5 de julio de 1520. #TalDíaComoHoy Amanece en #Madrid después de unas horas intensas. El estallido de la pasado noche ha sido el primer episodio violento de la Revolución comunera en la ciudad. Os lo contamos en este hilo: 🔽🔽🔽 
La noche del 4 de julio, dos individuos recorren las calles de la villa al grito de "¡Traición, traición! ¡Esta noche seremos degollados!". Se trata de los artesanos Francisco Marqués y Juan Cachorro, que alertan de la llegada del alcalde Herrera junto a decenas de soldados.
Poco a poco, las calles se van llenando de gente que sale de las casas acudiendo a la llamada. Al grito de "¡Viva Padilla!" se van juntando en manifestación. En paralelo, esta semana Juan de Padilla está siendo nombrado en #Toledo Capitán General del Ejército comunero.
Entre gritos y en medio de esta cálida noche, la multitud se congrega a las puertas del Palacio de los Vargas, en la Plaza de la Paja.
La familia Vargas es una de las principales entre la oligarquía madrileña y mantiene estrechos vínculos con el Emperador. Además, en ese palacio se guardan algunas armas recientemente adquiridas por la villa: es lo que va buscando el pueblo para defenderse.
Se asalta el palacio y se reparten las armas entre los vecinos. Esas armas servirán para formar la primera milicia popular comunera de #Madrid, que patrullará las calles de la villa y más adelante saldrá en apoyo a otras ciudades castellanas integrándose en el Ejército comunero.
No sabemos si realmente fue un rumor que el alcalde Herrera llegase con tropas esa noche a la ciudad, pero en todo caso el pueblo de #Madrid era consciente de que tenían que defender la Comunidad. Volvamos unos meses atrás para entender cómo hemos llegado hasta aquí:
No sabemos mucho de lo que pasó esos meses, pero se sabía que los ánimos estaban caldeados. Adriaan de Utrech envía el 17 de junio una carta al concejo madrileño prohibiendo los festejos de San Juan para evitar posibles altercados
El regente no andaba desencaminado. Entre ambas cartas, el día 18, ya se había producido una ruptura con la monarquía, cuando es destituido el corregidor Astudillo colocado por Adriaan en el cargo, y sustituido temporalemte por Juan Zapata.
Las reuniones del concejo tenían lugar en la Iglesia de San Salvador (Pza de la Villa), y las de los barrios en el resto de parroquias. Ante esa Iglesia acudió la multitud para expulsar a Astudillo por su postura tibia, pues se negaba a mantener contacto con el #Toledo comunero
Por lo tanto, podemos decir que desde finales de junio, en #Madrid se ha conformado ya una Comunidad; un ayuntamiento popular que junto a la milicia armada que surge ahora se conforma ya ‘de facto’ como un poder popular alternativo al del Consejo real.
Este ayuntamiento subvierte toda la legalidad anterior. Entre otras cosas, los oficiales serán nombrados por el pueblo y no por el rey, se eliminan los cargos vitalicios, os representantes de las parroquias (barrios) vuelven a tener presencia.
Los estamentos no privilegiados (pecheros) ver reforzada su participación en la vida política de la Villa y Tierra. Eso se nota en acciones como que el ayuntamiento repartiera 900 fanegas de trigo entre los sectores más desfavorecidos de la población.
A pesar de ello, la oligarquía sigue teniendo cierta presencia. El día 21 habían conseguido pactar con la Comunidad que se respetase el Alcázar, mientras desde allí no se hostigase a la población ni se reforzase con nuevas tropas reales.
Algunos caballeros están intentando construir una suerte de "quinta columna" para acabar con la comunidad. De hecho, en esas fechas muchos miembros de la oligarquía están abandonando la ciudad, algunos para unirse al bando realista. Sus bienes son saqueados en su ausencia.
También se confiscarán varios impuestos recaudados para la monarquía tanto de la población como de las órdenes de Santiago, Calatrava y Alcántara y se destinarán a sufragar los gastos del ejército comunero.
El alcaide del Alcázar, Francisco Vargas había huido de la ciudad, quedando su mujer María Lago al frente de la defensa del mismo. Una figura femenina en el bando realista, no tan heroica, pero curiosamente contrapuesta a la de la comunera María Pacheco.
El Alcázar de Madrid estaba situado donde se encuentra actualmente el Palacio Real. Fue demolido por Felipe V tras el incendio de 1734, nunca se sabrá si intencionado o no, pero sabemos que a los 'Bourbon' no les gustaba el estilo tosco de la arquitectura castellana.
La ciudad inició el asedio aislando a la guarnición y cortando las vías de aprovisionamiento de víveres y armas. #Toledo, por su parte, colaboró enviando al regidor Gonzalo Gaitán al frente de quinientos hombres y treinta lanzas. La fortaleza resistirá hasta el 31 de agosto.
Para acabar con el hilo os contamos una anécdota que nos va a servir de ejemplo para enlazar con futuros hilos sobre la rebelión campesina antiseñorial y la ruptura de la alta nobleza con el movimiento comunero.
En pleno asedio del Alcázar, algunos comuneros solicitan al señor de #Torrejón de Velasco, Juan Arias Dávila, que acuda a ayudarles. Él hace lo contrario, recluta hombres para combatir a los comuneros, primero sometiendo a los de #Alcobendas y luego lanzándose contra #Madrid.
