Thread by @elifeinzaig

Uno esperaría que un Diálogo Nacional convocado por los presidentes de dos poderes republicanos -Ejecutivo y Legislativo- fuese en alguna medida representativo de la composición de la sociedad costarricense.

¿Lo logra la propuesta del gobierno? Veamos algunas cifras. Hilo 👇

1. En CR hay 306 sindicatos activos (MTSS, 2018) con 308.282 afiliados. También hay 161.996 empresas (Observatorio de Mipymes de la UNED y Estado de la Nación, 2015) que emplean al 85% de la fuerza laboral (aprox. 2 millones de personas).

Cada sector tendrá 4 representantes.

2. Hay en el país 594 cooperativas, según Infocoop. Tendrán la misma cantidad de representantes (4) que el sector empresarial, que reune a 162.000 empresas.

3. El movimiento solidarista cuenta con 1445 asociaciones y unos 400.000 afiliados (CONASOL). Contará con 2 representantes en la mesa, versus 4 del sector sindical (que tiene 90.000 afiliados menos).

4. Hay más estudiantes en universidades privadas (51%) que en las estatales (49%), según el Estado de la Educación (2017). Sin embargo, el representante estudiantil será designado en exclusiva "por las federaciones estudiantiles de las universidades públicas afiliadas al Conare"

5. Los dos puestos designados para las organizaciones de mujeres serán designados por el INAMU. Es decir, por el gobierno. ¿A quién representarán?

6. No hay un solo representante de las organizaciones de consumidores (5 millones de costarricenses). Típico: las decisiones se tomarán sin considerar a los ciudadanos comunes y corrientes, los que no son representados por la Uccaep ni por los sindicatos, solidaristas o coops.

7. Podemos discutir si los representantes legislativos deben estar en la mesa principal o en un cuarto adjunto. A fin de cuentas, a ellos corresponderá aprobar las leyes necesarias para que se ejecuten los acuerdos del Diálogo Nacional.

8. Podemos cuestionar si los "expertos" deben ser relegados a un panel que revisará los cálculos que harán técnicos del gobierno, o si deben participar de lleno en la discusión de temas tan técnicos como deuda pública, déficit fiscal y crecimiento económico.

9. Pero aun dejando de lado los cuestionamientos de los puntos 7 y 8, queda claro que la mesa de diálogo no es representativa de la composición de la sociedad, y está fuertemente sesgada a favor de los defensores del estatu quo, de los privilegios y de los tratos diferenciados.

10. La propuesta inicial del gobierno estaba fuertemente sesgada al aumento de impuestos (83% del ajuste) y era engañosa en materia de recorte y contención del gasto, donde dos terceras partes de lo prometido eran decisiones tomadas desde antes (regla fiscal).

11. Dicha propuesta inicial del gobierno fue rechazada por TODOS los sectores de la sociedad. Si pretendemos encontrar una solución con un balance más razonable, que ataque y resuelva el problema en su raíz (el crecimiento descontrolado del gasto público), ...sigue

12. ...debemos empezar por cambiar el equilibrio de fuerzas en la mesa de negociación, hacia uno que refleje mejor el balance de fuerzas en la sociedad. No podemos aceptar las falsas equivalencias diseñadas para inclinar la balanza desde antes de la primera sesión de diálogo.

13. De lo contrario, será un diálogo entre convencidos, con apenas unos pocos convidados de piedra que servirán para "validar" la falsa pluralidad de la mesa de negociación, pero que no podrán influir en el resultado del diálogo.

14. #EsTiempoDeValientes. Por el bien de Costa Rica, la sociedad civil debe exigir que se cambie la composición de la mesa de diálogo. No dejemos algo tan importante en manos de los defensores de los privilegios, las prebendas, las gollerías y los mercados cautivos.