Thread by @FalaciaDelDia

El filólogo Víctor Kemplerer preguntó a una ex-prisionera por qué había estado en prisión

-Por decir ciertas palabras

A partir de esta reveladora respuesta, emprendió la tarea de escribir este libro que explica el lenguaje de odio del III Reich

Abro hilo resumiéndolo
#HilosDC8

Kemplerer fue un filólogo alemán de origen Judío que sufrió la persecución nazi, a pesar de su fuerte identificación con Alemania y de ser cristiano protestante. Durante esos años, llevó un diario en el que anotaba sus experiencias como perseguido y algunos detalles históricos

En su diario también documentó cómo los nazis pervertían el idioma alemán como parte de estrategias de propaganda con las que buscaban apoyo popular a sus políticas totalitarias. Sus análisis siempre consideraron contexto social, político e ideológico en el que estaban inmersos.

Por esta razón, Kemplerer puede ser considerado un precursor del análisis crítico del discurso, que se desarrollaría años después. Esta teoría explica cómo los grupos de poder controlan y manipulan el discurso. Lo explico con más detalle en este hilo:

https://twitter.com/FalaciaDelDia/status/1389726160427393026

Klemperer describe:

-La estrecha relación entre discurso, dominación e ideología
-La capacidad del discurso nazi para complementar la represión violenta mediante el idioma o para justificarla por sí misma
-El idioma como mecanismo de sometimiento, acoso y discriminación.

El ejercicio de tal violencia no siempre era explícito, muchas veces se manifestaba de forma sutil. Los líderes nazis alteraban el idioma, creando un discurso creador, legitimador y reproductor de la violencia que pasaba desapercibido para el hablante común, pero era igual dañino

Las CIERTAS PALABRAS que se mencionan en el trino que abre este hilo se refieren a las palabras que, según el régimen nazi, ofendían a Hitler, al partido nazi, a sus instituciones, a la idea que tenían de Alemania y del pueblo alemán. Pero antes del régimen eran palabras comunes.

El libro entonces trata de la NAZIFICACIÓN del idioma alemán, con el resultante detrimento para el pueblo alemán (no en sentido étnico sino de nacionalidad), especialmente los perseguidos por los nazis. Y de este proceso, Víctor señala como principal responsable a Joseph Goebbles

(Goebbles fue el ministro de propaganda nazi. Se le considera incluso el inventor de la propaganda en su concepción moderna. Muchos usos actuales de propaganda se basan en lo establecido por Goebbles

Para saber más de propaganda, les dejo este video:

Kemplerer sentía que la Alemania nazi había adoptado un modo de hablar nuevo, diferente y vulgar, en el que dominaban la propaganda, las mentiras y la política asesina del régimen, para con ella diseminar la cultura nazi, incluyendo los cambios lingüísticos. Un círculo vicioso

Kemplerer sostenía que desde las nuevas palabras (o nuevos usos para viejas palabras) se ejerció poder y se modeló toda una ideología brutal, totalitaria. El idioma alemán fue secuestrado por el régimen nazi, y fue usado como arma en la lucha contra las libertades de la población

En el idioma se libró una batalla paralela a la de las trincheras y los campos (también se vivió una resistencia)

Este nuevo idioma ayudó a configurar y definir al «enemigo» y brindó herramientas para identificarlo, excluirlo, oprimirlo, y para también justificar esa violencia.

¿Pero cómo se logró? ¿Exactamente cuáles fueron esas mutaciones en palabras, expresiones y significados? Vamos con los ejemplos, y en ellos veremos que nuestra actual realidad de discursos de odio y excluyentes por quienes detentan el poder (y sus defensores) no está tan lejos.

En ese nuevo idioma alemán al servicio del régimen nazi se presentó:

1) Un exagerado uso de hipérboles y de eslogans pomposos, exaltando grandeza de pueblo y soldado alemán, y del Führer. Ideales para ser repetidas millones de veces y adoptadas de manera mecánica e inconsciente

(En Colombia nos es familiar que Alvaro Uribe sea llamado EL GRAN COLOMBIANO (Título ganado en un concurso de popularidad del canal History) o EL MÁS GRANDE PRESIDENTE DE LA HISTORIA (Eslogan a fuerza de repetición). Pues algo parecido sucedió en Alemania en aquella década)

Esta estrategia redujo notablemente la complejidad del discurso, reduciéndolo a ideas sencillas y ruidosas, llegando a la incapacidad de juicio y razonamiento, aturdiendo la consciencia a base de la repetición y paralizando cualquier intento de reflexión con todo ese proceso.

