Según fuentes militares libanesa que citan varias agencias, hace unos minutos se han disparado tres misiles desde el sur del Líbano hacia Israel.
Paradójicamente la escalada de tensión nivela un poco a las partes en conflicto y puede rebajarlo. Dicho de otra manera, a nadie en la región le interesa una guerra a gran escala; la amenaza de que se convierta en eso es la forma de que Israel no haga lo que quiera con Palestina
Parece que los cohetes lanzados desde el campo de refugiados palestinos de Rashidiye, en el sur del Líbano, son munición antigua de la guerra civil que ni siquiera han llegado a su objetivo. Evidentemente, si se limita a eso Israel no se va a sentir amenazado.
La duda es si Israel va a responder a estos cohetes o lo va a dejar pasar. Aunque la guerra de Siria le haya podido restar cierta popularidad, Hezbolah sale de Siria muchísimo más fuerte desde el punto de vista militar. Precisamente por eso una guerra a gran escala es improbable.
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