Pero si las pones en modo mosaico, sí está muy culero el panorama.
Lo que provocó ese nefasto 1994 fue una ruptura irreconciliable entre grupos.
Ya se asoman los cuernos que anuncian una pérdida de control, una carencia de salvaguardas, UNA AUSENCIA.
Ahora no hay dos grandes grupos, sino una docena de grupos, todos dinos, sin tensor entre ellos.
Muy mala cosa.
A lo que entiendo, el experimento de la mojiganga fundió a la institución presidencial: su renuencia terminó en ausencia.
Y así NO LES SIRVE.
No se si lo jubilen ya o no, pero van a tener que elegir con quién quieren llegar a diciembre: con López o con sistema. Los dos no se puede.
Renuencia -> Ausencia -> Suplencia
Los que están a cargo, esos que no logran comprar unas pipas, ahora tienen que administrar ese delicadísimo proceso. No van a poder.
Las están tomando ahora otros, de hecho.
Y en esa toma del poder formal por poderes metalegales, con la elección tan lejos, va a haber costos altísimos.
La restauración sólo provocó caos, salió DEL NABO y ahora se busca otra cosa.
Esa otra cosa se está gestando en este momento, y no veo a suficientes mexicanos de a pie participando de ello.
Es una de esas, ni como votantes.
Ese lugar nuevo al que ya vamos puede no requerir legitimidad electoral... ya lo consideraron?
Esto que se está gestando nos necesita como ciudadanos, no como cruzaboletas.
O participamos, o nos marginamos. Y esto último implica someterse. No lo hagan.