¿Por qué el congelamiento de precios no va a parar la inflación?
Porque la inflación surge de la emisión monetaria sin respaldo y del mantenimiento de un déficit fiscal que se financia de manera espuria (con dinero emitido sin respaldo y con bonos que no se pagan).
El gobierno podrá imponer la pena de muerte para los empresarios que aumenten los precios, pero si sigue emitiendo dinero sin respaldo y continúa con el déficit fiscal seguirá habiendo inflación (a la que se agregará el desabastecimiento de productos en los puntos de venta).
La prohibición de aumentar precios (y culpar a los empresarios de aumentarlos por "codicia") no tiene ningún efecto positivo en la lucha en contra de la inflación.
Al contrario. Aumenta el problema.
Los griegos, los que inventaron la democracia; los que vencieron a los persas, dominaron el Mediterráneo y engendraron a Alejandro; los que educaron a los romanos; esos griegos estaban en contra de las elecciones de candidatos.
Creían que las elecciones eran negativas.
¿Por qué se oponían a votar para elegir a los funcionarios?
Porque creían que si había elecciones se formarían partidos liderados por los más ricos de cada bando y el pueblo terminaría votando entre los ricos de uno u otro partido, pero no entre los ciudadanos en conjunto.
Durante el siglo VI aC, cuando comenzó a debatirse la forma de gobierno democrática, se comenzó a ver que las elecciones permitían elegir a los mismos que gobernarían sin elecciones (los más ricos aristócratas) solo que legalizados por el voto mayoritario.
La Argentina es un país en el que todo es irracional.
Un ejemplo (menor, pero que muestra el delirio en que vivimos):
el billete de más alta denominación es el de $1.000.
¿Cuánto se puede comprar de cosas cotidianas (viaje en taxi, tomates, asado, fideos, pan) con uno de ellos?
En dólares oficiales el billete de $1000 puede comprar 9,7 dólares.
En dólares que uno realmente puede comprar, con el billete de $1000 se consiguen 5,3 dólares.
(ya en esto hay otra irracionalidad argentina: los 20 precios que tiene el dólar)
Veo una nota en los medios sobre que hay comercios que no aceptan las monedas de 50 centavos.
¡Monedas de 50 centavos!
¡Hace tres años que dejé de aceptar monedas de 5 y 10 pesos, y redondeo en 10 -si hay billete, roto, viejo, pero billete- o en 50!
Desde 2019 el PBI de China es mayor que el de EEUU y la cantidad de patentes científicas chinas superan las de EEUU.
Como EEUU enloqueció por la ideología políticamente correcta, a China también le será fácil ganar la guerra cultural.
Van a remover la estatua de Jefferson por asociarlo a la esclavitud (en una época en la que todos los que no eran esclavos y tenían algo de dinero tenían también esclavos).
Es el padre fundador de la democracia burguesa liberal en el planeta. ¿Entienden?
Al lado de Jefferson, las ideas democráticas y republicanas de la Revolución Francesa (que son posteriores, además) son de centroderecha.
Hace 20 años identifiqué al personaje político que representa a la gente sin otro proyecto de vida que detestar al resto de la sociedad: Lilita.
Ella era de izquierda, crítica de los "banqueros y usureros".
Luego se asoció a ellos y criticó a la casta política (la Milei de 2007).
Fue cambiando de ropa en cada estación.
Hace 15 años dijo que el peor ser de la Argentina era Macri y que jamás la verían a su lado y hace 6 años brindaba unirse a Macri para combatir a los que llamaba los peores de ese momento.
La gente embrutecida de odio siempre le cree.
Lilita es la representante de lo peor que existe en la Argentina.
Ella siempre tiene gente que la admira.
Es una estrella en los medios.
Algunos se hacen los cool diciendo que la consumen "irónicamente".
Pero son sus devotos: les gusta la bosta que les da de comer.
Hace 167 años nacía el hombre más brillante del planeta en los últimos dos siglos: Oscar Wilde.
Festejamos su cumpleaños leyendo sus mejores páginas y haciendo un #RayoArte sobre el dibujante que ilustró sus libros y sus programas teatrales: Aubrey Beardsley (1872-1898).
Aubrey Beardsley apenas vivió 25 años pero fue el centro ígneo del Londres vanguardista de fines del siglo XIX: ser amigo de Wilde (con el que colaboró en casi toda su producción teatral) lo impulsó al estrellato y brilló como ninguno.