Nuevo filtro de #TikTok (que coloca un fantasma/monstruo volando en la parte superior de la pantalla y riendo a carcajadas) genera un nuevo #trend que se ha vuelto viral:
La mecánica es sencilla: Dejas el móvil grabando y te marchas corriendo ENCERRANDO A TUS HIJOS con el filtro en proceso.
Lo supuestamente divertido de esto es grabar (y publicar, claro) el sufrimiento de tus pequeños.
Cómo lloran desconsolados.
Cómo gritan llamándote.
Cómo patalean y arañan la puerta presas del pánico.
Cómo entran en shock al verse abandonados.
Haciendo las delicias de una red que es incapaz de entender el profundo daño psicológico que provoca esto en una mente infantil, no solo el desamparo y el terror…
…sino por el hecho de que lo hagas porque lo consideres divertido…
…y para el disfrute de tu público.
La tortura infantil como reclamo viral.
Por eso, déjame decirte que, si consideras estos vídeos divertidos, debes plantearte acudir a un profesional de la salud mental.
Pero, si además has utilizado a tu pequeño en este proceso de tortura para conseguir likes o followers, deseo de todo corazón…
Que Asuntos Sociales, @policia y @guardiacivil estudie con detalle si estás capacitado para estar al cuidado de tus pequeños.
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"Hay un pesado que, desde hace dos semanas, manda fotopollas a mi hija. No se puede hacer nada contra esta gentuza".
La hija tiene 14 años y cuenta propia de IG.
No.
No es un pesado.
ES UN DEPREDADOR SEXUAL INFANTIL.
Y sí, hay mucho que puedes hacer al respecto:
Envío de contenido sexual a un menor:
En España es un delito enviar contenido sexual a un menor. Los emisores se enfrentarán a penas por exhibición pornográfica ante menores (art. 186 del CP).
Acoso sexual:
Si la actividad se realizase de manera reiterada, insistente y generase menoscabo en el receptor, el emisor del material se enfrentará ADEMÁS a penas por acoso (art. 172 ter del CP).
Estos días es noticia que una ciclista famosa que se lucró (mucho) con OnlyFans está intentando deshacer las consecuencias de esta decisión intentando conseguir que sus clientes borren su contenido apelando al derecho al olvido.
Hagamos un análisis de esta apelación:
Para empezar, explíquenos qué es el derecho al olvido.
Se trata de una manifestación específica del derecho de supresión de datos personales (exigir que el responsable de un tratamiento elimine sus datos), pero con un contexto y objetivo muy característicos.
La finalidad del derecho al olvido es permitir que una persona solicite al Responsable del Tratamiento de Datos que se elimine o deje de mostrar información personal suya en internet cuando esa información:
Con todo el respeto que pueda merecer un pedófilo que busca ayuda terapéutica para no acabar cometiendo abuso sexual infantil (no estoy aclarando cuánto merece)… hay algo que, si no digo, reviento: eldiario.es/catalunya/tele…
Si te reconoces a ti mismo como pedófilo, sientes “atracción sexual” por los niños y TE METES A MAESTRO, tú no eres una persona intentando controlar sus aberrantes pulsiones.
Eres un depredador al acecho que no ha atacado… porque no se han dado las condiciones “oportunas”.
¿Y si te cuento cómo se gestionó un caso de acoso escolar relacionado con usos inapropiados de la RRSS y agresiones físicas, con diagnóstico del protocolo confirmado… pero atendido mediante medidas educativas, sin emplear medidas sancionadoras… y que acaba bien? 😊
Y, ojo, que ese “acaba bien” no es una mera percepción de los profesionales que lo incoaron: Está respaldado por la percepción de las familias. Las de los agresores y la de la víctima 😊
Empecemos por el principio: No se puede esperar atenciones y resultados siempre.
Aquí se dio la posibilidad de contar con una gran Jefatura de Estudios y un Equipo de Gestión de la convivencia brillante.
Pero no solo eso.
Una de las grandes conclusiones que saco tras tanto tiempo divulgando sobre ciberprotección infantil es que hay un gran porcentaje de padres y madres a los que les enfada terriblemente que les digas que cuidar de sus hijos es responsabilidad suya en primer término.
No soy de los de “la culpa es de los padres”.
Doy mucha caña a las plataformas (si me has leído 20 tuits, seguro que ya me has visto señalando a TikTok como una empresa que usa a los niños como carnaza para su perfil favorito de usuario, los depredadores).
Doy mucha caña a los legisladores (si me has leído 100 tuits, ya habrás visto cómo indico las debilidades de nuestras leyes y cómo critico que, una vez investigado, los depredadores pasan con poca consecuencia por nuestro sistema judicial).
“Has violado entre tú y 5 más a un compañero del cole, pero… como eres pequeño, ni medidas de intervención, ni tratamiento, ni alejamiento, ni reinserción, ni reparación... Y ahora a dormir, que mañana tienes cole y debes estar descansado para lo que te apetezca hacer”.
¿Y los responsables principales?
¿Qué tipo de padres crian a violadores grupales de niños?
«Que sufra, quiero ver cómo sufre», decía uno mientras violaban.
¿Qué responsabilidad asumirán los principales arquitectos de estos ciudadanos fallidos, sin valores y peligrosos?