Se va conformando un relato entorno a los rebrotes del COVID 19 en España sumamente interesante.
Si escucháis los medios queda claro que la culpa de los mismos sería de una combinación de botellones y temporeros extranjeros.
Quien tiene un martillo, sólo ve clavos.
Si escucháis los medios queda claro que la culpa de los mismos sería de una combinación de botellones y temporeros extranjeros.
Quien tiene un martillo, sólo ve clavos.
Las terrazas masificadas, y nos hablan de rebrotes por los botellones.
Los aeropuertos abiertos al turismo internacional desde zonas en rojo por el COVID 19 y nos hablan de trabajadores pobres.
Siempre los débiles y los pobres en la diana.
Los aeropuertos abiertos al turismo internacional desde zonas en rojo por el COVID 19 y nos hablan de trabajadores pobres.
Siempre los débiles y los pobres en la diana.
Lo de las terrazas es de una hipocresía insoportable. Nos hablaban de separación entre mesas y luego veías mesas de cuatro plazas ocupadas por hasta 10 personas sentadas alrededor, cada una venida de su casa.
Si consumes no te contagias.
Si consumes no te contagias.
Vas andando por la calle y es obligatorio llevar mascarilla, pero si te sientas en la terraza y consumes, puedes estar durante el tiempo que quieras en la vía pública sin mascarilla.
Si consumes no te contagias.
Si consumes no te contagias.
En nuestra sociedad el dinero te permite eludir el cumplimiento de la ley. No es sorprendente, ya lo sabíamos. Los empresarios del IBEX 35 lo saben bien.
Si consumes, no te contagias.
Si tienes mucho dinero, no se te aplica la ley.
Si consumes, no te contagias.
Si tienes mucho dinero, no se te aplica la ley.
Y por supuesto, como desde el principio de esta crisis sanitaria, seguimos escuchando día tras día los discursos de diferentes colectivos empresariales exigiendo que el gobierno les indemnice por haber detenido la actividad económica para salvar vidas.
La lógica de la "reparación económica" a los colectivos y empresas por la situación de emergencia sanitaria es perversa, y lleva a un debate y quejas interminable. Pero es del todo necesaria para preservar la estructura social en España.
¿Qué sentido tiene todo este rosario de autónomos, vendedores ambulantes, feriantes y similares diciendo que están en la ruina por el COVID 19 y exigiendo indemnizaciones? Da pereza y sonrojo escucharles pasar el sombrero.
Toda esta situación límite de esas personas habría tenido una sencilla solución mediante una actuación económica radical por parte del gobierno durante la crisis sanitaria. A saber: decretar una suspensión de pagos general.
Pero eso implicaría suspender el capitalismo.
Pero eso implicaría suspender el capitalismo.
Al cortar el grifo de los rentistas durante la crisis sanitaria, el Estado se vería obligado a un programa de Ingreso Minimo Vital mucho más amplio que el actual, y a algún tipo de racionamiento. Igualarnos a todos como ciudadanos.
Peligroso.
Peligroso.
En la situación generada por el COVID 19 se ha puesto en duda la obligatoriedad del trabajo para acceder a un mínimo de bienestar. Sin embargo no se ha dado pie a ninguna duda sobre la legitimidad de vivir de las rentas de la propiedad aún a costa de un malestar mayoritario.
Ninguna persona o empresa puede recibir una reparación por parte de la sociedad por preservar la vida de las personas.
Al contrario, toda persona o empresa tiene derecho a no caer en la ruina por preservar la vida de las personas.
Suspensión de pagos, quita de deudas.
Al contrario, toda persona o empresa tiene derecho a no caer en la ruina por preservar la vida de las personas.
Suspensión de pagos, quita de deudas.
"Necesitamos turistas, pero no queremos rebrotes".
Equivale a:
"Necesitamos consumidores, pero no queremos ciudadanos"
Equivale a:
"Necesitamos consumidores, pero no queremos ciudadanos"
