Gatell recientemente ha vuelto a hablar sobre las pruebas. Presume con orgullo que hace lo contrario a lo que recomiendan todos los organismos de salud internacionales y a lo que señala la evidencia empírica y la intuición.
Hay una relación directa entre muertes y % positivo🧵
La proporción de pruebas que son positivas es una métrica que nos ayuda a entender si la cantidad de pruebas es apropiada respecto al tamaño del brote. Una baja tasa de positividad implica que se hace una cantidad apropiada de pruebas.
México junto con Bolivia y Omán son los países del mundo con la peor tasa de positividad. México hace muchas menos pruebas que las que se esperarían dado su PIB per cápita. El PIB pcap de México es más del doble que el de Guatemala, sin embargo, Guatemala hace 1.4 veces más.
El PIB per cápita de México es 34% mayor al de Colombia, pero Colombia hace 5 veces más pruebas (400% más). El PIB per cápita de Chile es 31% superior al de México, pero Chile hace 13 veces más pruebas por habitante (1,272% más)
La OMS recomienda un % de positividad inferior al 9%.
Se puede apreciar como países como Italia, Estados Unidos o Chile han logrado disminuir el % a través del aumento en el número de pruebas. También se observa una reducción en la mortalidad por habitante México ni lo intentó
Desde el inicio de la pandemia ha habido amplia evidencia sobre el rol de los contagios por parte de personas asintomáticas o presintomáticas. cebm.net/study/the-role…
Por eso tener una política de pruebas activa ayuda a evitar el contagio comunitario.
Haber hecho suficientes pruebas desde el inicio le permitió a países como Corea del Sur no tener que cerrar su economía y salvar cientos de miles de vidas. Además, representó ahorros en el largo plazo al no tener que elevar tanto el número de pruebas.
El ECDC identifica cinco motivos para realizar pruebas: controlar la transmisión, monitorear la tasa de transmisión, mitigar el impacto para las personas que se dedican al cuidado para la salud, detectar brotes y grupos de contagio específicos.
México es el país que reporta mayor número de muertes entre su personal sanitario en todo el mundo.
Aún suponiendo que no existiera evidencia a favor de la aplicación de pruebas como una medida necesaria para el control de la epidemia, estas no dejan de ser un derecho para las personas.
Las personas tienen derecho a la salud y en este contexto, tienen derecho a tener información certera sobre si tienen una enfermedad que puede ser potencialmente mortal para ellas o para sus allegados.
Quienes tienen suficientes recursos económicos pueden pagar una prueba en un laboratorio privado, alertar oportunamente a sus contactos y tomar medidas preventivas para ellas mismas, salvando vidas en el proceso.
El gobierno le está negando el derecho a la salud a las personas que no tienen los recursos necesarios para hacerse ellos mismos la prueba.
Los países que realizaron suficientes pruebas tuvieron menor impacto económico asociado al confinamiento y restricción de actividades. Invertir lo necesario salvó vidas y ahorró recursos.
Realizar 515,000 pruebas diarias colocaría a México en los niveles de pruebas por habitante que hacen algunos países europeos. Sostener este nivel durante 60 días costaría 11 veces menos que el presupuesto propuesto para inversiones en Pemex en el 2021.
"Depuis les débuts de la Troisième République, il y a en France une liberté de blasphémer qui est attachée à la liberté de conscience. Je suis là pour protéger toutes ces libertés. Je n'ai pas à qualifier le choix de journalistes.
J'ai juste à dire qu'en France on peut critiquer des gouvernants, un président, blasphémer, etc"
Llama la atención que los datos confirmados por Secretaría de Salud van en descenso. Esto se explica porque hay una cantidad insuficiente de pruebas. Es un indicio para poner en duda los dichos de la Secretaría de Salud que hablan de una aparente disminución.
Esta comparación entre México y Reino Unidos ilustra muy bien cómo hacer pocas pruebas crea la ilusión de una disminución en casos y muertes.
Para seguir poniendo en evidencia las mentiras de Hugo Lopez-Gatell vamos a comparar el caso de México con Reino Unido.
Revisando la 'positividad' podemos ver cómo en México cada vez se hacen menos pruebas en relación al tamaño de la pandemia (1/N)
Se puede observar que en Reino Unido los casos y muertes disminuyeron a pesar de que las pruebas aumentaron. Por el contrario, en México van 3 semanas consecutivas con una menor cantidad de pruebas mientras 'positividad' continúa siempre en aumento.
(2/N)
Esto sugiere que la disminución aparente en casos y fallecimientos en México realmente se debe a una disminución de pruebas. La OMS considera que los números están subrepresentados.
Para justificar los devastadores resultados de su mala estrategia, Hugo Lopez Gatell culpa a la obesidad y la diabetes.
Reconocemos que en lo individual son factores de riesgo importantes. Pero NO son relevantes para explicar los diferentes resultados entre países. (1/6)
Los países que lograron detener los contagios con medidas agresivas de pruebas/rastreo de contactos, distanciamiento social y apoyos económicos no tienen un número alto de muertes independientemente de su nivel de obesidad o diabetes.
La estrategia debía ser esa.
(2/6)
Además, México es un país con un porcentaje muy bajo de población mayor de 65 años.
La prevalencia de contagios en México, Latinoamérica y Estados Unidos ha sido más alta que en otros países que sí lograron proteger mejor a su población vulnerable.
También omite que, más que a estimular el consumo inmediato, el gasto del gobierno debía estar orientado a evitar la destrucción permanente de capital y empleo para que la recuperación fuera más rápida.
Argumenta que la contracción esperada para otros países de Latam (2/4)
es similar a la de México aún con sus planes fiscales agresivos. El dato importante no es la caída en 2020 sino la recuperación en 2021 que sería más rápida de evitarse la pérdida permanente de empleos.
Además, considera las restricciones fiscales (3/4)
Según datos de la ECOVID, hay 11.9 millones de personas disponibles para trabajar que están fuera de la fuerza laboral. 7 millones no creen regresar a su trabajo al terminar la contingencia.
Solo el 7.8% de las empresas obtuvo algún tipo de apoyo.
🧵
La mayoría de las empresas considera que una de las políticas más necesarias es el aplazamiento de pagos por servicios, transferencias de efectivo y acceso a créditos.
En UNA DE CADA TRES viviendas al menos un integrante perdió su trabajo por la pandemia. 65% de los hogares vieron disminuidos sus ingresos y 37% tuvieron que vender algún bien o pedir prestado.