La ruta del sándwich porteño, para tener a mano.
El sándwich es veraniego por definición, ese que comés caminando, en la plaza, en una vereda, en un mostrador. Acá vamos entonces: estos son algunos de los mejores sánguches que probé en los últimos 12 meses. Agregan los suyos?
El sándwich es veraniego por definición, ese que comés caminando, en la plaza, en una vereda, en un mostrador. Acá vamos entonces: estos son algunos de los mejores sánguches que probé en los últimos 12 meses. Agregan los suyos?
El lomito de la rambla. Es un clásico porteño de esos que merecen placa de bronce. Lomo grueso, jugoso, tierno. Hay varias opciones, me gusta la que agrega morrón (porque siempre voto a favor del morrón). Viene con papas, cuesta caro, te sentís un dandy en Recoleta. 
El bandhiolita de Crumb, en Villa Crespo. Tremendo sándwich que si además lo pensás en su relación precio calidad está entre lo mejor de BsAs. Toquecitos asiáticos para generosas (me quedo corto) fetas de bondiola casera.
Ahí nomás de Retiro, De los Frutos es sinónimo de sándwiches. Esos lugares que están bien que existan: pan casero pariente de la focaccia y rellenos con amor. Yo probé el de tapa de asado, cebolla morada, queso azul y alioli de chimichurri, pero hay más.
Shokupan marcó la cancha con estos sándwiches de miga inspirados en Japón, mucho relleno, pan más elástico, sabores bien húmedos. El de pollo la rompe. Dos gracias: te dejan pedir "media porción" para un económico bocadillo casi al paso. Y tienen un jardín que es un escondite.
La Valiente hace todo bien. Y en ese todo incluye sándwiches de miga como este, que no se pueden comparar con otros. Mirá ese relleno y limpiate la baba que se te está cayendo... En Núñez y Vicente López.
Para Perú el sándwich es cuestión nacional. Y en Palermo tenemos a El Peruanito Ray como su embajador. No todos sin igual de ricos. Pedite el de mayonesa de pollo, es perfecto, enorme, regalado.
Muy a favor del sándwich de vitel toné de Batacazo en Manduca, ese paseo que armaron dentro del Paseo La Plaza. Pan casero, pickles caseros, muchas ganas en este local.
Ahhhhh, me vuelvo loco. Los amo, Alacena Pastificcio. Y los amo en gran parte gracias a esta farcita de mortadella, straciatella y pistachos. Un golpe directo al corazón del hipsterismo hecho con calidad, sabor, pasión. En Palermo.
Si te querés sentir cheto, te vas a Café Mishiguene y probás cualquiera de sus sándwiches de miga que escriben su propio libreto. El de pastrón y el de trucha ahumada de color psicodélico, ay diosito, gracias. En el Palermo de ahí abajo, cerquita a Libertador.
Volvemos a lo clásico, volvemos a Manduca en la pizzera Av. Corrientes. Y ahí año pasado reabrió Los Patitos, con su sándwich de cuadril que en realidad es ojo de bife. Pan y carne tiernísima, nada más. Ponele mucha salsa criolla e historia encima.
En una época este era "el" lugar donde ir y sentirse en la pomada. Hoy está más tranqui, pero sigue siendo increíble lo que hacen. Hablo de Nola, con su cocina traída de Nueva Orleans. Y el sándwich de pollo frito (pidan muslo) con jalapeños es... es... es... ¿perfecto? Palermo.
Nueva York, LTA. En nuestra Villa Crespo tenemos un sándwich de pastrón que se le para en el ring a cualquier deli neoyorquino. Pan oscuro, pastrón caliente cortado muy fino, pepinos, cebolla caramelizada, mostaza. Alabado seas, pastrami.
Esos pancitos tipo nube cocinados al vapor, que definen a los baos. Ese relleno de panceta fresca braseada. Ese picante, ese cilantro. Vayan a Bao Kitchen, en Recoleta. Y agradezcan.
Qué bien que están los sándwiches que hacen en Amasadero, una panadería moderna pero de barrio, ahí en Balbín y Monroe! Esta es la gente que queremos a cargo del país.
Uno más de pastrón, ahora con una relación precio calidad de esas que te salen lágrimas de emoción. En Jalá hacen una jalá (pan trenzado) apenas dulzona con pastrón casero que es una maravisha. Localcito cerca de parque centenario.
Los dueños de San Guchero son tucumanos. Y hacen solo una cosa: sándwich de milanesa tucumano. Orgullo provincial, que llega a Barrio Norte.
Vale cómo sándwich? No importa, pruébenlo: es el smørrebrød de paté casero que hace Nórdica, en el Mercat Caballito, arriba del shopping. ´Base de pan 100% centeno, el paté por encima, pickles, brotes, mostaza. Super bien.
Es famoso y con razón: el fosforito de jamón y queso de La Kitchen. No más palabras, señor juez.
Hoy termino con este lugar, que no puede no estar. El famoso Café Paulin, ícono del centro porteño. No elijo uno, es un templo, cada uno tendrá su favorito.
Continuará.... Agreguen los suyos!! Y RT así armamos la guía del sándwich porteño!
Ayyyy. Claro que este es La Crespo!!!
Lo tengo tan incorporado que no puse el nombre!!! Este es La Crespo, en la esquina de Vera y Thames!
Acá me hicieron acordar de Don Dalmiro, un lugarcito (lugarzato) en Palermo que hacen sándwiches en el momento. No solo tienen muy buenos fiambres y quesos sino también una búsqueda implacable por mantenerse económicos. Y hoy, y siempre, eso es ❤️❤️.
Imperdonable falta en esta lista, uno de los mejores sanguches que comí en todo 2022 (y en mi vida), el de ojo de bife de Carmen, en Boedo. Es cosa de mandinga lo rico que es!
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