Perú impuso confinamiento con una peculiaridad muy llamativa: los hombres y mujeres solo podían salir a la calle en días alternos, nunca juntos. Los domingos no salía nadie. Esta medida no duró mucho por un grave problema que las autoridades no anticiparon. ¿Imagináis cuál?
Pues que los días en los que los hombres podían salir a la calle los supermercados estaban casi vacíos y los días en los que las mujeres podían salir estos estaban abarrotados. Tras poco más de una semana, tuvieron que cancelar su "brillante idea":
efe.com/efe/america/so…
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Tan malo es diseñar un plan epidemiológico sin tener en cuenta las características de un virus, como diseñarlo sin tener en cuenta las características sociales de una población, incluyendo el machismo presente en esta.
Y, además del machismo, esta medida incrementó los casos de transfobia. Militares y policías que no toleraban la identidad de género sancionaron o obligaron a personas trans a quedarse en casa según lo que decía el DNI.
Sí que hubo un día "de hombres" en el que los supermercados se llenaron: un miércoles, pero fue porque el jueves y viernes santo no podía salir nadie. Parece que la visión de una despensa vacía motiva a "ayudar"* a los hombres.
*Sarcasmo implícito.
*Sarcasmo implícito.
