¿Qué haces si eres un #TikToker con ínfulas de influencer que entrevista a niños (¿consentimiento de sus tutores legales para publicar su imagen?) y te encuentras con masculinidades tóxicas?
⚠️Las ríes
⚠️Las aplaudes
⚠️Te lucras
⚠️Las promocionas entre la chavalada que te sigue
“Una de mis gatitas” asegura este pequeñín, que no vio el gol de Iniesta.
¿Reacción del influencer?
Pedirle que la exponga ante su cámara (para que todo el mundo vea a quien señala como miembro de su harem) y conseguir minutos de morbo mientras continúa riendo estas actitudes.
Pero cuando publico sobre un procedimiento correcto en prot de datos o alerto en ciberprot, el hilo se me llena de haters llamándome exagerado, asustaviejas, vendecuentos… y al tiempo publica lo mismo la @AEPD_es o la @policia pduchement.org/2023/04/12/asp…
…reconozco que me dan muchas ganas de preguntar a esos negacionistas “¿y ahora qué?”.
El “esto es mentira” cuando algo no te gusta es muy fácil.
“Profesor Duchement, ¿eso es importante? Sé que quema como divulgador ñ, ¿pero qué más da?”.
Da que muchas personas, que no quieren asumir una realidad desagradable, leen esas respuestas y desestiman una alerta o un consejo que puede salvar a a su peque de ser expuest@.
Querido profe, queridos Equipos Directivos, queridas AMPAS y queridos centros:
Son fechas de "vamos a hacer un vídeo con fotos de los niños para proyectarlo durante la orla/dárselo de recuerdo a las familias/crear una sorpresa entrañable".
Genial.
Os regalo un recurso útil:
"Recordamos a las familias que las siguientes imágenes son exclusivamente para su disfrute personal.
La difusión de este contenido en RRSS (incluida WhatsApp) no está consentida, de manera que hacerlo incumpliría el Art. 7 de la LOPDGDD".
No estáis obligados a incluir este texto al principio del vídeo, pero solo con ese pequeño gesto estaréis:
1⃣ Educando a las familias desconsideradas
2⃣ Avisando a las familias despistadas
3⃣ Promoviendo la cultura de la protección de datos
4⃣ Protegiendo a vuestros alumnos
Una vez un colegio me pidió que impartiera charlas de 1 hora sobre acoso y ciberacoso escolar CLASE POR CLASE.
Fue súper útil y constructivo, pero acabé muy quemado: más de 19 charlas. Había varias líneas de cada curso de la ESO, CFGM, FPB e incluso un Aula Enclave.
Al acabar una, cuando todos los niños se marchaban, muchos se acercaron a contarme historias.
Una chica se rezagó al fondo, esperando a que todos los demás acabasen.
No era la primera vez: Quienes se reconocen como víctimas y se ven comprendidas, se quedan para pedir ayuda.
Ya sabía lo que iba a pasar, así que despaché a los niños rápidos y esperé paciente.
En el aula, solo quedábamos su tutora y yo cuando hizo acopio de valor para acercarse.
“Sé lo que me vas a decir. No tengas vergüenza: no voy a ningunear tu dolor. Yo también estuve a ese lado”
No, esto no es un derecho en absoluto.
El derecho, es el que tienen los menores a que sus tutores legales los protejan de ser expuestos en RRSS.
El uso de RRSS profesorado/alumnado está totalmente contraindicado por la @AEPD_es, el Observatorio Europeo y las Consejerías de Ed.
Cuando alguien de mi gremio suelta que es un DERECHO interactuar con su alumnado por RRSS, que no se le puede reprochar, que ese salvoconducto incluye prácticas inadecuadas del alumnado o incluso el “cibercoqueteo”, yo pregunto a quienes se está dando el privilegio de dar clases.
Da miedo este nivel de ignorancia autoreferencial, como si no fuera de dominio público lo tóxica que es la social media para los menores.
Como si ya hubiera pocas fuentes de influencia que empujan a los niños hacia ellas, como para que sus profes también lo hagan.
“No he invitado a tu hijo al 5º cumpleaños del mío porque no quieres que su imagen salga en RRSS”.
Cuando una mamá te responda esto, en realidad te estará diciendo…
“No he invitado a tu hijo al 5º cumpleaños del mío porque, para mí (no para el cumpleañeros, que ni siquiera se enteraría), es más importante poder posturear en RRSS (exponiendo públicamente su carita) que la felicidad de que comparta su día especial con todos sus amiguitos”.