¿No os parece raro que aparentemente ciertos países desarrollados y con instituciones científicas brillantes tengan cifras horribles y países no precisamente famosos por su buena gestión presenten cifras muy buenas? No mires los territorios, en una pandemia observa los focos.
Portugal tiene cifras de contagiados per capita más bajos q Alemania. ¿Acaso Murcia ha gestionado mejor que Madrid la crisis? Sí el confinamiento llego en la misma fecha a toda España, ¿por qué fue tarde para unos y temprano para otros?
La respuesta está en el comportamiento del foco que les tocó en suerte en su territorio. Si el primer/os contagiados de un foco vivían solos o en familia, si hicieron alguna actividad social en un espacio cerrado, si hubo supercontagiador o la densidad de población de la zona.
Estas diferencias entre focos provocan pequeñas variaciones al principio del brote, pero conforme pasa el tiempo se van amplificando y suponen miles de casos/muertes. La magia de las funciones exponenciales: un foco desbocado porque un contagiado decidió ir al gimnasio
Un ejemplo: en mi pueblo apareció uno de los primeros casos de España, un empresario que estuvo en Milán en febrero, tardó dos semanas en ir al médico, contagió a su mujer, pero mi pueblo no se convirtió en Igualada. Por qué? Mil factores, pero básicamente pura suerte.
Y una cosa va con la otra. Puesto que un brote "virulento" avanza más rápido es mucho más probable que la decisión del confinamiento le llegue demasiado tarde. Por el contrario a un brote "tranquilo" es más probable que el confinamiento le llegue antes de que se desboque.
En política una diferencia de días en una decisión suele ser irrelevante, pero esa diferencia al decretar el confinamiento significaba la diferencia entre el colapso del sistema sanitario o ser alabado por una gestión maravillosa. Cada día de retraso añadía miles de muertos.
Interpretar la gestión política ignorando la aleatoridad en la peligrosidad de los focos significa alabar al presidente de Murcia o Portugal y condenar a Ayuso o Boris. Lo de Sánchez sería aún más delirante pues tendrías que felicitarlo por Sevilla, pero culparlo por Madrid.
