¿Cómo crear un entorno para evitar o minimizar los conflictos entre gatos que comparten hogar?
Crea microambientes seguros y confortables para cada gato. ¿Cómo? Así 👇🧵
Aunque podríamos catalogar a los gatos como dominantes y subordinados por su capacidad de controlar el acceso a los recursos, no son frecuentes las agresiones abiertas por ellos y no existe una jerarquía clara. Los gatos tienden a evitar los conflictos evitando a los otros.
Por eso es importante que cada gato tenga un refugio seguro y confortable donde poder huir del resto, como una habitación a parte o espacios cerrados como un transportín o una caseta donde el gato se sienta a salvo del resto de habitantes de la casa.
También es importante colocar los cuencos de comida y agua en zonas separadas tranquilas, permitiendo a los gatos evitarse y estar a salvo de asaltos inesperados mientras comen. Esto también nos ayudará a controlar cuánto come cada gato.
Del mismo modo, se recomienda tener una caja de arena por gato, más una caja adicional fuera de la vista de las demás que permita a cada gato realizar el repertorio de comportamientos asociados a la eliminación con tranquilidad.
Debemos dejar que sean los gatos quienes determinen el tiempo y la duración del contacto entre ellos y facilitar espacios a los que puedan retirarse cuando no deseen pasar tiempo con otros (gatos o humanos)
Los gatos con mayor grado de parentesco tienden a tener mejores relaciones afiliativas y a compartir todo. Sin embargo, estas alternativas para poder evitar a lo demás siguen siendo recomendables porque no todos los días te levantas del mismo humor.
Es particularmente importante cuando se trata de un adulto y uno o varios cachorros (aunque sea su progenitor), ya que los cachorros quieren jugar todo el tiempo y se pueden poner muy pesados con los adultos.
En estos casos podemos disponer de espacios a diferentes alturas donde los gatitos no puedan llegar o un espacio aparte donde el adulto pueda descansar un poco de los pequeños.
Dos gatos que no tengan buena relación entre ellos pueden pelearse con frecuencia de forma abierta o pueden tener un conflicto silencioso. Los conflictos abiertos son fáciles de identificar, aunque a veces se puede confundir el juego con agresión:
Sin embargo, los conflictos silenciosos son más complicados de identificar. Si un gato deja de pasar tiempo en la misma habitación que otro y solo se acerca al resto de miembros de la familia si no está el otro gato, puede haber un conflicto silencioso
Esta situación puede estar generando altos niveles de estrés a uno o ambos gatos implicados aunque no se estén dando situaciones de conflicto abierto. Se recomienda contactar con un profesional para trabajar sobre este aspecto.
Os dejo por aquí unos papers al respecto como viene siendo costumbre:
¿Tu gato lleva la cola levantada cuando se acerca a ti?
Pues detrás de este comportamiento hay mucho más de lo que te piensas. Te cuento:
La mayoría de los félidos no forman grupos sociales y no se han encontrado evidencias de que el ancestro del gato Felis silvestris lybica formara grupos. Así que se piensa que la capacidad de formación de grupos de los gatos domésticos es resultado de la domesticación.
Sin embargo, si comparamos varias especies con distinto grado de parentesco con el gato doméstico, vemos que realizan la mayoría de los comportamientos sociales que sabemos que tienen los gatos, EXCEPTO... la señal de la "cola arriba".
Hoy para el #DesgranHilos2 hablamos sobre los ESPACIOS IMAGINARIOS DE LOS GATOS.
Resulta que si dibujas un cuadrado en el suelo lo más probable es que tu gato se meta dentro. ¿Y esto por qué? Te cuento en este 🧵:
En un estudio llevado a cabo durante la pandemia de COVID-19, los investigadores llevaron a cabo un experimento en el que pidieron a dueños de gatos que imprimieran y colocaran diferentes figuras en el suelo para observar la reacción de sus mascotas.
Entre estas figuras se incluía una ilusión óptica conocida como el «cuadrado de Kanizsa», una imagen compuesta por cuatro figuras en forma de «Pac-Man» que, al estar dispuestas de cierta manera, crean la impresión visual de un cuadrado inexistente.
En las interacciones entre perros y gatos existe una tendencia de los perros a mostrar más comportamientos afiliativos, es decir, de llevarse bien, como lamer al gato o buscar contacto físico, mientras que los gatos tienden a mantener su independencia.
Sin embargo, con el tiempo, en la mayoría de estas relaciones se acaban desarrollando rutinas compartidas específicas como descansar juntos, a veces en contacto físico, jugar juntos, crean saludos al regresar a casa, se acicalan mutuamente e incluso pueden compartir el alimento.
Según los estudios, la agresividad no depende de la raza ni del tamaño. Sin embargo, nuestra percepción es que los perros pequeños son más agresivos que los grandes.
A los gatos no les gusta que cambies sus cosas de sitio ni que las limpies con frecuencia y tiene que ver con sus costumbre de restregar la cara por todas partes. Te cuento:
Cuando el gato restriega su mentón por objetos o individuos, deja sobre ellos unas secreciones de sus glándulas submandibulares que llevan feromonas faciales. Se han identificado 5 tipos aunque aún se se conoce la función de todas ellas.
La feromona F3 la usan los gatos para "etiquetar lo suyo", es decir, la depositan sobre objetos y áreas que usan habitualmente para orientarse espacialmente.
Los gatos nos escuchan y aprenden a asociar algunas de las palabras que decimos con su significado. Por ejemplo, se aprenden su nombre, el de otros animales de la casa o el de las personas con las que conviven. También asocian palabras con comida, juego, etc.
Tu gato no solo está atento a lo que dices, sino que también está pendiente de tus emociones y se ve afectado por ellas. Los gatos interpretan nuestro lenguaje corporal, nuestras expresiones faciales y nuestro tono de voz para reconocer nuestras emociones. mdpi.com/2076-2615/10/7…