Ojalá, querido lector, afrontes esta parte con el ánimo que yo la escribo. Para poner en situación a nuevas incorporaciones copio en hilo de la primera parte. Es fundamental conocer las versiones. Estamos resolviendo un asesinato.
Procedemos. Aquella noche extraña, calurosa seguro (de ánimo y camisa doblada), preelectoral y veraniega; aquel 23 de agosto en vísperas de san Bartolomé, patrón de Cieza y con la feria aplazada, mataron a Pascual Rodríguez.
📷Imagen de #Cieza a comienzos del siglo XX
El Gobernador de Murcia, Alberto Aguilera, que formaba parte del Partido Liberal, envió un telegrama al Gobierno central que El Imparcial reproducía el 25 de agosto. Relataba que había regresado de Cieza “donde queda restablecido el orden”.El suceso ocurrió en la casa del alcalde
Se hallaban dos individuos del partido radical y de pronto “una turba de hombres armados se arrojó sobre los radicales, dejando mal herido al uno, que se ha muerto, y salvando el segundo su vida milagrosamente”. El gobernador aseguraba que los desórdenes siguieron en la calle.
La Época dudaba de que los “amigos” de Cánovas “desarmados y desamparados” hubieran promovido motines. Reiteraba el “hecho inaudito de haberse mandado desarmar las guardias” para dejar las propiedades de los amigos de Cánovas “a la rapacidad del proletariado de aquellos pueblos”
La Época traía el testimonio de una “persona veraz e imparcial”: “Los francos quisieron dar una serenata a un sujeto” del partido radical. Se disparó desde la calle y “después, los francos rompían el fuego desde la plaza contigua a la casa del alcalde”.
Dos personas habían sido heridas, “una de ellas de familia importante de la población, y cuya muerte ha contristado profundamente a amigos y adversarios”. El pueblo aterrado debía enfrentarse a la elección, “que se hará ya en aquel distrito a gusto del gobierno” (La Época)
El 27 de agosto El Imparcial sacaba en portada ‘lo de Cieza’. Relataba el diario que el partido radical trataba de hacer una manifestación en favor de un hijo de José Rodríguez, presidente del comité radical y que acababa de llegar de Madrid.
De ello se había dado conocimiento a la autoridad local. En la casa del alcalde, junto con partidarios de Cánovas del Castillo, reclamaron a José, y Pascual, su hermano, temeroso, fue para evitar que José fuera objeto de “siniestros fines”
Revólver en mano “los que acompañaban al alcalde dispararon” quedando gravemente herido Pascual que falleció a la mañana siguiente. “Declaró antes de morir”. Los reducidos a prisión fueron García, yerno del alcalde, y Aguado, amigo íntimo del anterior juez Barnuevo”(El Imparcial)
Demasiadas noticias. Las referencias son contradictorias. ¿Pascual era el líder de los radicales? ¿Era su hermano? ¿Su hermano se llamaba José o Ángel? ¿Quién mató a Pascual?
La Paz de Murcia (26/09/1872) traía la sesión en Cortes del 24. Se habló de lo de Cieza...
El marqués de Sardoal (📷) contó que uno de los electores fue a verlo y al volver trataron de darle una serenata, cosa que no era del agrado del alcalde de Cieza, quien mandó llamar a José Rodríguez, jefe del partido radical. Este fue a su casa, acompañado de su hermano Pascual.
Encontraron allí reunidos al Ayuntamiento con guardas de montes y funcionarios. “Sonó un: ‘¡Fuego!’, y un tiro de revolver atravesó el cuerpo de Pascual”.
Comienzan a encontrarse las versiones. Alguien de la casa disparó y mató a Pascual.
Ramón María Capdevila amplió lo que sucedió después: “Por indicios”, se procesó y cumplió condena ‘Frasquito, el Rojo’ que “no tomo parte alguna en el hecho que se le imputaba”. Consintió el procesamiento y no protestó de las acusaciones que se le acumularon “por las promesas”
realizadas por “los señores encargados de sacarlo en libertad a costa de lo que fuere y en plano muy corto”. Pero no fue así. “Aguado, Camacho, García, Marín Barnuevo y Fernández, que fueron procesados algún tiempo después” vieron cómo se decretaba el sobreseimiento de sus causas
Y ‘Frasquito, el Rojo’ “sin que persona alguna se acordara de él” cumplió día por día, ocho años de presidio. Durante días, se murmuró por el pueblo mucho sobre la conducta del alcalde, diciéndose “en secreto a voces, que él había pagado la mano que liquidara al Rodríguez”
En entredicho su reputación y con el aumento de las acusaciones en su contra el 1 de septiembre pidió un mes de licencia. Pero siguió la revuelta en el pueblo, y no paró. Fernández Arce renunció a su puesto en noviembre de 1872.
Aunque sea por unos minutos, Pascual Rodríguez ha vuelto, se ha intentado contar su tragedia. Borradas las señales terrenas, que alejada ya del cuerpo siga volando su alma.
La imagen no podía ser otra que Duelo a garrotazos de Goya.
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Le hablo al lector, me tomo la licencia, porque lo que van a descubrir ha ido envolviéndose en mí día a día durante semanas. Tras leer cientos de páginas de periódicos decimonónicos, consultar investigaciones e indagar en la historia de la prensa, sigo sin comprender qué sucedió
Vayamos al origen: un anuncio de un suceso ocurrido en Cieza volaba por los telégrafos, se publicaba en la Región y en el todo el país. Hablaban de un tiroteo. Ya tenemos el qué. El dónde era más enrevesado: la casa del alcalde.
📷 Cieza, comienzos s.XIX de @ArchivoGRMurcia
En vísperas del día grande de Cieza mataron a Pascual Rodríguez. En el incidente se vieron involucrados los hermanos Cánovas del Castillo, el marqués de Sardoal y la alcaldía de la ciudad de Cieza.