Y eso que no vi el capítulo en el que Jesucristo juega al baloncesto.
La imagen estaba en japonés y el guión, en inglés de Osaka. Algunos capítulos llegaron en italiano y ahí me di cuenta de que, en Italia, no lo tradujeron: lo reinventaron.
Y aunque esto es ficción, por ser infantil, me parece que es educativo/divulgativo, así que lo meto en ese saco.
Sin embargo, yo inventé el nombre de Chicho y traduje todos los nombres.
Y lo de «Rosita» es por Rosa Brañas, mi novia de la adolescencia, a quien nunca le vi las bragas.
Hoy en día, hay docenas, y muy buenos, pero, ah, era otra época.