Interrumpo el boom de #Evergrand para comentar una nota que también me pareció un escándalo.
Ayer, el #BancoMundial dijo que suspenderá la publicación de su informe de “Doing Business” luego de recibir reportes internos sobre irregularidades éticas y metodológicas graves. 🧵
La investigación fue realizada por el despacho independiente de abogados Wilmerhale, un bufete estadounidense con oficinas en Europa y Asia.
El informe acusa directamente de dichas irregularidades a Kristalina Georgieva, actual directora gerente del #FondoMonetarioInternacional, y Jim Yong Kim, ex presidente del Banco Mundial.
Ambos habrían impulsado la posición de China en el ranking de economías para hacer negocios haciendo unos "ajustitos".
La investigación arrojó que en el Doing Business del 2018, por ejemplo, la posición de China debió ser la 85 y no la 78. (O sea, le subieron 7 lugares).
Para favorecer al país, el equipo del Banco Mundial identificó tres puntos que podrían modificarse para elevar la puntuación de China.
Por ejemplo, China había aprobado una ley relacionada con operaciones garantizadas (como cuando alguien concede un préstamo con garantía).
El personal del BM determinó que podría darle a el país una mejora en su puntaje citando la ley como la principal razón.
Y pues China feliz. En cinco años, de 2016 a 2020, China escaló 53 posiciones, dentro de un listado de 190 países. (Vean la tabla de la nota final)
Según el reporte de #Wilmerhale, el informe “Doing Business 2018" se publicó en un momento crucial porque la administración del banco estaba en campaña para lograr un aumento de capital. (Y China era un socio importante).
China es el tercer accionista del Banco Mundial, después de Estados Unidos y Japón, según datos de The Wall Street Journal.