¿Cómo sería el futuro de la provincia de Chubut en caso de habilitarse la megaminería? No es necesaria una máquina del tiempo que nos lleve a un futuro distópico en donde se haya aprobado la zonificación. Alcanza con conocer lo que pasa en Yala Laubat... 
La aldea, ubicada en el centro de la meseta chubutense y habitada por una comunidad indígena conformada por 18 familias, ya se ha quedado sin agua como consecuencia de las obras que la empresa Pan American Silver (PAS) prepara la explotación minera.
El pueblo se abastecía con agua potable de la cuenca hídrica Sacanana pero se secó de manera abrupta. Entonces el gobierno envió una máquina perforadora vieja que se rompió el mismo día que llegó. Desde entonces a Yala Laubat el agua (escasa) llega en camiones.
"Hace 9 meses que no tenemos agua. No es algo que va a pasar, ya vivimos las consecuencias por las perforaciones que hicieron. Desviaron mucho las napas de agua. La gente tiene que tomar conciencia sobre el tema hídrico", dice Lolo, habitante de Yala Laubat.
Hace unas semanas quienes habitan la aldea se enteraron que los camiones con agua que venían de Agua Salada eran de la Pan American Silver. Decidieron no dejarlos entrar y enviar una carta al intendente y al viceintendente: "No queremos a la empresa en nuestra comunidad....
Es la empresa que nos está saqueando el agua en toda la meseta hace años. Esperamos que les quede en claro cuál es la dignidad de esta comunidad y se abstengan de volver a intentar meter a la empresa en nuestro territorio”.
"Hace años que resistimos para que entren a nuestra comunidad, no podemos tolerar que quieran doblegar nuestra voluntad. Fue muy doloroso para nosotros. No queremos su ayuda", explica Mabel, otra habitante de Yala Laubat.
Así de insólita es la cuestión: la PAS deja a un pueblo sin agua. Y tiene la "solidaridad" de devolverle un poquito del agua que le robaron. Además realiza donaciones: pagó el festejo de fin de año de la escuela. Pero lxs chicxs se negaron a asistir. Yala Laubat tiene dignidad.
Mabel cuenta lo difícil que es la vida de una población sin agua: "Tenemos huertas y quintas, toda la verdura se echó a perder. Las plantas se secaron y no podemos proyectar la producción, es algo muy triste. Los animales corren porque no hay agua en las aguadas...."
Hoy Yala Laubat está recibiendo por día sólo 6 mil litros de agua. Tienen una cisterna de 25 mil litros pero no llegan a llenar ni la mitad. La comunidad está condicionada a utilizar el agua para tomar, cocinar y lavar. “Es una situación lamentable", se ofusca Mabel.
"En los días de calor se agrava más porque es una zona seca donde bajan las napas. El agua es lo más valioso, hay que defenderla, cuidarla y tomarla de una manera segura y saludable. El agua es para los pueblos, no para las mineras”. Fotos:@Luan_Colectiva
revistacitrica.com/yala-laubat-el…
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El pueblo, luego de la intromisión de la PAS, decidió autogestionarse: abrieron una cuenta de Mercado Pago donde recaudan fondos para contratar una máquina perforadora particular y tener acceso al agua sin depender del Estado ni mucho menos de quién la robó.
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