Cuando me contaron q el hijo de Federico Salazar sería el nuevo conductor de Cuarto Poder pensé q me bromeaban. Consulté a varios periodistas y resultó q era cierto. El dominical de América TV ha tomado una decisión q no ha caído nadita bien en la interna del canal. Abro hilo. 
Este domingo el hijo de Federico podría dar un salto con garrocha, q ya genera desazón y desconcierto en la plana periodística del canal de Santa Beatriz. El muchacho no tiene mérito alguno para estar al frente del programa periodístico emblema de este canal -o lo q queda de él-.
Y es q la versión junior de Federico nunca ha hecho calle. Lo único q se conoce de él es q fue presentador hace un tiempo en canal N. En su paso tampoco demostró ser LA revelación. Tampoco fue la joven sensación del periodismo.
Pero tenía algo q otros no tienen: vara. Fue así que, sin pedir permiso, se saltó la fila en la q por mérito estaban varios periodistas antes q él ensuciándose los zapatos y construyendo una carrera que no es nada fácil. Sé por qué se los digo.
La designación del muchacho es una de las tantas malas decisiones q vienen tomando en el canal en las últimas semanas. ¿De qué les sirve a la reporteros esforzarse si al final ponen por vara al hijo de un sobón q es servil y funcional a los intereses del canal?
Pero aquí hay otro aspecto, Federico no calcula el daño q le hace a su hijo al exponerlo de esta manera. Lo está quemando y parece no importarle. Era obvio q al conocerse esta decisión iba a venir una andanada de críticas. Y con justa razón. ¡Chasqui presente!
Federico sabe muy bien q su hijo no está capacitado para ser conductor de Cuarto Poder. En realidad, no está capacitado para ser conductor de nada. Le falta todo: calle, experiencia, solvencia, entrevista y hasta gracia.
Con esta decisión, América se consagra en una empresa donde reinan "los hijos de alguien" por encima del mérito. El canal tampoco mide el perjuicio q genera una decisión así para su marca periodística emblema.
Pero más allá de eso, el retorno del retoño de Federico Salazar ha generado anticuerpos. Sucede que cuando estuvo en canal N, canal de propiedad de América TV, sacó roncha a sus compañeros. ¿Cómo así, chasquiciento? Se preguntarán ustedes, siempre taaaaan periodísticos.
Bueno, me cuentan q en el corto tiempo q estuvo como presentador en el canal de noticias de cable, el 'hijo de papá' era soberbio, sobrado y altanero. Esos fueron sus principales méritos. Así me lo han confirmado varias personas.
Me cuentan también q en una ocasión, el jovenzuelo se apareció en una reunión de productores, en representación de su papá. La incomodad fue tal q los productores presentes lo invitaron a retirarse. Sí, amigos, lo botaron con roche de la reu. El chamaco se proyecta como grande.
Hay varios reporteros, redactores y jefes de mesa q no están de acuerdo con esta decisión. Hay otros periodistas q bien podrían estar ahí por mérito. Por ejemplo, en mi opinión debería estar alguien como Karina Borrero, quien renunció en desacuerdo con la línea periodística.
Y bueno, termino este hilo sin mencionar el nombre del muchacho, porque no deja de ser "el hijo de". Aún le falta mucho, pero muchísimo para hacerse de un nombre. Aunque si de verdad quiere hacerlo, va en el camino equivocado.
Ser el hijo de Federico ya lo hace ir en desventaja. Y hasta hoy lo q el muchachito representa es solo una oda al demérito, algo de lo q nadie podría estar orgulloso. Ya veremos si América TV se lo piensa mejor antes de meter la pata este domingo. Fin.
Bonus track: y como este chasqui no les miente ya circula la promo de Cuarto Poder para este domingo. El video fue editado con celular y sin musicalizar. ¿Andarán en huelga los editores?
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