Cuatro minutos de horror cristofascista. El juramento de lealtad, su declaración de intenciones. El ascenso de los fundamentalistas evangélicos en la primera superpotencia mundial, pidiendo a gritos su versión de la Sahría.
Y sí, todos y cada uno de los miles de asistentes (y este es solo uno de los shows dentro de un tour nacional) poseen armas.
Y si creéis que esto es solo algo marginal, unos pocos fanáticos sin verdadero poder, es que no habéis estado prestando atención.
Si algo nos ha enseñado la historia es lo rápido que una democracia se puede convertir en una teocracia fundamentalista. Si pensáis que eso no puede pasar en EEUU, pensadlo otra vez.
Por cierto, en el minuto 2:08 hablan de las "Siete Montañas". Bien, esas "montañas" representan lo siguiente: religión, familia, educación, gobierno, medios, artes y negocios. Su meta es controlar todo eso.
Esta es una de las características del dominionismo, una postura evangelista que afirma que el mundo ha caído ante la influencia de Satán, y que Dios les ha encomendado rescatar su Dominio de las garras del maligno por todos los medios necesarios.
Esta vertiente del evangelismo nació en EEUU y ha ido adquiriendo poder a través de lo que ellos llaman "planting", es decir comprar iglesias pequeñas para convertirlas en franquicias desde las que adoctrinar en el dominionismo, similar a lo que hace Arabia Saudí con el wahabismo
Y algo de lo que no se habla tanto, pero que es especialmente preocupante, es como estos evangelistas han ido extendiendo su doctrina por África, Asia y América del Sur.
El ejemplo de esto está en el caso de tres evangelistas estadounidenses que viajaron a Uganda para convencer a las autoridades y políticos del país de instaurar la pena de muerte a los homosexuales: smh.com.au/politics/feder…
Finalmente la pena de muerte sería sustituída por cadena perpétua, pero la ley fue tumbada por el tribunal constitucional del país. Pero no fue por falta de intención por parte de los evangelistas, por mucho que ellos luego lo negaran.
Así es como, frente a nuestras narices, fundamentalistas cristofascistas van metiendo sus tentáculos en cada vez más y más áreas de nuestra sociedad.
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Qué, ¿ya estáis contentos los del Team Verano? ¿Eh? ¿A gusto con el "calorcito" y el "buen tiempo"? EH, GRANDÍSIMOS D[REDACTED]
Team Estación McMurdo.
Se me ha enfadado uno por este tuit y me ha insultado, porque por supuesto esto es tuiter y si no hay quien se ofende con un tuit de coña no sería tuiter.
La policía de Uvalde intentó por todos los medios que estas imágenes no salieran a la luz.
Muestra como los agentes evitaron enfrentarse al tirador, mientras este masacraba a niños pequeños, durante más de 40 minutos, pese a superar en número y equipamiento al atacante.
Otoya Yamaguchi, de 17 años, hiere mortalmente al líder socialista Inejirō Asanuma durante un debate en directo. Yamaguchi, que se quitaría la vida en prisión, se convertiría en un mártir para la ultraderecha japonesa.
Tokio, Japón, 12 de octubre de 1960 | 📸 Yasushi Nagao
Gerda Steinhoff (centro) se rie durante su juicio por torturar y asesinar a cientos de prisioneras del campo de concentración de Stutthof, del que era supervisora. Stutthof sería condenada a muerte y ejecutada ese mismo año.
Gdańsk, Polonia, abril de 1946 | Autor desconocido
La policía dispersa con botes de gas lacrimógeno a docenas de manifestantes que protestaban por la demolición de sus casas para construir viviendas para blancos como parte de la política del Apartheid.
Modderdam, Ciudad del Cabo, Suráfrica, agosto de 1977 | 📸 Leslie Hammond
Un grupo de madres y padres segregacionistas del Colegio William Frantz portan una muñeca negra metida en un ataud para tratar de amedrentar a la pequeña Ruby Bridges, de 6 años, la primera niña negra en asistir al colegio.
Nueva Orleans, Louisiana, 1960 | Autor desconocido
Dos soldados estadounidenses y un soldado survietnamita torturan a un prisionero de guerra norvietnamita, arrojándole agua sobre el rostro cubierto (waterboarding), como parte del Programa Phoenix desarrollado por la CIA.
Da Nang, Vietnam del sur, 1968 | Autor desconocido
CEOs y altos ejecutivos de la industria tabacalera estadounidense, llamados a testificar ante el Congreso, declaran bajo juramento que la nicotina no causa adicción.
Washington D.C., 14 de abril de 1994 | 📸 Ray Lustig
Cientos de ciudadanos libios asaltaron ayer el Parlamento, para después prenderle fuego. Protestaban por las condiciones de vida, cada vez más deterioradas, y porque los líderes del país han pospuesto sine die las elecciones que debían celebrarse en 2021.
Otrora el país más próspero de África, con un nivel de vida comparable al de algunos países europeos, Libia fue arrasada por una guerra civil apoyada por occidente, que basó su intervención en mentiras popagadas por la prensa sin ningún pudor:
Tras el derrocamiento y asesinato de Gaddafi el país se sumió en una nueva guerra civil (el Parlamento internacionalmente reconocido se trasladaría a Tobruk en 2014) que culminaría con un alto el fuego en 2020 y la promesa de elecciones libres.