Por falta de datos históricos importantes, es difícil mostrarnos el camino correcto hacia el comienzo de una civilización en la que la tradición ha llevado en muchos casos a los historiadores antiguos a inventar sucesos con tal de engrandecer y poner en común a dioses y mortales. 
Los griegos y los latinos identificaban el origen de su civilización con la fundación de su ciudad. Se diferenciaban de esta manera de los bárbaros, quienes eran tomados como incapaces de recordar sus orígenes.
La tradición literaria del origen (o los orígenes) de Roma se puede leer en Tito Livio y Dionisio de Halicarnaso, y podemos distinguir dos partes: las leyendas del pasado mítico de Roma, y la tradición histórica de los reyes de Roma. Hoy nos ocuparemos de la primera.
Es hora de viajar a la Italia del siglo VIII a. C. En el centro de la bota habitaban pastores y campesinos repartidos en aldeas. Al norte tenían los etruscos, y al sur los griegos que habían colonizado la llamada Magna Grecia.
El punto de inflexión tiene lugar con la llegada del héroe Eneas, que sobrevivió a la Guerra de Troya y desposó a la hija del rey del Lacio, llamada Lavinia. El rey latino además le ofreció terrenos a Eneas, donde fundó la ciudad de Lavinium.
Tras la muerte de Eneas, su hijo Cayo Ascanio fundó otra ciudad: Alba Longa, que pasó a ser capital del Lacio, gobernado por sus descendientes.
Contar con orígenes griegos era sinónimo de nobleza en la antigüedad, por lo que los romanos aceptaron sin ninguna dificultad un vínculo entre Eneas y el origen de Roma.
En un principio se tomó a Eneas y Rómulo como abuelo y nieto. Pero durante la segunda mitad del siglo III a.C. se fijó la caída de Troya en el año 1184 a.C., eso dejaba mucha diferencia de tiempo entre abuelo y nieto, así que se inventaron la dinastía albana en medio y arreglao.
El último descendiente de Ascanio se llamaba Amulio. Este quitó de en medio a su hermano Numitor, el rey del Lacio en ese momento, y Amulio se hizo con el trono.
Amulio, para evitar que lo destronasen a él, desterró a Numitor y obligó a su sobrina Rea Silvia (su último familiar) a convertirse en virgen vestal. Así no nacería ningún descendiente.
Já, pobre Amulio, no contó con los caprichosos dioses. Marte, el dios de la guerra (no podía ser otro), dejó embarazada a Rea Silvia, que dio a luz a los famosos gemelos: Rómulo y Remo.
Ya fuese porque Amulio quisiera matar a los gemelos, o porque Silvia los quiso proteger de Amulio, la cuestión es que Rómulo y Remo acabaron abandonados en el río Tiber. Sí, os sonará también de Moisés y Sargón de Acad, se llevaba mucho esto en la Antigüedad.
Los gemelos sobrevivieron y fueron rescatados y amamantados por una loba. Eso sí, "loba" en la antigua Roma hacía también referencia a las mujeres que prestaban ciertos servicios a cambio de dinero, ya me entendéis.
Así que hay quien piensa que la "loba" podría ser una prostituta llamada Acca Laurencia, casada con el pastor Fáustulo, quienes se encargaron de criar a Rómulo y Remo.
Los gemelos crecieron y se enteraron de su pasado. Así que volvieron a su ciudad natal (Alba Longa) y dieron muerte al que los creía muerto: Amulio, deponiendo en el trono al hermano de su verdadera madre y anteriormente gobernador, su abuelo Numitor.
Al parecer, también se llevaba mucho eso de entregar tierras para fundar ciudades, así que Numitor hizo lo propio con los gemelos. Pero estos no se ponían de acuerdo con el lugar donde fundar la nueva ciudad.
Remo era partidario del monte Aventino y Rómulo quería iniciar la
"civitas" sobre el Palatino. Ambos se tumbaron en sus respectivas elevaciones a esperar una señal divina que dictara el monte que serviría de base romana.
"civitas" sobre el Palatino. Ambos se tumbaron en sus respectivas elevaciones a esperar una señal divina que dictara el monte que serviría de base romana.
Remo vio sobrevolar su monte a seis buitres, o águilas, o... seis pájaros, vaya. Pero Rómulo vio doce. Ganó de goleada. Rómulo comenzó a cavar el "pomerium" que fijaría los límites sagrados de la ciudad que se disponía a fundar, prometiendo dar muerte a quien osara traspasarlo.
Remo, cegado por su rabia y en señal de burla, cruzó el simple arado cavado por su hermano.
- ¿A sí? Pos te reviento payaso.
Le dijo Rómulo a Remo (mas o menos).
- ¿A sí? Pos te reviento payaso.
Le dijo Rómulo a Remo (mas o menos).
Remo realizó su última acción tras caer asesinado a manos de su propio hermano, argumentando Rómulo que todos debían respetar las normas que impedían violar las cosas marcadas por la divinidad.
Así, el 21 de abril del año 753 a.C. sería el señalado como el "dies natalis urbis Romae". Había nacido Roma, descendiente de dioses y héroes, pero bajo la sombra del fratricidio. Quizás no haya mejor explicación para la historia de este imperio. Hasta aquí este #Hilostoria.
• • •
Missing some Tweet in this thread? You can try to
force a refresh
