La Teoría Olduvai de Richard C. Duncan propuso que la vida útil de la civilización industrial tendría una duración de aproximadamente un siglo, contando desde 1930. Para c. 2050, aseguraba, la vida en esta civilización sería insostenible y tendría lugar un colapso energético. 
Para el año 3000, la humanidad volvería a ser de nuevo cazadora-recolectora y nómada. El nombre de la teoría, «Olduvai», es en honor a la Garganta de Olduvai, en Tanzania, un gran yacimiento paleontológico que fue hogar de nuestros antepasados homínidos hace 2 millones de años.
Duncan profetiza cuando postuló esta teoría en 1989 que las primeras décadas del siglo XXI estaría caracterizadas por una gran escalada en los conflictos armados en Oriente Próximo, región que se convertiría en el foco mundial de las guerras inestabilidad internacional.
Será también los años donde los servicios digitales y el acceso a Internet y a los dispositivos electrónicos se globalicen, haciendo al ser humano cada vez más dependiente de los mismos al punto de para 2030 ya no poder imaginar la vida sin ellos.
Es en esta primera parte del siglo que tendrá lugar el cénit petrolero. A este cénit petrolero le seguirá una crisis energética a gran escala que iniciará como apagones por todo el mundo. Estos apagones, primero, serán temporales, luego las redes de energía eléctrica expirarán.
Esto está relacionado con la producción de combustibles fósiles, ya que el carbón y el gas natural son fuentes de combustible importantes en la generación de electricidad, pero no está claro cómo falla la generación de energía nuclear, si es que falla.
Este fenómeno se le llamará acantilado de Olduvai, tendrá lugar aproximadamente en 2030 y será el inicio del fin. De aquí en adelante la humanidad irá cuesta abajo y sin frenos a un declive que culminará con un colapso civilizatorio a gran escala. Un apocalipsis malthusiano.
• • •
Missing some Tweet in this thread? You can try to
force a refresh
