En estas épocas veo que muchxs escriben que se pelean con sus familiares en las cenas. Me encanta que se mantengan firmes a sus ideologías pero hay algo que se llama pedagogía de la discusión y a veces el arruinar la cena no solo es perder tiempo, es también oprimir (abro hilo):
La pedagogía de la discusión trata sobre cómo, cuándo y dónde son más exitosos los debates y las discusiones ideológicas... aquí les paso algunos datos y argumentos de por qué la cena de #navidad no es un buen lugar ni momento:
Cuando alguien se esfuerza para pasar un buen rato (limpiar, gastar, cocinar, etc.), se encuentra más sensible a tomar todo de manera más personal cuando el resultado de ese esfuerzo resulta diferente al objetivo de la cita, se llama expectativa fallida o fallo de expectativa...
En las cenas familiares, muchas personas se esforzaron para verles y no esperan que les den un sermón acerca de algo que desconocen, por lo que pedagógicamente nada de lo que les expliquen les va a entrar, no porque no quieran sino porque cognitiva/emocionalmente no pueden.
Es decir, si ustedes tienen una postura política, es porque ustedes tomaron la decisión muy individual de tenerla, y llegaron a ella por medio de años de informarse y de estudiar, no por un comentario autoritario de alguien más en una cena de navidad...
Si ustedes ya se informaron, es muy probable que ustedes tengan la razón en adquirir esa postura, pero la otra persona no tiene ese contexto y por lo tanto no está ni emocional ni pedagógicamente preparada para una confrontación.
También hay que recordar que mientras no nos falten al respeto, no tenemos por qué pensar que nosotrxs somos lxs que estamos bien, las ideologías no son más que valores y decisiones que tomamos de manera muy individual y subjetiva y dependiendo nuestros contextos...
La manera correcta de discutir según la pedagogía, sería esperar a un momento en donde las personas estén emocional y cognitivamente abiertas a ello, así tendrán la mente más abierta y no en estados emotivos de alerta (como lo es una cena familiar).
Entonces podrían tratar de hablar con sus familias antes de las cenas, decirles que por favor durante su estancia no toquen tal o cual tema, o pasarles material sencillo para que se informen antes de verte o si de plano ya dijeron algo durante la cena...
Lo mejor sería que en ese momento pongan un límite, decir que no estás de acuerdo o que no está bien pero retomar el tema después, no hay manera de explicarle la historia completa del socialismo, los contextos, y además convencer a mi abuelita de ello en una noche...
Pero en un par de años a la mejor sí. De lo que sí la puedo convencer en una noche es de que eso que dijo me lastima, y prefiero que no lo diga durante este tiempo especial y de que se puede discernir sin lastimar.
Ahora, si el contexto ya de plano es irrespetuoso o agresivo, se vale defenderse e irse de ahí. Lo que no se vale es tratar de usar una cena familiar para meter pláticas e ideas de ideologías individuales, eso también es violento.
Recuerden que la clase trabajadora, principalmente de edades avanzadas, no tuvo acceso a mucha información, tiene días contados para descansar y nos brinda esos días. Reclamarles no ser políticamente correctas, podría caer en no tener conciencia de clase.
Tengamos paciencia, comuniquemos nuestras ideas y si vamos a discernir hagámoslo con información, con ciencia, con respeto y con pedagogía. Si hay alguien cuyas ideas les ponen en riesgo (físico, mental o emocional) se vale no acudir.
Espero les sirva, recuerden que siempre es bueno defender nuestros puntos de vista, pero nunca valen más que el amor que una persona que tal vez no nos entiende pero que quiere hacerlo, nos puede dar y siempre hay espacios para debatir. ✨
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