Ayer saltó la polémica porq, en una firma colectiva, resulta que una autora de comic...era un autor. Carmen Mola: el retorno. ¿Y esto es importante e indignante? Sí ¿Es lo mismo que cuando las mujeres usaban seudónimos masculinos? No ¿Por qué? Pues hagamos un recorrido histórico
Las mujeres SIEMPRE han escrito. A la primera persona que se le ocurrió firmar un poema fue a una mujer, Enkheduanna, una sacerdotisa acadia. La primera novela que conservamos es de una mujer, Murasaki Shikibu, una japonesa que escribió El cuento de Genji.
Peeeerooo, amiguis, el problema está en que siempre han tenido más trabas, su obra se ha conservado peor y han sufrido muchas más consecuencias sociales por escribir. Se presuponía que una mujer debía cuidar la casa e hilar, no ponerse a escribir... ni a leer demasiado.
Así, conservamos a Suetonio, pero no las memorias de Agripina. Conservamos a Dioscórides, pero no las obras de Antiochis de Tlos. Y solo conservamos la obra de Sulpicia porque su colega, Tibulo, metió uno de sus libros como anexo al suyo.
Se han conservado obras, pero infravaloradas, consideradas "cosas de mujeres", como la ginecología de Trota o la mística de Hildegarda. Y obras de mujeres que renunciaron a su vida mundana, como Sor Juana Inés de la Cruz o Santa Teresa. La autoridad por la renuncia al cuerpo.
Otras fueron despreciadas, aun en época contemporánea, como las Sin sombrero, o anuladas por sus parejas masculinas que, muchas veces parasitaban sus obras, como María de la O Lejárraga o Zenobia Camprubí.
O sus obras quedaron sin nombre. Como decía Virginia Woolf, anónimo ha sido, durante mucho tiempo, nombre de mujer. Y presuponemos que todos esos anónimos son hombres. Incluso Frankenstein casi queda anónimo. O atribuido al marido de Mary Shelley ¿cómo iba a ser buena una mujer?
Por eso, muchas, optaron por el seudónimo masculino. Como forma de supervivencia, para poder publicar, para no sufrir acoso. Y así hemos conservado la obra de Cecilia Böhl de Faber, las hermanas Bronte o Aurore Lucile Dupin de Dudevant (¿suena más George Sand?).
¿Es este el caso ahora o con Carmen Mola? No, se sigue publicando y premiando más a los hombres. Las mujeres aun sufren violencias en ámbitos culturales varios, y la literatura o el ensayo no son excepciones.
Así que no, el seudónimo femenino no es por eso.
Tampoco es exactamente un seudónimo. Estos casos han sido gente que ha fingido ser mujer en entrevistas, que ha mentido para autorrecomendarse, como en el caso de Mola o para apropiarse de una serie de experiencias.
El caso es que en los últimos tiempos hay cada vez más mujeres que quieren leer a mujeres, hay un nicho en la literatura feminista, hay un mercado para las obras femeninas. Así que sí, ahí TAMBIÉN quieren meterse. Eso también lo quieren ocupar. Pese a todo lo demás.
Y esto, amiguis, es el verdadero borrado de las mujeres. El engaño inmoral del asunto. Y es por esto que es indignante. Y un insulto a todas las mujeres que no pudieron publicar o que aún hoy ven los premios recaer una y otra vez en hombres... incluso cuando van a mujeres.
Más sobre el tema, y sobre cómo no ha sido simplemente usar un seudónimo
La percepción del tiempo es curiosa. A veces, un museo sobre el metro parece folklórico, una idea peregrina sobre algo moderno, algo que empezó en 1919 y finalizó en 1966. Antes de ayer, pensamos. En cambio, lo “medieval” parece malo. Pero pensemos un poco…
Los romanos exhibían a sus cautivos en los triunfos. Los paseaban para que la gente los viera. Qué barbaros. Sin embargo, se nos olvida que en 1958 había un zoo humano en Bélgica, en que exponían a congoleños. Mientras, mantenían el trabajo esclavo y cortaban manos como castigo.
