El diablo en navidad tenía nombre; apellidos, usaba pantalones, ropajes para el frío. El noventa por ciento de las ocasiones era un tipo sin dinero, ni aspiraciones el día 25 de Diciembre.
Daba una inmensa culpa ser pobre en navidad, con el paso de los años fui desmadejando este sentimiento.
Celebrar es consumir y regalar; si no puedes, seguramente debes recapacitar y pensar porque eres un sujeto que llega a fin de año con las manos vacías.
Nov 26, 2018 • 8 tweets • 3 min read
(Prosa en hilo)
"Mis motivos para seguir"
La vida había asfixiado a todos recuerdo bien:
A Dostoievski mirando al cielo buscando a Jesús antes de ir al cadalso; nunca imaginó recurrir a su Dios que negó más de tres veces, ni que su vida iba a ser perdonada de último momento.
Si mal no recuerdo la vida asfixió también a Bukowski; escribió que la muerte se escondía debajo de su cama, y con cada resaca; ella se ponía más intratable.