Esto tuvo su auge en el lenguaje militar y las órdenes dadas a los gritos durante la WWII. Creció la brecha entre quienes se adaptaban a ese pobre y monótono idioma y quienes se resistían a él. El uso o la omisión de ciertos términos fue otro elemento para discriminar y excluir

Fue tal el poder de esta neo-lengua, que se instaló entre las víctimas del nazismo, haciendo que el oprimido reprodujera los códigos del opresor, logrando que aceptasen como legítima su dominación y representándose a sí mismos a través de los modelos mentales de los opresores.

Esto encerraba un propósito adicional: homogenizar el pueblo a través del lenguaje para instalar "El enemigo único" (la piedra angular de la estrategia de propaganda). El individuo perdía todo rastro de su individualidad y solo existía como parte del grupo ELLOS, los enemigos.

3) El uso de metáforas y eufemismos al servicio de la mentira y la violencia: El macabro plan para llevar a cabo el genocidio judío, es decir, el entramado de acciones represivas (captura, deportación, confiscación, trabajo forzado, tortura, etc) era llamado «LA SOLUCIÓN FINAL»

La eficacia de este eufemismo SOLUCIÓN FINAL residió no solamente en ocultar la verdad (Genocidio) sino en presuponer la existencia de un problema (Judíos) y se aprovecha de la connotación positiva de SOLUCIONAR PROBLEMAS. La justificación del holocausto se cimentó en este truco

Otros eufemismos comunes: A los prisioneros les llamaban PIEZAS; cuando se referían a los trenes repletos de ellos, CARGAMENTO; a las derrotas militares, CRISIS; a los enviados a los campos de concentración, DESTINATARIOS EMIGRADOS. No se estaba preso sino DE VIAJE.

"Tiene que presentarse" significaba: "lo ha citado la Gestapo, y esto iba ligado a malos tratos, deportación o desaparición"

El eufemismo da a un acto criminal de un aire de neutralidad, minimizar la trascendencia y responsabilidad de las agresiones contra la población oprimida.

Desde el punto de vista del verdugo, ese vocabulario no hace más que mitigar el alcance de su agresión y de su culpa. EXPEDICIÓN DE CASTIGO suena menos grave que CACERÍA HUMANA

De la misma manera que DAR DE BAJA DELINCUENTES suena menos grave que BOMBARDEAR CAMPAMENTO CON NIÑOS

Este recurso se llama DEFINICIÓN PERSUASIVA, y hay de 3 tipos: Pasional (si apela a emociones), oscura (si da una definición intencionalmente confusa) y por apropiación (si pretende heredar la connotación positiva de un término). Lo expliqué en este video:

3) Uso excesivo de adjetivos grandilocuentes (TOTAL, HISTÓRICO, SUPREMO) para situaciones y eventos triviales. En unos casos dotaba de trascendencia a eventos que no la tenían (Juicios SUMARÍSIMOS) y en otros trivializaban el adjetivo (Cada discurso de Hitler era HISTÓRICO)

Esto último permitía que esas CIERTAS PALABRAS que podrían ofender a Hitler (el individuo) resultaran por transitividad ofendiendo a la grandeza del pueblo alemán, la raza aria, la honorable tradición militar de siglos y todas las virtudes con las que quisieran adornarse.

También permitía que el ciudadano común se encontrara "en medio de situaciones legendarias e históricas" casi a diario (inaugurar una carretera, visitar un pueblo, asistir a un evento deportivo...), lo cual reforzaba esa mitificación que se tenía del Führer, el partido, Alemania

4) La negación de nombres a los prisioneros judíos, bien sea asignándoles un número, o llamándolos de manera genérica por algún nombre judío: Todos los judíos eran informalmente llamados Isaac, Jacob, David, Moisés, o eran forzados a cambiar su nombre en el registro oficial

Esto con el fin de deshumanizar y negar la identidad de los prisioneros judíos, y reforzar la nueva identidad alemana a partir de esos nombres de origen germano solamente para arios alemanes, creando un orgullo que fácilmente podría volverse fanatismo y respaldar al partido Nazi

5) Cambio en el significado o la connotación positiva / negativa de las palabras. Por ejemplo, FANÁTICO pasó a ser una palabra muy positiva para describir la fidelidad de un ciudadano al partido Nazi. Fue bien visto desear con entusiasmo ser fanáticos. De igual modo, CIEGAMENTE

Años antes del III Reich, nadie habría pensado que FANÁTICO fuera una cualidad deseable. Pero empezó a usarse con un valor enaltecedor al combinarlo con adjetivos como VALIENTE, ENTREGADO, CONSTANTE, DISCIPLINADO. Se volvió un término para felicitar y dar reconocimiento.

