Hace unas semanas se produjo el relevo del USTRANSCOM ( United States Transportation Command). Durante la ceremonia se pidió que una de las tripulaciones allí presentes se pusiera en pie para recibir un reconocimiento público .
Aquellos hombres eran la ya famosa tripulación del C-17 REACH871. El REACH871 saltó a la fama tras despegar de Kabul con 823 refugiados en su interior durante la evacuación de agosto y hacerse pública una fotografía de su interior que se volvería viral.
Su comandante tomó la decisión de despegar cuanto antes para evitar el caos en el que se había convertido el aeropuerto y tras haber entrado al C-17 más personas de las previstas.
Otra de las fotografías que darían la vuelta al mundo es la de un niño dormido en el suelo de un C-17 en vuelo y arropado por la parte superior del uniforme de uno de los miembros de la tripulación.
Hace unos días esa prenda ha sido entregada por su dueño al museo de la USAF para su conservación y exposición. Los americanos tienen muy en cuenta el preservar este tipo de efectos como parte de su historia.
El soldado Nicolas Baron, ayudante de carga en uno de aquellos C-17 la llevó al museo. Llevaba solo 5 meses de servicio cuando participó en la operación. Dijo que su motivación para alistarse fue ser participe de algo más grande. Pues dicho y hecho.
El C-17 ha sido el gran protagonista de la operación Allies Refuge. De los 222 que posee la USAF en el momento álgido de la operación la mitad estuvieron comprometidos en el esfuerzo de evacuación, con una media de entre 60-80 el resto de días.
Para las tripulaciones cada misión suponía jornadas maratonianas de unas 20h. Se dice que las bebidas energéticas se agotaron en todas las bases participantes.
El primer C-17 estaba en el aire a las 3h de haberse dado luz verde a la operación. En general las tripulaciones y unidades fueron avisadas con menos de 24h de antelación de que eran enviadas a la zona.
3 C-17 medicalizados fueron desplegados también en bases del Golfo Pérsico. Uno de ellos despegó rumbo a Kabul a los pocos minutos de haberse producido el atentado en el aeropuerto.
Pocos aviones quedaron inoperativos por averías y el mantenimiento que se les hacía era el mínimo imprescindible para poder salir al día siguiente.
Terminada la operación la USAF ha repartido más misiones a la flota de C-5 Galaxy ya que se da por hecho que los C-17 necesitarán de algunos meses para poder ponerse al día en el mantenimiento. Hablando solo del tren de rodaje habrá que cambiar gran parte de todas las ruedas
Tras finalizar la operación gran parte de las cansadas tripulaciones tuvieron unos días de descanso y se articularon charlas y un servicio de apoyo psicológico al regresar a sus bases de origen. Para todos ellos había sido la misión más dura y a la vez más satisfactoria.
Otra parte de la operación menos vistosa y crucial para el éxito fueron los equipos de control aéreo de la USAF y los Marines que dirigieron todo el trafico aéreo en la zona. Equipos que controlaban unas 300 operaciones diarias sin radar, torre de control u otras facilidades
Y como no una gran flota de cisternas fue desplegada a la zona para poder mantener todo este esfuerzo aéreo.
A otros que se les vio fugazmente de vez en cuando fue a alguno de los 6 B-52 desplegados y que seguro que estuvieron en vuelo casi constantemente, ademas de seguro decenas de F-15E.
El pequeño avión ganó algo de velocidad, lo suficiente para iniciar un corto planeo, en unos pocos segundos se estrellaba contra el Océano. Se convertía seguramente en el último avión argentino en volar sobre las Malvinas. Comenzamos.
En 1978 el Comando de la Aviación Naval Argentina compró 15 aviones T-34C Mentor, un pequeño turbohélice para la instrucción de los aviadores que acabarían pilotando los reactores. El T-34C tenía un rol marginal de ataque ligero.
Tras el inicio del conflicto en las Malvinas se decidió enviar 4 de estos aparatos para su empleo en las islas. Realizaron el viaje por parejas y acompañados de otro bimotor que les sirviera de guía debido a su espartano instrumental.
La historia de una imagen👇. Un Nesher Israelí en el transcurso de una misión durante la guerra del Yom Kippur.
De la historia de cómo los Nesher israelitas llegaron a volar se ha escrito mucho. Yo solo haré un pequeño resumen. Para mediados de los años 60 la Fuerza Aérea Israelí era uno de los mayores usuarios del Mirage III. Llegaron a comprar 72 de estos interceptores.
Los israelíes pidieron a los franceses una versión optimizada para el ataque al suelo.En la zona de Oriente Medio donde volaría sus misiones, la mayor parte de corto alcance y con buen tiempo,no era necesario un complicado radar. Así nació el Mirage V de los que Israel encargó 50
Tal día como hoy hace 60 años la revista Life publicaba esta portada. En su día hice un hilo corto de la historia con alguna imprecisión. Toca contar la historia al completo, la de Yankee Papa 3 y Yankee Papa 13.
31 de marzo de 1965, el fotógrafo británico Larry Burrows viajará ese día empotrado en la unidad HHM-163 de helicópteros de los Marines. La misión de esa tarde es insertar a 465 infantes survietnamitas en medio de un santuario del Vietcong a 20km al sur de Da Nang.
Larry embarcará en uno de los 19 UH-34 que van a tomar parte en el asalto, el Yankee Papa 13. Desde por la mañana comienza a tomar imágenes de la tripulación preparando al YP13. El protagonista de muchas imágenes es el Cabo Farley, de 21 años.
También es mala suerte construir los dos futuros buques estrella de tu flota justo en los astilleros que están a tiro de casi todo lo que tienen los ucranianos de largo alcance.
Aquí están los astilleros que lo están construyendo. Justo al lado del puente de Kerch. Que esa zona esté plagada de sistemas antiaéreos no es solo por el puente.
La construcción del buque comenzó en 2020. Los dos buques proyectados son la consecuencia del rechazo francés a entregar los dos buques de la clase Mistral que los rusos habían encargado y que los franceses acabaron vendiéndoselos a Egipto tras la ocupación rusa de Crimea.
Toca contar otra loca historia de la guerra fría en Groenlandia como prometí ayer. La construcción de la base Camp Century. Comenzamos.
Una vez que las pistas de la base de Thule estuvieron plenamente operativas el U.S. Army comenzó a construir otra base a unos 250km de allí, la que sería conocida como Camp Century.
Los ingenieros del U.S. Army comenzaron la construcción de Camp Century para probar la viabilidad de las técnicas de construcción en hielo y con el reto de mantener la operatividad a cientos de kilómetros de cualquier lugar.
Se ha puesto de moda Groenlandia y he recordado que nunca había hablado de la operación Bluejay. Comenzamos.
Durante la Segunda Guerra Mundial los estadounidenses construyeron varias bases en Groenlandia, la mayor parte eran estaciones meteorológicas para predecir el tiempo en todo el Atlántico Norte y Europa. El gobierno danés en el exilio dio el visto bueno.
En 1949 Dinamarca se unió a la OTAN y cesó en sus requerimientos de cerrar las bases estadounidenses que aún quedaban en Groenlandia. Mientras los estadounidenses buscaban ampliar sus red de bases en el extranjero.