El lunes, Jorge ‘Yoyo’ Tovar, hijo del exjefe paramilitar Jorge 40, se inscribió en Valledupar como candidato a la curul de paz de la Sierra Nevada y Perijá. #AbrimosHilo🧶bit.ly/3q6DozZ
En los últimos 7 años, el joven de 31 años ha estado dedicado a promover la reconciliación. De hecho, Jaime Palmera, hermano del guerrillero Simón Trinidad, lo acompañó en la inscripción de su candidatura.
Pero @EEColombia2020 recopiló documentos y denuncias en la zona que evidenciarían, entre otras, que el director territorial de la Unidad de Víctimas, Víctor Hugo Mosquera, le hace campaña al hijo de Jorge 40.
De hecho, el edificio donde funcionan actualmente las oficinas de la Unidad de Víctimas en Valledupar es de propiedad de la mamá de ‘Yoyo’ Tovar, Ana Carolina Velez Salgado, esposa de Jorge 40.
Según miembros de las mesas de víctimas en Cesar, a través de la entrega de indemnizaciones, el director de la entidad genera lealtades hacia él para luego pedir votos.
Los votos serían para ‘Yoyo’ Tovar y para Juan Manuel Daza, candidato al Senado por el Centro Democrático. En sus redes, el director territorial de la unidad manifiesta su simpatía por ese candidato.
Jorge Tovar niega cualquier relación con Víctor Hugo Mosquera y asegura que en el edificio de su familia han funcionado otras oficinas públicas y privadas, sin que eso signifique nexos de ningún tipo.
Aquí la historia completa sobre las denuncias que rondan la campaña del hijo de Jorge 40 a la curul de víctimas en la Sierra Nevada. 👇elespectador.com/colombia-20/pa…
La presencia de Jorge Tovar en la campaña no es el único riesgo para los líderes. En la zona hay un férreo control paramilitar que todos conocen, pero del que nadie habla. elespectador.com/colombia-20/co…
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A esta hora, comienza el segundo día de la audiencia de la @JEP_Colombia en Cali sobre las medidas cautelares en el estero de San Antonio, en Buenaventura. Las comunidades afro realizan actos simbólicos por sus desaparecidos antes de comenzar la diligencia judicial.
En esta audiencia se podría definir si la @JEP_Colombia, como ente judicial, ordena medidas cautelares sobre el estero de San Antonio, Buenaventura, donde podría haber cuerpos de personas desaparecidas por el conflicto.
¿Cuál es la dimensión de la problemática allí? Si quiere conocer más detalles, puede leer este breve hilo o consultar nuestro especial de Los mapas de la desaparición forzada en Buenaventura.
Tras la revelación de @ElEspectador de los #AudiosDeLaDEA y la #Fiscalía sobre el caso #Santrich, queremos darles un contexto de dónde vienen estas pruebas y cómo, a pesar de que los pidiera, jamás le fueron entregadas a la @JEP_Colombia. Hilo.⬇️
Empecemos con que cuando salió el fallo, la #JEP tuvo que aguantar una lluvia de críticas por, supuestamente, haber beneficiado al exguerrillero Jesús #Santrich. Sin embargo, en su fallo de 148 páginas, esta justicia dejó claro que: (Continúa abajo) ⬇️
Existieron graves irregularidades en el procedimiento para recoger pruebas en contra del excombatiente #Santrich por parte del Departamento de Justicia de los Estados Unidos y de la Fiscalía General de la Nación, a cargo del exfiscal general Néstor Humberto Martínez. ⬇️
Acompañamos la instalación de un espacio humanitario en el Guayabero en Meta, conformado por organizaciones sociales para atender la crisis desatada tras los operativos de erradicación forzada. #Hilo 👇
Las comunidades denuncian una política de tierra arrasada y las autoridades defienden estas acciones porque van en contra de la disidencia al mando de “Gentil Duarte”. 👇
Él es Gil Roberto Guiza. Según cuenta, en medio de una protesta para defender las matas de coca, los militares de la @ftc_omega dispararon y una bala le destrozó la pierna. Hoy tiene una platina y para poder dormir tiene que doparse con tramadol. 👇
Este jueves exguerrilleros de las Farc de Ituango llegaron a nuevas tierras en Mutuatá (Antioquia), luego de que asesinaran a 12 de sus compañeros tras la dejación de las armas. Abrimos hilo con la historia 🧵👇
A bordo de buses y 'chivas', 93 personas, entre excombatientes y sus familias, abandonaron el antiguo espacio territorial de Santa Lucía, Ituango.
En Santa Lucía construyeron sus vidas desde la dejación de las armas. Impulsaron proyectos productivos, arreglaron el caserío y estrecharon relaciones con la comunidad. No obstante, las amenazas y el deseo de conseguir tierra para sus proyectos los obligó a salir hacia Mutatá.