Thread by @karinacastelao

Aquí va un video que si a alguien no le provoca #peaktrans es que no es humano.
Sobre Jazz Jennings ya había hablado antes, creo.
Esta persona tan joven y carne de depresión, nació niño pero a los 4 años se puso un bañador de su hermana y sus padres la "convirtieron" en trans.

Fue la persona más joven en ser declarada transgénero en EEUU y a la corta edad de 11 años ya comenzó con los bloqueadores de la pubertad.
Luego vinieron entrevistas, libros, una muñeca, campañas de publicidad y un programa de televisión donde cuenta su vida.
Y empezó el negocio.

El "reality show", donde sale toda su familia como si fueran las Kardashian, les ha proporcionado a todos ellos popularidad y pingües beneficios en sus casi 10 años de emisión.

Pero, como resulta que todo está grabado, lo que se supone que es un programa que sirve para...

dar visibilidad a la realidad trans, se ha convertido paradójicamente en un documental sobre los horrores de las cirugías y tratamientos experimentales de resignación de sexo, y sobre la realidad psicológica de las personas que padecen disforia de género, en este caso, inducida.

Cuando las feministas decimos que la infancia trans son los padres, nos referimos a casos como éste. Cuando decimos que los padres que inducen (porque lo hacen) a las niños y niñas de 3 o 4 años a autodefinirse como trans, tienen una perversa forma de Munchaussen por poderes...

es porque la "realidad de la infancia trans" no es más que una forma de enfermar de por vida a niños y niñas sanos.
Hay ya varios estudios que demuestran que esas tan temidas ideaciones suicidas de las personas transexuales, no ocurren antes de la transición médico quirúrgica...

(en contra de lo que quieren hacer creer a los padres reticentes las asociaciones transgeneristas y activistas trans) sino que ocurren después de la misma al ver su vida y su salud destrozada y su cuerpo como una carcel donde estar condenados al sufrimiento para toda la vida.

Ahora se ha traducido al español un cuento para niños sobre su desgraciada existencia, romantizando todo el sufrimiento que lleva padeciendo desde que su familia se dio cuenta de que destrozar el cuerpo y la vida de Jazz Jennings era tener la gallina de los huevos de oro.