Como sabéis, todo este lío viene de muy atrás, concretamente desde 1985, cuando gobernaba Felipe González y su escudero, Alfonso Guerra, observó que de los tres poderes del Estado, El Legislativo, que recoge en forma de leyes las demandas populares;
el Ejecutivo, que las ejecuta y el Judicial, imparcial, que ante discrepancias entre Legislativo y Ejecutivo, decide quien tiene la razòn de acuerdos con las leyes del Estado, éste último, el Judicial seguía estando en manos del régimen franquista...
En aquel momento los jueces elegìan a la mitad de su cuerpo y la otra mitad quedaba en manos del Ejecutivo. Pues bien, Guerra cambiò y logrò que el Poder Judicial estuviera totalmente en manos de los dos partidos para los que fue hecha la Constituciòn...
Fue cuando dijo aquello de “Montesquieu ha muerto” … Así durante 45 años en España el Poder Judicial ha estado en manos de los dos partidos, turnándose segùn quien ganaba...
Y ahora qué pasa? … pues que el PP se niega a la renovación del CGPJ porque conservan la mayoría de cuando Rajoy ganó las elecciones, y ostenta una cuota de poder que no se corresponde con los escaños conseguidos en las elecciones generales, y poco más o
menos sucede con el Tribunal Constitucional, el Tribunal Supremo, con el Tribunal de Cuentas, el Defensor del Pueblo y así … es el resultado del bipartidismo en su afán de controlar al Poder Judicial y toda institución con más o menos poder...
¡Ah, lo olvidaba! ... habéis leído algún comentario al respecto de Felipe González o de su escudero?. Pues así estamos, con el Tercer Poder del Estado secuestrado y claro, en esa situación es normal que dicten sentencias más que discutibles.
Es lo que llaman la 'presión del sándwich', pan, cebolla y salsa de tomate arriba y abajo, y en el medio el chorizo... Bueno, chorizo o lo que más te apetezca. En Rodilla, lo hacen bastante bien...
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