Lo hizo de nuevo, Vizcarra ha replicado por donde menos se esperaba, otra vez. Digamos que si archivar las elecciones anticipadas fue un jaque de la parlanchina torre Bartra, detener la elección de los jueces del TC, sería un alfil que cambia el ángulo y explora un nuevo flanco.
Se ha visto en los movimientos que hace este jugador una falta de plan B. Es todo lo contrario, Vizcarra es el plan B más logrado e interesante en el país de los planes A impracticables. Él mismo es el presidente B, sin partido, ni votos en el Congreso