El Acuario de Veracruz surge de una idea ciudadana de un grupo de empresarios quienes de la mano del gobierno estatal hicieron de esa idea una realidad; el gobierno donó el terreno, se construyó con recursos públicos y se creó el Fideicomiso Público para su administración. El gobierno entregó a la AC la administración, reconociendo así que no podía encargarse, que Acuario era autofinanciable y también lo hizo para evitar precisamente que no se hiciera mal uso de los recursos.