Los que se callaron durante los más de veinte años que llevaron a Independiente a esta situación pretenden ahora dar clases de periodismo. Se suben a la colecta para lavar culpas. Lo que quieren es que se olvide que ellos estuvieron en silencio, creen que salen impunes.

https://twitter.com/BeteTisinovich/status/1653562187359703042

Se dedicaron a aplaudir a dirigentes (desde Comparada a Moyano) en sus columnas del diario deportivo. El archivo está ahí. Iban a las cenas, recibían camisetas y vaya a saber qué más. Ahora se quieren camuflar en el tren de los hinchas. Y encima quieren enseñar periodismo.

Ernesto Rodríguez nos anticipó esto que pasa con el atletismo en 2017. Publicó en su web Olímpicos Argentinos un artículo con el título “La muerte del ENARD”. No sólo no tenemos a Ernesto sino que su web ya no está, pero en el link está el título:
olimpicosargentinos.com.ar/2017/11/16/la-… En 2009, se creó el Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo. Autárquico, se financiaba con una alícuota del 1% de la telefonía celular. El ENARD es administrado por la Secretaría de Deportes y el Comité Olímpico Argentino, que se alternan cada dos años en la presidencia.

Qué gran diario es @tiempoarg, quizá poco valorado por estar fuera de cierta intensidad. Tiene agenda propia, grandes textos, buenas crónicas, mucha profundidad en las notas. Cada domingo es mejor. Le da voz a las trabajadoras de prensa como ningún otro medio de tirada masiva. Columna de @CarlaGaudensi
tiempoar.com.ar/nota/las-traba…

En diferentes escenas de The Last Dance se ve a Michael Jordan fumando tabaco. En el vestuario, en una habitación de hotel, mientras juega al golf. Por la etiqueta, fuma Cohiba. Por el tamaño, son Espléndidos. Eran los cigarros preferidos de Fidel. Me resultó curioso que Jordan fumara Cohiba, una marca cubana, cuando el bloqueo de Estados Unidos a la isla no permitía el comercio entre ambos. Me puse a buscar y lo que encontré es que detrás de esa historia está la guerra del tabaco. O la guerra del Cohiba.

Dashi, el restó de comida japonesa premium del que Rodolfo D’Onofrio es socio, hoy abre sus puertas con normalidad. Se ve que trabajadores gastronómicos a los que les desfilan decenas de clientes corren menos riesgo de contagio que veintidós jugadores en una cancha vacía. Y está bien que esté abierto Dashi como otros restoranes porque no hay indicación de especialistas de que se deben cerrar locales de comida. Lo que sí muestra son los privilegios que existen en una sociedad. Los futbolistas no deberían estar por encima de nadie, pero lo están.

Ningún club de fútbol tuvo tanta influencia de un partido político como ocurrió con Boca y el PRO durante los últimos 24 años. En rigor, el PRO se formó diez años después del ingreso de Macri a Boca, en 1995. El club fue la base de su lanzamiento político, fue su laboratorio. El triunfo de Jorge Amor Ameal pone fin a una hegemonía. Es cierto que él fue dirigente de ese oficialismo, como otros, pero no era de los puros. No hay que confundir haber sido parte de la dirigencia -las dirigencias siempre son heterogéneas- con ser del aparato PRO de Boca.