Thread by @FabiTaub

Por primera vez desde octubre: La incidencia de coronavirus en 🇩🇪 está por debajo de 100, no obstante, los expertos advierten contra la relajación de las medidas.

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Buenas noticias del Instituto Robert Koch: por primera vez en tres meses, el valor de incidencia de nuevas infecciones en Alemania ha caído por debajo del umbral de 100. Sin embargo, algunos científicos consideran que la relajación rápida de las medidas es fatal.

Alemania ha superado un obstáculo importante en el invierno pandémico: gracias al estricto bloqueo, el número de infecciones se ha reducido a la mitad desde Navidad.

El RKI dió la incidencia de siete días, es decir, el número de nuevas infecciones por cada 100 mil habitantes y semana, como 98 el jueves por la mañana. La última vez que estuvo por debajo de 100 fue el 29 de octubre. El máximo anterior se alcanzó el 22 de diciembre en 198.

El objetivo declarado de los gobiernos federal y estatal hasta ahora ha sido reducir la incidencia de siete días a menos de 50. Si continúa la evolución positiva, teóricamente podría lograrse a mediados o finales de febrero.

Pero los científicos creen que esperar un alivio rápido es una señal incorrecta. 🇩🇪 no debería arriesgar su éxito, aconseja la física Viola Priesemann del Instituto Max Planck de Dinámica y Autoorganización.

Desde su punto de vista, solo habrá más libertad para todos si la incidencia se empuja a 10 o menos, como el verano pasado.

En 2020, se definió una incidencia de 50 como el umbral hasta el cual las casi 400 autoridades sanitarias alemanas pueden mantener la situación bajo control: en otras palabras, encontrar a todas las personas de contacto de las personas infectadas y enviarlas a cuarentena.

Es importante llegar rápidamente al valor 50, "para que entonces podamos hablar de reaperturas", argumenta la canciller Angela Merkel.

No existen mecanismos automáticos: a qué umbrales se van a relajar las medidas de Covid es una cuestión que debe resolverse políticamente.

El experto en salud del SPD, Karl Lauterbach, tuiteó el miércoles por la noche: "Voy a argumentar a favor de continuar el bloqueo", hasta que se alcance una incidencia de 25.

Para investigadores como Viola Priesemann, la incidencia alrededor de 100 es solo un pequeño objetivo intermedio. Ella cree que es necesario reducir más a la mitad la tasa de infección: 50, 25 y finalmente 12,5. medio control en un incendio".

A partir del objetivo anterior 50, su cálculo tomaría otras dos a cuatro semanas antes de que pudiera pensar en un poco más de normalidad.

La investigadora promueve su teoría de que es un camino que vale la pena para todos. Es como un incendio. O está bajo control, o no. "No hay medio control en un incendio".

Ella no está sola en su opinión. El virólogo de Charité Christian Drosten ya advirtió contra un relajamiento excesivo de la situación en los grupos de alto riesgo a pesar de las vacunaciones progresivas.

Otros virólogos también desean un Puffer (espacio) más allá de la marca objetivo 50. Esto también se debe a variantes del virus que son más contagiosas.

“En Alemania vemos una disminución semanal de nuevas infecciones de alrededor del 20 por ciento”, calcula Sebastian Binder, inmunólogo de sistemas del Centro Helmholtz para la Investigación de Infecciones.

"Esto significaría que se alcanzarían 50 nuevas infecciones por cada 100.000 habitantes por semana a mediados de febrero". El instituto está trabajando en simulaciones de la rapidez con que las mutaciones pueden afianzarse y cómo esto puede afectar el proceso de infección.

Todavía no hay resultados cuantitativos. "Pero está bastante claro que la variante británica, si prevalece, requerirá medidas significativamente más estrictas para estabilizar o reducir el número de casos", dice Binder.

Actualmente es muy importante evitar que esta variante se propague tanto como sea posible.
“En general, la experiencia de Gran Bretaña es preocupante”, añade el científico. "Con la reducción actual a mediados de febrero, creo que es arriesgado ...

si se quiere mantener bajo el número de casos". De lo contrario, temía otro bloqueo como resultado. "Por cierto, esto se aplica incluso al tipo de virus conocido, pero tanto más con el riesgo de que se propague la nueva variante".

Pero Binder también ve buenas posibilidades de recuperar el control de la pandemia, a un nivel de infección como el verano pasado y sin restricciones generales severas. “En tal escenario, las respuestas se pueden adaptar localmente si ocurren brotes”, dice.

Todas las demás regiones podrían arreglárselas para mantener su distancia, usar una máscara, higiene y algunas otras restricciones.

“Al ritmo actual, será necesario hasta mediados de abril, incluso sin relajar, hasta que seamos menos de diez casos por semana y 100.000 habitantes”, dice Binder. Entonces es después de Pascua.

Entonces estás casi de vuelta a cero "

"El problema son las personas que ni siquiera saben que son portadoras del virus, y lo llevan accidentalmente a escuelas o hogares de ancianos, a amigos y conocidos", dice el investigador Priesemann.

“Eso sucede cuando el número de casos es alto. Y eso sucede a pesar de las medidas de protección ".

Por tanto, la gestión de la pandemia no debe basarse únicamente en la capacidad hospitalaria. Las capacidades de prueba y vacunación son limitadas.

Todavía no hay respuesta a la pregunta de cuánto dura la inmunidad. Cuanto mayor sea el número de casos, más probable es que las nuevas variantes del virus puedan eludir el sistema inmunológico y las vacunas. "Y luego estás casi de vuelta a cero".

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