Thread by @mrxmx2019

Periodistas talibanes.🧵

Existen personas que se proclaman a sí mismas como neutrales, partidarias de la libertad de expresión, progresistas. No es nada difícil demostrar que en realidad se trata de meras focas aplaudidoras, personas más intolerantes que el mismo Talibán.

La expresión no solamente se limita a las palabras que se quieren decir, en el momento que se quieren decir. También se incluyen a las acciones que realiza la persona en todo momento, sus palabras, aún pasadas, así como sus actitudes en torno a la realidad.

"Elogio en boca propia es vituperio”. De poco sirve como se califique la persona a si misma, si la realidad grita escandalosamente; todos conocemos el caso del actual presidente de la república. Este comportamiento se repite en diversos medios, uno de ellos es el periodismo.

Portarse "buena onda", realzarse cada tres segundos como "neutral e imparcial", hacer sketchs hilarantes solamente se trata de elementos de una interpretación de un papel, en este caso, del "periodista ejemplar", el modelo para la progresía y un ejemplo de civismo.

El ejercicio periodístico implica crear reacciones a través de la expresión de ideas, no siempre serán reacciones a favor, sino también de rechazo, siempre producto del mensaje emitido, sea mensaje voluntario, o involuntario, basado en los hechos que rodean al periodista.

Es de esperarse cual será la reacción que tendrá el público, al contrastar lo dicho por el periodista, y la realidad que se asoma por todos lados. Incongruencia, mentiras, lambisconería ciertamente no dejarán buena impresión en el público; la reacción será acorde.

Al ser periodista, debería entenderse que "público" no solamente se trata de los fanáticos favorables, sino en general, de cualquier persona que pueda escuchar el mensaje, emita una opinión positiva o negativa.

En fechas recientes, cuentas de esta red social han sido sancionadas por exponer su opinión respecto al ejercicio periodístico de ciertas personas. "Ezkedeke me faltan el respeto". Tanto el respeto, como las mentadas de madre, se ganan, no son gratuitos.

No puede pedir respeto una persona que se la vive burlándose de la realidad, viviendo en un mundo de mentiras, y sobre todo, tratando de hacer extensiva esa realidad alterna a todo el país, comenzando por esta red social. Todos tenemos derecho a reaccionar de manera acorde.

Lo más interesante. El periodista erigido en adalid de la tolerancia, manda a los empleados de su agencia de publicidad a realizar cacería de críticos, razón por la cual son sancionadas varias cuentas. A distorsionar a favor de uno la realidad, aunque sea en una red social.

Resulta patético, que un personaje que representa a la prensa, un reflejo por excelencia de la libertad de un país, se maneje en un nivel de censura propio de los talibanes: "Si no escribes lo que me gusta, recibes castigo". Y lo peor: que contrate a personas para vigilancia.

¿Es muestra de un ejercicio de libertad, que un periodista mande ejércitos de censuradores a tratar de acallar lo que ocurre en una red social?

A un periodista con aires de talibán, no se le puede llamar periodista. Se le llama facilitador de la censura y represión. No hay más.

Sería deseable ver que el periodista talibán mande sus huestes en la vida real, para tratar de defenderlo, y adaptar la realidad a su gusto. Aquí en esta red social, no pasa de ser un mero espacio de exposición de ideas, debate y relajo. Lo real transcurre afuera.

Su grupo de choque del periodista se maneja como "agencia de publicidad". Bien. Debería ya tener contemplado que van a perder publicidad en sus espacios por sus actitudes talibanescas.

Al menos un servidor tiene manera de retirar un poco de publicidad del medio que publica al periodista. Tal vez sea poco, no es la gran cosa, pero es la manera de expresar el desacuerdo en torno a la presencia del normalizador de la censura y represión en ese medio.

Para un servidor, bloquear cuentas no es una opción muy deseable; sin embargo, resulta ser que soy sumamente alérgico a las idioteces y a las pendejadas. Por ello, todas las cuentas que tienen que ver con la agencia de publicidad del periodista, ya fueron bloqueadas.

No importa que sean mentes muy brillantes las que trabajen con esa agencia de publicidad, el viejo refrán que versa "dime con quien andas y te diré quien eres" pocas veces falla. Todos somos conscientes de quienes son nuestros compañeros y amistades.

El ejercicio del periodismo ciertamente implica libertad de expresión, pero de ninguna manera es unidireccional. Tanta libertad tiene de expresarse el periodista, como tanta libertad tiene de expresarse el público, o el ciudadano común.

Las cosas siempre deben ser dichas con las palabras adecuadas, por más crudas que sean. No podemos permitir la normalización de todo aquello que es dañino para la libertad, para la sociedad y para el individuo. Lo que lastima debe ser evidenciado, para actuar en consecuencia.

Externo mi completa solidaridad con todos aquellos que vieron afectadas sus cuentas por los señalamientos certeros en torno al periodista en cuestión, así como expreso mi más enérgico repudio al periodista talibán, su ejercicio contra la libertad de expresión, y sus defensores.