renzo conoció el sistema braille y empezó a enseñar cómo utilizarlo. Recuerda que una vez le dio clases a dos personas ciegas que aprendieron a leer. Ese día se dio cuenta de cuánto le gustaba la docencia.
“Mi modo de enseñar es muy diferente al que puede tener un profesor que se recibió en una Universidad. No solo por el hecho de expresarme, sino por empatizar con los chicos”, concluye Renzo. #UNSAM29Años
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Presentamos el #MapadelasVacunas: un relevamiento de las vacunas compradas por Argentina y las seis que están desarrollando las universidades junto a investigadorxs del CONICET, con nuestro proyecto #VacunaUNSAM a la cabeza. Hilo.
A 6 meses de la llegada de las primeras 300 mil dosis de la vacuna Sptunik V, en la navidad pasada, ARG superó las 20 millones de dosis, posicionándose por encima del promedio de países que más vacunas adquirieron por cantidad de habitantes, a escala global y regional.
La campaña de vacunación ya aplicó 16.643.769 dosis en todo el país e inmunizó al 29,14% de la población con la primera dosis. Se espera que el ritmo de vacunación, que tuvo un récord de 377 mil dosis aplicadas en un día el pasado 4 de junio, se acelere.
En los barrios populares del Conurbano, niñxs y adolescentes viven la escolaridad como un delicado equilibrio entre el deseo de terminar la escuela y la necesidad de trabajar, la maternidad y los problemas de conectividad. ¿Es la pandemia un déjà vu de viejas desigualdades? Hilo.
En un artículo de @revistaanfibia, dos especialistas de la UNSAM se detienen en el caso de Jeni: una adolescente que vivió las tensiones del aislamiento preventivo, "que a la vez que necesario y urgente arrojaba a su familia a perder sus fuentes de ingresos".
En 2021 Jeni vive su escolaridad como un loop de viejas y nuevas desigualdades. “Unas más cercanas, que emergieron al inicio de la pandemia, y otras de más largo aliento, que desde hace años definen tantas vidas en tantos barrios”, escriben Silvia Grinberg y Julieta Armella.
#UNSAMTransforma Elvia llegó a la UNSAM a través del merendero ambulante donde cocina en la villa 31. En 2019, obtuvo su diplomatura en Alimentación y Cultura Saludable y logró transformar la vida de muchas familias del barrio al aprender y enseñar a “comer mejor”. Abrimos hilo.
Cuando un compañero de la CTEP, “el Vikingo”, le propuso que se inscribiera a la Diplomatura, no estaba convencida, pero accedió. “Me hubiera gustado hacerlo antes, pero con el trabajo, mis dos hijos y el merendero era difícil”, dice.
Allí conoció a un grupo de mujeres que compartían sus experiencias en otros comedores. “Ellas traían saberes de Bolivia, Chile, Paraguay y Argentina, y yo de Perú. Siempre esperaba ansiosa a que llegaran los martes para vernos, y hasta hoy seguimos en contacto”, cuenta.
#UNSAMTransforma Cuando Celeste Puebla (@Celesvpc ) comenzó la Licenciatura en Biotecnología en el IIB a sus 18 no se imaginaba que 8 años después iba a formar parte del desarrollo más esperanzador de la sociedad argentina: la vacuna contra el COVID-19. Abrimos hilo.
Celeste es de Villa Tesei y conoció la UNSAM en una visita con su escuela. Se anotó en el CPU de Ingeniería Biomédica, pero poco tiempo después se cambió a biotecnología. “De casualidad conocí a una persona que la estaba estudiando, me habló de la carrera y me fascinó”, dice.
Más allá de sus logros académicos, Celeste destaca que la UNSAM transformó su forma de ser: “En la secundaria era una piba tímida y no salía. En la Universidad hice pila de amigos, empecé a salir, me volví más extrovertida y me di cuenta de las distintas realidades que conviven”.
#UNSAMTransforma ¿Te imaginás en medio de unas vacaciones convenciendo a tu abuelo de anotarse en una carrera de la UNSAM? Eso hizo Micaela, estudiante de Antropología de @idaesoficial, con Carlos, a quien le falta poco para recibirse de Licenciado en Historia. Abrimos hilo.
Micaela preparaba unos exámenes mientras disfrutaba de la vista de Itapoá, en Brasil. Cuando vio en las redes el anuncio de la nueva carrera de Historia, estaban sentados en el borde de la pileta. Enseguida, Carlos le preguntó cuánto tiempo tenía para completar el formulario.
Para Carlos, geólogo que cuenta con un doctorado, este momento significa, por primera vez, estudiar por puro gusto. “Trabajé 50 años en mi profesión y muchos como docente universitario, ahora quiero dedicar mi tiempo libre a investigar sobre lo que me interese”, dice
¿Te imaginás que tu primer trabajo como enfermerx sea luchar de lleno contra el coronavirus? María Zalazar, estudiante del @icrmunsam, cuenta su experiencia en 2020 en un hospital de San Martín. Abrimos hilo.
"Vivo con mis 2 hijos en Merlo, una nena de 3 años que comenzaba su primer año de jardín y un nene que empezaba secundaria; paralelamente yo arrancaba la Licenciatura (después del título intermedio). Mi hermana
se mudó a una casa en el mismo terreno para cuidar a mis hijos".
"En el sector Covid del ala B teníamos 13 habitaciones, cada una con dos pacientes positivos. La experiencia fue abrumadora: volvía a mi casa con las marcas de las cofias, las manos ‘viejitas’ por el uso de los guantes, nos moríamos de calor en pleno invierno por los mameluco".