Existe una leyenda, urbana o no, sobre la fundación de la Universidad de Stanford.
Según esta leyenda, Leland Stanford y su mujer, perdieron a su hijo en un accidente. El hijo había estudiado en Harvard durante un año completo, y adoraba su vida allí y la universidad.
Por eso, sus padres, que eran de aspecto humilde y de trato también humilde, querían dejar un recuerdo imperecedero en la Universidad para siempre.
Se acercaron a ver al Rector de la Universidad, y su secretaria después de mirarlos por encima del hombro debido a su aspecto…
los hizo esperar horas.
Al ver que no se marchan, no le quedo otra, que ponerles en contacto con el Rector.
Tras escuchar a los padres, el Rector les dice “ Señora, si cada vez que un estudiante falleciera, pusiéramos una estatua, el campus se convertiría en un cementerio.
La Señora le dijo, no es una estatua, es un edificio.
El rector dijo: “¿Un edificio?, ¿saben ustedes lo que cuesta? Solo la planta de ese edificio han sido 7,5 millones.
La mujer, contrariada, dice a su marido… ¿tan poco cuesta la Universidad? Fúndemos una.
El Rector se quedó con un palmo de narices, y los Stanford fundaron una Universidad en California con su apellido.
Moraleja: No juzgues a nadie por su apariencia…
La segunda parte de esta historia, es la realidad y no la leyenda…
El hijo de los Stanford murió a los 15 años, pero lo hizo de fiebre tifoidea.
Los Stanford visitaron al Rector para pedirle asesoramiento, si fundar una Universidad, un museo o es una escuela técnica
Y cuál sería el precio.
Los Stanford tras escucharle, fundaron la Universidad y un museo.
Moraleja número 2: Las leyendas a veces llegan tergiversadas, y no es cierto todo lo que cuentan. Revisa antes de aceptar algo como verdad absoluta.
• • •
Missing some Tweet in this thread? You can try to
force a refresh
¿Qué relación puede existir entre el cuento de Alicia en el País de las Maravillas y la intoxicación por Mercurio?
Todos conocemos a ese extraño personaje de comportamiento impredecible que es el sombrerero loco ( Mad Hatter), con su raro concepto del tiempo.
Pues bien, los sombrereros ingleses durante los S. XVIII y S.XIX, era común que tuvieran una enfermedad conocida como Hydrargyrismo, que no era otra cosa que un envenenamiento por Mercurio provocada por la inhalación de sus vapores.
Los sombreros de aquella época se hacían con dos tipos de piel, de Castor o de Conejo, la de conejo era la más barata.
La piel de conejo se hacía un proceso llamado carroting, que consistía en usar nitrato de Mercurio y darle un tono mate a la piel.
Tras convertir la piel…
Años 70, y una pareja como tantas otras, en busca de ampliar familia. A pesar de intentarlo como sino hubiera mañana, no estaban teniendo suerte, como tantas parejas buscaron ayuda profesional, dieron con un ginecólogo, Christopher Steptoe, dispuesto a ayudarlos…
Christoper Steptoe trabajaba con colaboración con Robert G. Edwards.
Edwards era un científico de reputación internacional con conocimientos en genética, inmunología y embriología.
Su campo de trabajo era el problema de fertilidad en humanos, que tantos sinsabores causa.
Había hecho experimentos con embriones de ratones, y pensaba que sería posible hacerlo con un ovocito humano y luego implantarlo en el útero.
Al no ser médico, no tenía grandes oportunidades de obtener óvulos humanos.
Leyó un artículo de Steptoe sobre “laparoscopia y ovulación”
Hasta que se empezó a usar el predictor, en el siglo pasado, era habitual utilizar ranas en los test de embarazo, este test de la rana, que era bastante fiable (95%) se lo debemos al doctor Lancelot Hogben…
En 1937, Hogben junto con el genetista Francis Eley Crew importaron 1500 ranas Xenopus desde Sudáfrica al Reino Unido.
A los dos años, ya sabían cómo criarlas en el laboratorio, está rana, conocida como de uñas africana era el espécimen perfecto.
Después de hacer “perrerias” a las pobres ranas, dio con un método que se utilizaría en todas las clínicas del mundo.
La técnica consistía en inyectar bajo la piel de una rana hembra la muestra de orina de la mujer.
La serendipia o el descubrimiento accidental es una constante en ciencia y en farmacología, y gracias a la serendipia se descubrió el Yodo 🧵
Bernard Courtois es un joven aprendiz de farmacia, tras 3 años con esta labor en Auxerre es llamado a filas por Napoleón…
La función de Bernard es ejercer como farmacéutico militar hospitalario.
En ese tiempo de guerra, existe gran demanda de nitrato potásico para disponer de pólvora, y una de sus funciones era fabricar salitre para la pólvora .
Y ¿de donde podía obtener el nitrato?
En la costa y a escasa profundidad había algas marinas, con esas algas y mediante calor, Bernard consigue diferentes sales obtenidas por evaporación, y de esas sales obtenía el nitrato para fabricar pólvora.
Pero un día…
Un día te acuestas con resaca, y al día siguiente descubres el antiinflamatorio más usado en el mundo…
Hablamos de Ibuprofeno, y de Stewart Adams, su descubridor…
Stewart Adams fue un farmacéutico doctorado en farmacología que entró a formar parte del departamento de investigación de Boots.
Su labor junto a dos colaboradores era buscar una alternativa a la Aspirina, con menos efectos secundarios que está.
Adams junto a Colín Burrows y John Nicholson trabajaban en una pequeña casa de los suburbios de Nottingham, ya que la guerra había arrasado gran parte de las instalaciones de Boots.
Estuvieron 10 años investigando diferentes compuestos, intentando encontrar algo.
Hay personas que se sacrifican por los demás, con mucha valentía, y este sacrificio a veces lleva consigo su vida.
En septiembre de 1986 un vuelo de PAN AM que hizo escala en Pakistán fue tomado por secuestradores. Lo primero que hicieron fue ejecutar a un pasajero…
indio estadounidense y arrojaron el cuerpo fuera del avión.
Nuestra triste protagonista, Neerja Bhanot era azafata en ese vuelo y los secuestradores le ordenaron que recogiera los pasaportes. De este modo podrían localizar a todos los estadounidenses.
Neerja y otras compañeras recogieron los pasaportes , pero en un descuido escondieron los pasaportes de 43 estadounidenses entre sus ropas y bajo los asientos, eso haría el “trabajo” de identificación a los secuestradores mucho más difícil.