La historia de un barco con mala suerte y con un final a su altura.
El USS William D. Porter fue un destructor de la clase Clase Fletcher. Seguramente la serie de buques más popular y exitosa de la WWII. El D.Porter entró en servicio a finales de 1942 y es un barco que merece un hilo por derecho propio.
La primera misión de la guerra para el Porter fue ser parte de la escolta del acorazado Uss Iowa. El acorazado llevaba como pasajero nada menos que a Franklin D. Roosevelt en su viaje a la conferencia de Teherán.
El D. Porter comenzó con mal pie. Su capitán Wilfred Walter ordenó salir del puerto pero nadie se percató que el ancla estaba a medio subir. El descuido hizo que le hicieran un buen siete a la cubierta de un mercante que había a su lado. Mal presagio.
El D.Porter se unió al resto de barcos en su misión secreta. Su función era brindar protección antisubmarina. No llevaban mucho recorrido cuando una gran explosión sacudió el convoy. Todos los barcos iniciaron el zafarrancho de combate.
En minutos el D.Porter comunicó que una de sus cargas de profundidad se había soltado de su amarre y había caído al agua provocando la explosión a la profundidad programada. El cachondeo de la flota con el destructor aumentaba y el enfado del almirante Ernest J. King también.
Siguiendo con las desgracias, una ola barrió la cubierta arrastrando a un marinero que nunca sería encontrado. A la vez el Porter sufría una avería en sus maquinas que hacía aminorar la marcha a todo el convoy.
Al día siguiente el Capitan del Iowa organizó una demostración de fuego antiaéreo para el presidente. Se lanzaron varios globos de gran tamaño para realizar las prácticas.
El Capitan del D Porter decidió que no estaría mal aprovechar algún globo perdido del Iowa para practicar. Dicho y hecho. A su vez ordenó también una práctica de lanzamiento de torpedos. Como blanco para realizar los cálculos de tiro eligió al Iowa…
Durante las prácticas se retiraba el sistema pirotécnico que lanzaba los torpedos al agua. Se hizo la prueba, simulacro del tubo 1, simulacro de fuego del tubo 2… y sorpresa, al ordenar el fuego al 3, el torpedo salió disparado del tubo camino del Iowa.
El capitan Walter ordenó a su radiotelegrafista que emitiera una señal de alarma, pero este en estado de nervios radió que el Porter iba marcha atrás a toda maquina. En el Iowa nadie entendía nada hasta que vieron la estela del torpedo.
El Iowa se puso a máxima potencia y viró lo más cerrado posible. Roosevelt que iba en silla de ruedas estuvo a punto de caer por la borda. Finalmente y gracias a la maniobra el torpedo pasó de largo. Mientras esto sucedía la artillería principal de Iowa apuntaba al D Porter.
Aquello era demasiado y el D.Porter fue expulsado de la misión y enviado a una base en las Bermudas donde toda la tripulación fue arrestada. El marinero que había olvidado quitar la carga de lanzamiento al torpedo fue condenado a 14 años, poco después fue indultado por Roosevelt
El barco se hizo famoso en la Us Navy y allá donde fuera era recibido por el resto de buques con un “No disparen, somos del partido republicano!” y burlas semejantes. Además fue enviado donde nadie quería ir, a las Aleutianas.
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Los israelíes han hecho público los números de su operación contra Irán. Algo que no sorprende ( o sí) es que afirman que la mitad de los ataques contra objetivos en Irán han sido ejecutados por drones. Unas pequeñas reflexiones.
Lo único que se tiene constancia de que hayan derribado los iraníes es un puñado de drones, en realidad un número muy pequeño. Parece que los drones de largo alcance israelíes se han movido como han querido por los cielos de Irán.
Sorprende cuando los estadounidenses han perdido sobre Yemen multitud de los suyos y los Bayraktar TB2 ucranianos solo operaron al principio del conflicto por su alto número de bajas contra los rusos.
Los ataques con misiles de Irán han demostrado la culminación de una capacidad en continuo desarrollo . Hilo con los hitos del programa de misiles iraní para demostrar que no son unos recién llegados a este ámbito.
En 1984 una comitiva iraní (recordemos por entonces Guerra Irán-Irak) viaja a Siria y Libia con el objetivo de adquirir misiles balísticos. Siria solo ofrece capacitación de personal pero Libia si entrega misiles Scud-B.
En marzo de 1985 Irán dispara su primer Scud. Su objetivo es una instalación petrolífera iraquí. Durante esa guerra Irán lanzará 121 misiles Scud contra Irak.
Ahora que todo parece indicar que los B-2 vuelven a desplegar para estar cerca del teatro de operaciones de Oriente Medio, toca hablar de lo que motiva ese despliegue, con lo que se supone que atacarán los B-2 si finalmente son utilizados.
La GBU-57 Massive Ordnance Penetrator (MOP) nació a principios de la década de los 2000. Se diseñó para unos objetivos muy concretos en unos lugares muy determinados.
Se creó para destruir los centros militares enterrados bajo tierra, eso engloba centros nucleares, centro de desarrollo y silos de misiles. Y relacionado con esto para efectuar ataques de los llamados de decapitación, esto es alcanzar puestos de mando enterrados con altos cargos
Parece que los rusos han superado la barrera de los 4000 carros de combate perdidos en la guerra en Ucrania, lo cual es una cifra bastante increíble. Es una medida también de su producción salvaje de armamento durante la época soviética.
Para los que se ríen del expansionismo ruso y el temor en occidente, el peligro no es que veamos T-72 camino de Albacete, eso nunca pasará. Lo que parece que no se termina de entender es otra cuestión.
Los rusos dan por bueno, ahora mismo y en futuro cercano también, el dilapidar parte de su ejército y el perder a decenas de miles de sus soldados si consiguen una ventaja estratégica sobre sus vecinos.
El pequeño avión ganó algo de velocidad, lo suficiente para iniciar un corto planeo, en unos pocos segundos se estrellaba contra el Océano. Se convertía seguramente en el último avión argentino en volar sobre las Malvinas. Comenzamos.
En 1978 el Comando de la Aviación Naval Argentina compró 15 aviones T-34C Mentor, un pequeño turbohélice para la instrucción de los aviadores que acabarían pilotando los reactores. El T-34C tenía un rol marginal de ataque ligero.
Tras el inicio del conflicto en las Malvinas se decidió enviar 4 de estos aparatos para su empleo en las islas. Realizaron el viaje por parejas y acompañados de otro bimotor que les sirviera de guía debido a su espartano instrumental.