Por eso, luego de exprimir al partido en el que se volvió relevante a nivel nacional, se marchó para esquirolearlo, drenarle clientela y fundar su propio partido.
No hablo de López: hablo de Calderón.
Son exactamente la misma mierda restauradora: creen que el fin justifica los medios, se creen predestinados, se conciben por encima de las instituciones, y antes que votantes convocan feligreses.
Los demás, como con López, son accesorios. Incluida la esposa.
Por eso sus clientelas se parecen TANTO: porque los convocantes son indistinguibles, en cuanto a su forma de concebir el poder, su acceso y su fin.
No va a estar fácil.
Disfruten a sus caudillos: si les basta con el triunfo de ellos, serán felices.
Y el día de la elección, posss...