Ota Benga, exhibido en un zoo estadounidense tan solo quince años antes de que abrieran la estación. Se suicidó en 1916. En Portugal, en la Exhibición de 1940, también hubo un zoo humano. Francia e Inglaterra tampoco fueron excepciones en esos años en q la estación estuvo abierta
Recuperemos más de uno, los que se olvidaron, pero que volvemos a recordar.
Por ejemplo, Vibia Chresta y Vibia Calibenis, prostitutas romanas, q se negaron a vivir con vergüenza, y en cuyo epitafio se afirma q habían ganado su dinero honestamente.
Por las que levantaron la cabeza
Iaia de Cícico fue pintora. Dice Plinio q de mayor talento que sus compañeros, que, en su época, copaban las galerías. Las Guerrilla girls tuvieron que reivindicar, otra vez, la injusticia de situaciones similares.
Por las que tuvieron que demostrar el doble y recibieron la mitad
Allia Potestas, como valiente, honesta y decidida, q vivió con sus dos amantes. Bella y curiosa. Podía enfrentarse a lo que fuera. Solo les quedó su tumba, frente a la que echarla de menos.
Por las que sortearon las normas y vivieron a su manera, q construyeron su propio espacio
Aprovechando que es pronto voy a contar una historia familiar....errrr... un poco deshonrosa. La historia implica a mi madre, que, en su juventud, era una señora un poco hippy. Es esta (el otro es mi padre, un señor serio y MUY respetuoso con las normas):
El caso es que, en un viaje turístico acabaron en Jaca y visitaron lo que hoy es el Museo Diocesano. Mi madre, como habéis visto, era fan de los ponchos, y mi padre notó que visitaba el museo muy adusta y con mucha ceremonia, pero que se cansó pronto.
El caso es que, en realidad, mi madre con dos copas dejaba salir su alma de mapache... y bajo el poncho había escondido un cuadro que le había encantado. Así, lo descolgó y pum. Mi padre no le dejó que se lo llevase, claro, y ahí que volvió a devolverlo para disgusto de mi madre.
Bueno, una aclaración histórica y no tan histórica aquí. A diferencia de los egipcios (aunq aún se discute la extensión) y de la práctica q se ha mantenido en algunas zonas de África, en occidente la ablación del clítoris fue una cuestión médico-social. Chunga, pero médico-social
Pablo de Egina o Aecio, por ejemplo, comentaban esta posibilidad en el caso de que el clítoris fuera "incómodo". No nos equivoquemos, socialmente incómodo. Es decir, grande. No doloroso para la mujer o cosas así, no, incómodo para ELLOS.
Y esto continuó así muuucho tiempo. De hecho, en el siglo XIX era una práctica habitual para controlar la sexualidad femenina, pero ehh, dentro de la medicina. De hecho había ENTUSIASTAS, como Isaac Baker Brown. Le acabaron echando por practicarlas sin consentimiento, a porrillo
Hoy no hablamos de romanos, pero si de la importancia del contexto y de poder relacionar las creencias, sociedades e imaginarios colectivos. Podemos poner como ejemplo la bandeja de El Gandul. (Dejo el archivo de Ceres para más información y descripción) ceres.mcu.es/pages/ResultSe…
Lo primero, el contexto (hola, piteros): se compró en un mercadillo. Nuestra única forma de datarla es por paralelos iconográficos y de la pieza en si (hay una bandeja parecida en La Joya). Deducimos que era funeraria por lo mismo. Pero todo lo demás se ha perdido para siempre.
En este artículo veis una comparativa entre la bandeja de El Gandul, la de La Joya y un altar en El Carambolo, y tenéis más información sobre todo este percal: researchgate.net/publication/32…