De igual manera sucedió con HÉROE: Pasó de nombrar a quien lograba hazañas para el bien de la humanidad, a tener una asociación inevitable con la guerra. Se impuso la imagen del nuevo héroe como un soldado obediente sin temor a la muerte y con un alto sentido del deber militar

6) Neologismos: Aunque esta neolengua acuñó algunos para conceptos clave de doctrina nazi: [Untermenschentum (Subhumanidad), Entjuden (Desjudaizar), Arisieren (Arianizar), Aufnorden (Hacer a alguien más nórdico)], fue más efectivo el cambio de sentido de palabras ya existentes.

7) Uso del adjetivo JUDÍO para asociar la idea de enemigo a otras entidades (Ahí entra en juego la falacia por asociación, el principio de transfusión y el de enemigo único ). La explotación capitalista pasa a ser Judeo-Capitalista. Los intereses ingleses pasan a Judeo-ingleses

El enemigo externo (bolchevique) e interno (judío) se aglutina en un solo término: la amenaza judeo-bolchevique (Enemigo único)

El adjetivo judío pasa a ser valorativo e incluso despectivo. Con la adecuada entonación, se expresaba exclusión. ERES JUDÍO pasó a ser insulto

8) Uso de metáforas con connotaciones negativas hacia los judíos. Una de las más notorias, asociarlos a animales indeseables (Perros, ratas, cerdos, cucarachas), a términos biológicos (Parásitos, infección, tumor, enfermedad) o el uso del término CRÍA para nombrar a sus hijos.

9) En esa misma línea, referirse al pueblo alemán como un cuerpo sano constantemente amenazado por esos parásitos y enfermedades, logrando ver su erradicación no solo como algo deseable sino como la acción más natural a seguir, incluso de manera preventiva, sin daño previo.

Todas estas estrategias no habrían sido efectivas sin leyes de censura como mecanismo de vigilancia para unificar el pensamiento colectivo, regulando lo que puede publicarse, de qué manera se publica, qué términos puede utilizar, y a quién se le da voz (Principio de verosimilitud

Tampoco habrían sido efectivas sin un sólido aparato de propaganda que incluyera a los medios de comunicación para moldear un pensamiento popular que defienda intereses del partido Nazi.

Para entender qué es consenso manufacturado, recomiendo este hilo:

https://twitter.com/FalaciaDelDia/status/1425290348922908677

Estas ideas así creadas eran naturalizadas como "El sentir del pueblo", reproducidas mediante el uso irreflexivo del mismo lenguaje, sin consciencia de cómo se había dado este proceso

Otros elementos cruciales fueron meramente discursivos y retóricos. No los trataré en este hilo

Baste decir, para terminar, que toda esta estrategia parte de dos condiciones que la hacen triunfar:

-Sus mensajes apelan a emociones y no a la razón
-Simplificar el mensaje para que las masas lo capten y reproduzcan, aún si no lo comprenden.

Como en estos dos ejemplos:

Como vemos, el éxito de esta estrategia en aquellos años ha marcado el camino para que estrategias similares se planeen y ejecuten en otros países, incluido el nuestro. En un próximo hilo continuaré esta explicación con ejemplos más cercanos, que tristemente no nos sobran.

Y ustedes se preguntarán: ¿Y todo esto para qué? ¿Yo que tengo que ver ahí?

Bueno, pues todo esto ha sido para 1) Tomar consciencia de que esto ocurre y 2) Saber cómo contrarrestar los nocivos efectos de esta manipulación del lenguaje por parte de quienes están en el poder

Kemplerer estaba convencido de que no sería posible desnazificar la mentalidad alemana y borrar las convicciones nazis y las actitudes nazis si no se eliminaban los vestigios del lenguaje nazi que permanecían aún en el inconsciente colectivo. El lenguaje era su caldo de cultivo.

Por eso nosotros debemos también ser conscientes y vigilantes de este lenguaje. Atentos a las palabras que usan (y usamos) para explicar la realidad, defender nuestras posturas y tratar de convencer la contraparte. Allí pueden estar subyacentes las intenciones de grupos de poder

Y como siempre recomiendo: Tenemos que desarrollar competencias argumentativas, de lectura crítica y de desarrollo del pensamiento crítico. Ese es un trabajo titánico con muchísimos actores involucrados. Desde esta humilde cuenta seguiré aportando granitos de arena.

Y hasta aquí el ejercicio de hoy, pero atentos que hay ñapa.

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(Con este hilo estoy participando en el Congreso virtual de Hilos Twitter que organiza @Sci_Granada)

Ñapa 2: Hilo que recopila todos los hilos que he escrito y los videos que he grabado sobre argumentación. ¡Ya vamos en más de 150! Espero los disfruten.

https://twitter.com/FalaciaDelDia/status/1228697575399788545